BETTER PLACE

LVIII

Esa mañana luego de levantarse y desayunar, Jimin empezó a meter la ropita de sus bebés a la pañalera, también pañales y los biberones, alistó ropa para él también ya que faltaba solo una semana para el día del parto y eso le ponía nervioso, pero también feliz, ya quería cargar a sus bebés, darles de comer y darles muchos besitos.

Yoongi había salido a firmar algunos contratos junto con su suegro, por suerte iba a regresar temprano así que bajo despacio las escaleras y empezó a caminar hacia la cocina, iba a preparar lasaña para el almuerzo.

El omega estuvo cocinando por un buen rato hasta que estuvo lista la comida, su esposo le había mandado mensaje hace rato en donde le avisaba que llegaría en media hora, así que Jimin puso la mesa y  trato de mantener la comida caliente para cuando llegara su alfa.

Se sentó un ratito en una de las sillas de su comedor y acaricio su pancita, se sentía muy cansado, esa mañana en especial se había levantado con un horrible dolor de espalda y ahora el estaba doliendo la parte baja de su vientre, no quería decirle a su esposo para no preocuparlo pero sabía que a través de la marca él sentiría el dolor que estaba sintiendo en ese momento.

Afortunadamente Yoongi llegó minutos después, había manejado lo más rápido que había podido. Cuando estaba con su papá empezó a sentir el dolor y angustia de su omega, así que regreso lo más rápido posible.

Al entrar a su hogar, vio a su omega sentando en el sofá, se acercó a él rápidamente y se preocupo aún más al ver las lágrimas que resbalaban por las mejillas de su esposo.

— ¿Que paso?, ¿que te duele? — pregunto rápidamente, estaba muy preocupado por la salud de su omega, no quería que le pasara nada malo

— Yoonie creo que los bebés ya quieren nacer — dijo con dificultad, ya que sentía el dolor cada vez más intenso 

Yoongi sintió su corazón detenerse, sus hijos ya querían nacer y él estaba volviéndose loco al no saber que hacer en ese momento, pero debía ser un papá y esposo responsable, sacó su teléfono y le marco al obstetra, con su mano libre acaricio la pancita de su esposo, sentía que iba a llorar él también en cualquier momento, se sentía muy feliz pero a la vez preocupado.

— Buenas tardes, ¿en que puedo servile? — dijo el obstetra

— Buenas tardes, doctor mi omega tiene dolor en su espalda y en la parte baja de su pancita — le comento con preocupación

— Necesito que lo traiga de inmediato, tiene contracciones así que el parto se adelanto, en lo que llegan prepararé todo lo necesario para el nacimiento de sus hijos

— Si, en seguida iremos para allá — respondió rápidamente

Yoongi colgó la llamada, tenía una mezcla de sentimientos en ese momento.

— Yoonie ve por la pañalera y mis cosas, las dejé listas y en eso yo iré a subirme al auto

Las neuronas del cerebro de Yoongi hicieron corto circuito, quería desmayarse pero no era el momento indicado para hacerlo, su omega y sus bebés lo necesitaban.

— Los bebés ya van a nacer, esto se siente tan irreal — dijo con alegría, pero también con preocupación no quería que algo saliera mal en la cesárea, no soportaría perder a su omega o a alguno de sus bebés, aun así trato de mantenerse calmado para no causarle aún más molestias a su omega, le ayudó a Jimin a levantarse del sofá y lo llevó de brazo

— Lo se, pero pronto tendremos a nuestros bebés en brazos — empezó a caminar con ayuda de su alfa, quien no lo dejó solo en ningún momento hasta llegar al auto, le ayudó a subir y le puso el cinturón de seguridad

— Ire por la pañalera, no tardo — Yoongi salió corriendo, subió rápido las escaleras, agarró la pañalera y las cosas de su esposo, bajo rápidamente y metió todas las cosas al auto

Segundos después el alfa empezó a manejar hasta llegar al hospital, en todo el camino sentía que su corazón latía demasiado rápido.

Por otro lado Jimin, iba un poco más calmado, si bien las contracciones aumentaron sabía que pronto llegarían al hospital y su dolor se iba a calmar, al menos por unas horas.

Llegaron al hospital donde ya estaban esperando a Jimin, las enfermeras le ayudaron a sentarse en una silla de ruedas y se lo llevaron. El alfa se fue detrás de ellos, debían preparar a Jimin y por lo pronto Yoongi tendría que esperar a fuera.

Aprovechando ese momento, Yoongi llamo a sus padres, también a sus suegros y cuñados para avisarles que sus hijos estaban por nacer.

Por otro lado Jimin estaba sentado en la camilla, le iban a poner la anestesia en ese momento y si había algo que Jimin odiara eran las inyecciones, pero debía ser fuerte y valiente en ese momento. Respiro profundo cuando el doctor le aviso que iba a meter la primera aguja en su columna, luego metió la otra y al final las retiro, le había dolido bastante pero ahora ya todo estaría bien.

El doctor mandó a llamar a Yoongi ya que como alfa debía estar junto a su omega en ese momento.

Yoongi se puso ropa especial y entro al quirófano, vio a su esposo acostado en la camilla, habían varias enfermeras y el doctor alli dentro, pero eso fue lo que menos le importo solo se concentro en ir con su esposo, le agarro delicadamente su mano gordita y le deposito un beso en la misma.

— ¿Estas bien?, ¿tienes alguna molestia?, ¿te duele?

— No Yoonie, estoy bien no te preocupes — sonrió

— Sabes algo, creo que voy a desmayarme

— Ya te estas tardando — sonrió

— Que malo eres — hizo un pequeño puchero

— Alfa, puedes desmayarte cuando los bebés ya hayan nacido y los hayas visto, por el momento no puedes

— A la orden mi general — sonrió y suspiro, estaba demasiado nervioso

Una hora más tarde, la pareja escucho el primer llanto de uno de los bebés, era simplemente hermoso escuchar la vocecita de uno de sus bebés.

Una de las enfermeras les enseño al bebe brevemente y se lo llevo rápido a la incubadora, segundos después escucharon el llanto del segundo bebé con el cual hicieron exactamente lo mismo.

Y aunque estaban, rojitos y llenos de líquido amniótico, para Jimin eran los bebés más hermosos del mundo.

Lo mismo sentía Yoongi haber visto y escuchado a sus bebés fue lo mejor que le había pasado en la vida, se sentía tan hermoso ser papá, era un amor que no sabría como describir pero sabía que daría la vida por sus bebés.

— Los viste, son hermosos y perfectos, creo que van a parecerse a ti Yoonie — Jimin sonrío, pero su sonrisa se borro al no escuchar ninguna palabra de su esposo — ¿Yoonie? — se dio cuenta que su alfa se había desmayado justo en ese momento y las enfermeras le estaban dando aire

Si la gestación había sido divertida, la paternidad lo iba a ser a un más al lado de su alfa y Jimin no podía estar más contento por eso.

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