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-Bueno, Heeseung, ya dinos ¿Qué onda con ésta niña?―Se dirigió Riki, codeando levemente al mencionado.

―Estamos quedando.

―Uy, pero la traes loca, ¿verdad?―Preguntó Jay, entre risas.

―Eh, de hecho...―Heeseung dejó salir una risa nerviosa.―Ella a mí. Yo fuí quien le pidió una oportunidad.

―¡¿QUÉ?!―Preguntaron todos al unísono, dejando de lado sus asuntos.

―Uy, quién te viera, el todas mías enculado de verdad.

―No, no, no, no, a ver.―Habló esta vez Sunghoon.―Aquí debe haber algo raro. Es imposible que este hijo de su mamá tenga...¿Cómo se le decía?

―¿Sentimientos?

―Esa madre. Di la verdad. ¿Te gusta porque sabe besar bien? ¿Porque es linda?

―¡Es que no sé! Me gusta ella y ya. Ni siquiera me he fijado si quiera en si tiene cintura o cosas de ese tipo. Si, si sé que estoy hablando como tonto, pero no me importa.

―Wow.

Todos empezaron a aplaudir, excepto por Jake, quién no había dicho ni una palabra. Estaba sumamente metido en sus pensamientos.

―¿Y tú qué traes?―Preguntó Riki.―Andas muy callado. No me digas que también estás "enamorado"―Hizo énfasis en la palabra, imitando una voz aguda.

―Pues sería mentira si te dijera que no.―Respondió este, en un tono casi inaudible.

―¿Eh?

―Olvídalo. Ando estresado por la escuela, es todo. Bye, amigos.

Jake se alejó de ahí, dejando a todos con cara confundida, y a pesar de que lo dejaron pasar al escuchar su justificación, todos sabían que no era eso lo que le pasaba. Tampoco sabían bien que era, así que mucho no podían hacer.
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―¡Choi Jiyoon!

La chica se sobresaltó al escuchar a su amigo llamarla de forma tan violenta.

―Rayos, Kim, ¿qué te ocurre?

Hasta Sage y Saebom se habían visto sorprendidos por la actitud de Sunoo, pero él luego se serenó, haciendo que se calmaran. Llevaban recorriendo media escuela para encontrar a Jiyoon por una simple razón.

―¿Es verdad que andas con Heeseung? Ya me dijeron.

―Eh, Sunoo, nadie te dijo, tu lo escuchaste...

―Bueno, eso, pero Jiyoon, ¿Es verdad?

La mencionada rodó los ojos.

―¡Si es verdad!

Exclamaron sus tres amigos al mismo tiempo.

―Ajá, no se emocionen, se lo acepté sólo para que me dejara en paz. Va a ser una semana.

-Ya te quiero ver.-Se rió Saebom.

-Pues no está tan peor, si lo ves de lejitos.

Los chicos hicieron ruidos de ambulancia.

-Los odio.

-Tambien te queremos, Yoon.
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Luego de eso pasaron unas cuantas semanas, los exámenes semestrales estaban a la vuelta de la esquina. Con Saebom y Sunoo ocupados en un grupo de estudio organizado, y Jiyoon con su ahora novio oficial Heeseung, Sage se había quedado sola. Mentiría si dijera que no había perdido un poquito de atención en clases, más sin embargo estar estudiando tan arduamente la había ayudado a olvidarse por un momento de toda la situación de Jake. O bueno, eso parecía. Hasta que se encontró en la biblioteca batallando en silencio para resolver unas fórmulas, y entonces sintió como alguien se le acercaba por detrás.

-¿Estresada por los exámenes?

"No, Jake, fíjate que estoy perfectamente." Pensó.

-Solamente el de física.

-Préstame eso, creo que sé cómo hacerlo.-El chico se sentó a su lado, para luego deslizar el cuaderno hacia él y tomar el lápiz que estaba detrás de la oreja de Sage. (Lo cuál la hizo sonrojarse levemente.) Luego de un rato de estar descifrando el ejercicio, comenzó a resolverlo.-Mira, antes que todo tienes que despejar. No estás despejando, por eso no te sale.

Sage quería concentrarse, y a pesar de que había entendido perfectamente la indicación, le parecía muy atractivo como la luz del sol que entraba por la ventana iluminaba el rostro de Jake, además de que este se había tomado el tiempo de explicarle el problema. Pero descubrirse a sí misma mirarlo como tonta la hizo volver a poner los pies sobre la tierra.

"Cielos, Moon, no, él no te quiere, sólo está siendo amable, no te confundas."

-¿Sage? ¿Ya le entendiste?-Preguntó con esa brillante sonrisa suya.

-¿Eh? Si, si, ya le entendí. Gracias.

-Espero que te vaya bien en tus exámenes.-Luego de quedarsele viendo a la chica por unos segundos, Jake podía jurar que sintió un hilo de saliva salir de su boca.-Voy...por un libro.

Dijo, para después levantarse y dirigirse a los estantes mientras se maldecía a sí mismo por actuar como un idiota frente a Sage. Pero no se culpaba. Esa sonrisa, esa inocencia, esa belleza tan natural, había completamente cautivado su atención y pensamiento entero. Aunque también sabía que no era como las otras, y no le iba a ser fácil "conseguirla", lo cuál sonaba bastante distinto a lo que Jake realmente pensaba de ella. Por primera vez no quería conseguir a una chica, quería verla feliz.

"Bien, Jakey, ¡ya eres todo un hombre!"

"Y que era antes, ¿dinosaurio?"

"Ja, ja, que gracioso."

"El amor no existe, estás alucinando niño, ¿Hola?"

Rodó sus ojos ante el pequeño debate que estaba ocurriendo en su cabeza ahora mismo. Luego de encontrar el libro que necesitaba, volvió hacia la mesa en la que se encontraba Sage, solamente para encontrarse con que ella se había quedado dormida, y cómo no, llevaba toda esa semana estudiando sin parar. El chico se limitó a sonreír y abandonar el lugar. No sin antes quedarse un momento admirando lo adorable que se veía. Se miraba tan linda que sentía unas ganas indescriptibles de protegerla del mundo entero. Se sentía como un loco ridículo por pensar así, ¿Le importaba? En lo absoluto. Definitivamente iba a cumplir su objetivo.

𝐀𝐑𝐄 𝐘𝐎𝐔 𝐅𝐎𝐑 𝐑𝐄𝐀𝐋? ★ Jake Sim.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora