Miradas discretas
—Narrador.
El cielo empezaba a escurecerse cuando todas las personas que vivían en la gran mansión, se habían encontrado en una reunión en el salón, discutiendo de un problema que sucedió hace unos días.
Al día siguiente de lo sucedido con Emiko y Hikaru, llegó un sobre, no se sabía quien ni cómo lo habían mandado, pero ese sobre contenía imágenes, imágenes de cada uno haciendo diferentes cosas, desde Emiko, Sara y Megan en un centro comercial hasta James sentado en donde se suponía era un restaurante privado.
No había nada más que eso, fotos que iniciaron la pelea que días después sucederá y que todavía ninguno sabe.
—Esto es un aviso, una amenaza tal vez—divagó el modelo pensando en alguna hipótesis que los lleve a saber el porqué de ese sobre, su voz intentaba ser calmada, pero en verdad los nervios le carcomian. En el sobre había una imagen de el en su cuarto, ¡En su cuarto! Ese lugar solo tiene una ventana y es casi imposible mirar por ahí ya que se encuentra en un lugar alto, ni siquiera hay tejado por donde colarse. Además de que la mansión está protegida por una muralla a su alrededor, y sólo se puede entrar por la puerta grande, que está supervisada por guardias.
—Es un aviso. Llamaré a nuestro padre para que sepa nuestra situación.—habló el único varón de los hermanos Ross, su voz ahora siendo neutral se dispuso a levantarse del sofá donde estaba sentado para llamar a su padre, hasta que la mayor le bloqueó el camino, impidiendole pasar.
—No llamaras a nadie.
—Nuestro padre debe saber de esto, dejame pasar Ana.—nuevamente intentó pasar, siendo bloqueado otra vez ahora con la otra melliza. Suspiró, tenía que llamar a su padre pero ellas eran sus hermanas mayores.
—El no tiene porque saber de esto. Así que no dirás nada ¿entendido?—Su mirada y rostro no aceptaba una negativa de su parte, así que sin decir nada se volvió a sentar al lado de su prometida, esta sonriendole de lado para intentar calmarlo, pero nada.
Aunque solo bastó una mirada tranquilizadora de la castaña, Megan, que lo miraba desde lejos, para que su semblante cambiara a uno más tranquilo, casi neutral. La mirada del joven Ross se posó en ahora la mano entrelazada del que estaba al lado de la castaña en un intento de calmar los nervios pero que la castaña al notar la persistente mirada del militar, decidió apartar su mano de manera cuidadosa.
El peli naranja se acercó hacia el mayor que estaba sentado tranquilamente en otro de los sofás, tenia una pierna encima de la otra y solo disfrutaba del espectáculo que formaba la familia Ross. El menor se acercó a el para susurrarle en el oído.
—Seguramente ese chico tenía algo que ver con esto.—dijo en un susurro mientras se escuchaba el murmullo de los demás al seguir debatiendo.
—¿A que te refieres?
—Al chico de la otra vez, al que lo obligamos a hablar y el que habló sobre mi..sobre ese señor.
El mayor ya lo había pensado, solo que había decidido no decir nada, solo haría que los demás se alarmaran y preguntarán por el, sin saber que ese chico en ese mismo instante estaba siendo comido por ratas y gusanos.
—Ya lo hablaremos. Ahora, ¿que es lo que te pasa con Emiko?—ya que el no decía nada y solo se había dedicado a mirar lo que hacían los demás, también se había dado cuenta de eso, las miradas, sonrojos y sonrisas entre su amigo y la mejor amiga de este, que pasaban desapercibidas para los demás pero para el no.
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Only Us (Jara)
Fanfic·(AVISO) ESTE LIBRO PUEDE TENER MALAS PALABRAS, ABUSOS, VIOLENCIA, Y CONTENIDO EXPLICITO +18· Todo quedara a tu responsabilidad si lees este libro. James Weasley, una figura envuelta en soberbia y egoísmo, despliega su presencia con una seriedad que...