Capítulo 28[ Un Pequeño Secretito]

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Mina volvió a casa bastante aturdida y sin saber bien porque su amiga iba a un lugar cómo ese. Quedó estática unos segundos antes de salir de allí por miedo a ser vista por los dos gorilas que habían en la puerta y que le hicieran algo, no sabía bien que hacer, a quien acudir o cómo proceder con esto por lo que por el momento simplemente entró en negación y dio una pequeña excusa para la pelimorada en lo que volvían a hablar.

Eso no quitó el hecho que siguió dándole vueltas al asunto durante mucho tiempo en la soledad de su habitación, si bien podría llamar a su amiga y aclarar esto no tenía la mente en ello, que entrara a lo que parecía un bar stripper no era algo que aún pudiera entender del todo.

Sabía que esos lugares eran un tanto especiales por decir poco y cómo tal Kyoka era en quien menos pensaba con algo así, antes se veía a ella misma bailando de manera tan sugerente que su amiga ruda y fuerte, incluso si por poner a sus amigas en alguna situación así antes pensaría en Tooru que en Kyoka para estar frente a tipos y bailarles de manera muy cercana.

Estuvo tanto tiempo pensando en ello que se había tornado la noche y con ello vino un poco de aclaración mental, primero lo primero debía hablar con Kyoka para explicaciones a todo esto y ya tenía una buena idea para hacerlo.

Mina- ahora... - puso aquel collar en su mesa le tomó una foto y claro la envió a su amiga- necesitamos hablar... - fue lo único que escribió antes de dejar su teléfono a un lado y comenzar a hacer sus tareas para distraerse

Por su lado la pelimorada ni tenía su teléfono a la mano, si bien se pasó todo el día repasando los posibles planes que usar en contra del líder Yakuza en la noche tenía trabajo por hacer y en eso estaba justamente cuando su amiga envió el mensaje.

Cómo tal estaba haciendo algo en conjunto con otras chicas de la zona primeriza, un espectáculo especial para su gusto y dado que las chicas del lugar conocían más a los pervertidos que iban que la misma Kyoka, ellas decidieron que hacer y aunque no le terminó de gustar allí estaba bailando a un montón de tipos que suplicaban por más mientras internamente se moría de asco.

Kyoka-( porqué tuvieron que escoger porristas?!) - aún con la sonrisa encantadora que daba y los pasos que dejaban ver demás odiaba usar el traje de porrista, le traía ese recuerdo del festival deportivo y por mucho que sea un uniforme diferente seguía siendo algo incómodo

- hoy Heart Star está muy radiante... - uno de los tipos babeo mirando cómo la chica saltaba con ánimo dejando ver bajo su falda

- no lo sé... Prefiero cuando es dominante, es algo que le queda mejor- otro le respondió- no es por que no me guste verla tan dulce, me encanta cuando me mira por encima del hombro- de sólo recordar ello su cara se tornaba rojo

Kyoka- ( por lo menos ya me estoy ganando fanáticos)- miró en general a todos los tipos que la rodeaban y no se retuvo en burlarse un poco por lo que se deslizó hacia el suelo teniendo sumo cuidado con mostrar su ropa interior roja antes de poner una mano sobre su falda cubriendo de más

- eh? - los tipos miraron cómo la chica se ponía roja de vergüenza cerrando los ojos cómo si fuera la más inocente del lugar antes de lanzar la mirada más suplicante que pudiera hacer- esta chica será mi ruina... - murmuró uno sacando dinero de su billetera y lanzando a la pelimorada la cual sonrió hacia nadie

Esas dos horas no las disfrutó cómo otros días claro estaba pero se ganó mucho con ser la niña inocente y pervertida sin remedio eso no lo podía negar aún así tan pronto cómo abandonó el escenario fue a su camerino a descansar un momento, beber algo y probablemente cambiarse para un poco más de diversión nocturna, no es que fuera tan tarde ( pasaba de media noche) y aún tenía ganas de un poco más antes de ir a dormir sin preocupaciones o eso hasta que miró su teléfono...

atrapada en el deseo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora