Los tres meses habían pasado y cómo ya era costumbre en el templo del cielo era hora de cambiar a ciertas chicas de zonas nuevas y darle unas vacaciones a otras, los que iban con bastante regularidad sabían la política del jefe con respecto a las chicas y cómo pasaba cada tres meses las chicas iban cambiando, habían nuevas chicas en la zona del inicio y nuevas integraciones en las otras zonas, las chicas que se iban sólo lo hacían por un tiempo antes de estar de manera bastante intermitente en el bar o en algunos casos significaba que la chica no iba a volver, ya sea porque consiguió algo mejor o simplemente ya no quiere. De cualquier caso era un momento emocionante para todos quienes estaban alli, significaba que gran parte de las nuevas podían por fin dar bailes privados por lo que más de la mitad estaban más que gustosos de dar todo lo que tenían en la cartera para disfrutar específicamente a la chica que más les atraiga.
Y claro con estos cambios también las chicas tenía que cambiar tras bambalinas, los camerinos no es que cambiaran muchos, habían un par de chicas que si debían pasar de un lado de los camerinos a la otra punta gracias a que también estaban divididas por zonas ( así es más fácil organizarlas), en el caso de Kyoka estaba más cerca del bar en lo que podía considerar la zona de las bellezas del oriente y claro cambiando su instructora ahora que avanzó más.
Kyoka- sinceramente no esperaba que tu fueras mi instructora Janet- la peliazul sonrió maternalmente
- la chica que más ah estado en este lugar es la que más sabe cómo funcionan las cosas... - explicó el funcionamiento de esto- yo llevo demasiado, soy la única opción viable- la pelimorada le miró asombrada
Kyoka- cómo se acomodan aquí? Es lo mismo que en la zona de inicio? - la mujer negó con tranquilidad
- es algo un poco más diferente en realidad, dado que ahora se puede pedir a las chicas dar un baile privado, complica un poco las cosas para la salida, así que cuando se pueda se te avisa de que puedes tomar, lo más tranquilo es al comenzar la noche, cuando todo es mucho más calmado- explicó a la chica la cual se mostró nerviosa
Kyoka- cómo es eso de baile privado? - la mujer sonrió de lado algo divertida de la situación
- eso es un poco más difícil, Izuku es quien da las habitaciones VIP dónde dan los bailes privados, los tipos que lo piden siempre se les indica no sobrepasarse con quien pidieron, lo que pasa a puerta cerrada es un poco más íntimo con los clientes, es algo más de ellos te indican lo que quieren ver- la chica asintió nerviosa- relájate Kyoka-san seguramente Izuku no te enviará a alguna habitación VIP tan de prisa- la pelimorada suspiró- eso no evita que sea probable que ya tengas una lista de espera por cómo has actuado en estos meses... - la chica se quedó paralizada
Kyoka- eso da miedo... - murmuró asustada a lo qué su instructora helada le dio un abrazo tratando de calmarla
- Kyoka-san no es que pueda decirte algo para calmar esa incertidumbre por algún tipo que quiera verte exclusivamente a ti pero lo que si puedo decir es qué nadie sube allí hasta que en verdad sea seguro para nosotras, Izuku nunca permitirá que se nos dañe de alguna manera- la chica asintió cómoda en los brazos de la mujer- bien ahora ve y alístate, quiero que seas la que de el inicio de la noche
Kyoka- si señora! - corrió hacia su camerino dejándola sola
- espero que pase por lo menos un mes antes que comience a ir arriba... - murmuró para si misma, su jefe le había dicho lo que sucedía con la pelimorada y lo deseada que era
Desde el momento en que Kyoka subió y capturó las miradas de todos Izuku tuvo problemas menores con los tipos que querían mucho más de ella que sólo dos pocas horas y le reclamaban al pecoso qué la deje subir a las habitaciones y claro el peliverde los sacó rápidamente.
Ahora que la chica estaba puesta en la zona oriental ya era libre de dar espectáculos privados, el pecoso estuvo todo el día viendo todos los tipos calenturientos que esperaban recibir un baile privado de Heart Star, eran de las pocas chicas que en verdad era deseada tanto y podía llegar a entenderlo. La pelimorada cuando subía al escenario mostraba ferocidad e indiferencia ( generalmente) lograba cambiar con cada espectáculo y gracias a esa adaptabilidad es que lograba atraerlos.
Muchos esperaban recibir un si absoluto en el primer día sin saber la molestia que estaban siendo para el pecoso todas estas peticiones, aún si ya estaba en la zona oriental no quería atosigar a la chica con tanto tan pronto, ella no merecía eso por lo que los iba a retener un buen rato hasta dejarlos disfrutar de ella.
Cinder- en verdad esperaba encontrarte mucho menos ocupado...- a su despacho apareció la mujer de fuego con una sonrisa burlona
Izuku- vienes en un momento perfecto, la niña ya está a salvo y Jiro-san ya está en la zona oriental- señaló a la ventana atrayendo la atención de la mujer
Cinder- que tal lo está haciendo? - el pecoso seguía revisando sin responder - Izuku...
Izuku- lo hace tan absurdamente bien que me ves rechazar a demasiados que quieren su servicio privado...- contestó algo molesto con esta situación
Cinder- estás molesto por qué una chica esté bailando para alguien?! - sonaba cómo una locura, el chico parecía celoso
Izuku- no estoy celoso si es lo que piensas, estos idiotas piensan que pueden tocar de más a Jiro-san y sabes lo que pienso de eso- habló irritado y denegando a otro
Cinder- di lo que quieras chico pero eso suena a celos... - habló burlona- por fin alguien toco tu corazón de cristal... - habló con gracia mirando discretamente hacia su alumna- vaya... Está haciendo de monja? - preguntó algo asombrada
Izuku- en la última semana tuvo la afición de la monja inocente que trae a todos al pecado... Le funciona muy bien lo de ser la niña inocente... - se estaba cansando de toda esta situación
Cinder- cual fue tu preferido Izuku? - preguntó a sabiendas que el pecoso respondería en automático
Izuku- me gusta cuando es la roquera, la mirada de indiferencia y cómo los ignora a todos... - respondió sin más dándose cuenta al instante lo qué había dicho- espera Dios no! Yo... - la mujer le miró con burla mientras el se sonrojaba
Cinder- te gustan rudas eh? - se burló del pecoso el cual soltó un suspiro
Izuku- por favor no se lo digas... Ya tengo suficiente con esto- no quería a la pelimorada molestando aquí y poniéndole en situaciones vergonzosas
Cinder- awww relájate no pienso decirle nada... - fue demasiado fácil convencerla- pero...
Izuku- sabía que había algo más- soltó un suspiro para después mirar a la mujer a la cual su cabello se iluminó
Cinder- cuando la invitarás a una cita? - el pecoso soltó un suspiro
Izuku- en verdad te empeñaste mucho en volverla una versión de ti no es verdad? - la mujer era ahora la sorprendida- Jiro-san hace las mismas bromas... En verdad quieres que sea cómo tu? Y que tengamos una relación para que termine cómo la tuya con Eraser? - la mujer se quedó sin palabras
Cinder- vamos no te pongas tan enojado Izuku... - trató de tranquilizar al chico- sinceramente dudo que tu o ella cometan los mismos errores que Shota y yo cometimos... - habló con tristeza y nostalgia
Izuku- aún lo extrañas? - preguntó preocupado por su amiga
Cinder- más de lo que estoy dispuesta a reconocer... - miró el techo recordando buenos tiempos
Izuku- si sabes que no fue tu culpa no es cierto? - la mujer se mostró bastante mal
Cinder- también cometí mis errores, cuando tengas una novia prométeme que no serás tan estúpido cómo yo y dejarás que tu pareja se explique si? - el pecoso alzó una ceja
Izuku- de acuerdo? - la mujer le sonrió sabiendo que el chico nunca rompería esa promesa
Cinder- ( cómo lo siento Shota...) - pensó en su ex con pesar
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atrapada en el deseo
De TodoPor inconformidad y desesperación generalmente se hacen las más absurdas de las cosas. Guiada por una absurda idea que escuchó cómo rumor terminó en un lugar bastante peligroso para ella, se excusaba mucho con que siempre sabía dónde se metía y que...