atrapada en el deseo

Capítulo 43[ La Más Deseada]

Tsuyu- me sorprendió que Jiro-chan hiciera eso Kero... -ahora que había terminado su día podían relajarse- creí que se echaría para atrás sinceramente...

Ochako- eso fue un poco cruel Tsu... - comentó a su amiga la cual ladeo la cabeza confunsa- de cualquier manera, si es cierto que últimamente Jiro-san parece bastante distinta - las chicas miraron a la pelimorada quien terminaba de empacar todo en su mochila

Tsuyu- aunque ahora parece molesta kero... - la pelimorada simplemente murmuraba para ella con total molestia

Momo- esto... Kyoka-san... - se atrevió a llamar a su amiga la cual le miró con algo de enojo- te sientes bien?

Kyoka- perfectamente sólo es qué... - soltó un suspiro tratando de calmarse- Aizawa-sensei es un completo idiota... - refunfuño para si misma antes de levantarse de su asiento- de cualquier manera nos vemos mañana... - sin más se dispuso a irse, estaba totalmente enojada con su maestro

Momo- eh? - no entendió mucho el por qué de aquel comentario

Kyoka podía entender el hecho de que de la noche a la mañana apareciera tu amigo desaparecido hace muchísimo tiempo, entendía que tuviera mucho en su cabeza cómo para pensar en alguien más pero dejar a la única mujer que parecía realmente gustarle de tal manera...

Era injusto para su maestra que fuera tratada así, no le parecía que fuera desplazada a un lado por algo así, incluso las palabras que soltó su maestro fueron totalmente malvadas.

La situación la puso de muy malas pulgas y eso que ni siquiera fue ella la que fue tratada así, necesitaba relajarse, no quería llegar en la noche con la mirada de muerte ( aunque muchos pervertidos les gustara) no quería ser así, sólo caminó a casa tratando que se le fuera ese mal momento.

Kyotoku- Kyoka necesito tu ayuda- afortunadamente su padre estaba para calmar sus malos ratos

Kyoka- seguro, que necesitas? - cualquier cosa para no pensar en su maestro y sus tonterías

Kyotoku- es respecto a una canción que me llegó para su edición, esperaba que escucharas y dieras tu mas sincera opinión- su hija sonrió lo cual era buena señal

Kyoka- déjame escuchar! - se acercó a su padre quien ponía la dichosa canción para ser evaluada

No era la única que estaba de malas pulgas, por su parte el peliverde de su jefe también comenzó a envolverse en situaciones que eran del todo horribles desde su punto de vista y todo por una petición que llegó a su escritorio de una de las personas que menos quería cerca de su local o si quiera de otro ser humano a ser posible.

No era de conocimiento popular pero habían ciertas personas que estaban prohibidas en el templo del cielo, no es que pasara comúnmente algo así, por lo general las personas se sabían controlar al pasar por la puerta de entrada, entendían lo de mirar y no tocar. Dichas personas habían tratado de pasarse de listos con las chicas tratando de obligarlas a cruzar una muy fina línea que no querían cruzar, eran casi todos jefes de empresas multimillonarias que creían que podían hacer lo que quisieran por el simple hecho de tener dinero, fuera de ellos habían dos de esas personas que en realidad ponían de mal humor a Izuku.

La primera de esas dos personas era un gobernador que parecía totalmente intocable en su momento, podía enviar a quien sea a la prisión simplemente porque él lo decía, para el mundo era un sujeto completamente comprometido con el pueblo y en realidad escaló bastante rápido y muy alto, sólo que al querer más terminó saliendo todo lo malo que tenía y fue a prisión por sus crímenes.

La segunda persona ( quien fue el que contactó a Izuku) era él peor, habían gobernantes y empresarios, estrellas famosas con secretos horribles y aún todas esas personas eran poco al lado de este tipo que casi rozaba con ser un monstruo viviente.

Es alguien que siempre se salía con la suya sin importar que, Izuku había visto múltiples veces cómo este tipo había hecho completas barbaries y salido libre sin siquiera despertar duda en nadie, eso claramente conllevó a mucha arrogancia que parecía ser su caída hasta que veías cómo tenía a múltiples personalidades de poder en su bolsillo, se divertía con el caos y la destrucción y claro tenía una fijación por las mujeres que habían en el templo del cielo.

Era la única persona que pudo en sólo una ocasión atacar a una de las chicas, dejarle completamente destruida mentalmente y salir sin un castigo, en aquel entonces Izuku en verdad se esforzó por que vean que había sido aquel tipo pero no resultó, salió libre y listo para seguir jugando con todo lo que tenía.

- sabes... Me sorprende que quieras hablar conmigo Izuku... - sonriendo arrogante se sentó en su cómodo sofá mirando al pecoso a través de sus gafas de sol

Izuku- voy a dejar algo muy en claro... - puso un pie sobre la mesa de centro sorprendiendo levemente al sujeto- cómo te llegue a ver una vez más fuera de este asqueroso departamento, tu cabeza rodará por la calle- sus ojos parecían devorarcel alma y no era para menos

- ho... Al parecer toqué una vena con lo que pido eh? - sonrió engreído jugando con la paciencia del pecoso

Izuku- porqué quieres a Heart Star? - soltó con frialdad haciendo sonreír al de gafas, su cabello se iluminó en azul con eso

- se escuchan muchos rumores de ella sabes? - soltó con tranquilidad, sabía que el peliverde no le haría nada, no le beneficia en nada- la exótica e hipnótica chica que logró lo imposible... La única chica que ah logrado bajar al hijo de Hisashi de su encerrada oficina en su primer show... - sonrió deseoso- en verdad quiero conocerla...

Izuku- Michael Demiurgo, escúchame atentamente... - usó el nombre completo del tipo, claramente estaba enfadado- no te quiero ni a una ciudad de distancia de ella y si es que te llego a ver a si quiera una  calle de distancia de ella no dudaré en hacer correr tu sangre por la calle - el tipo sonrió arrogante

- por favor Izuku, no me estés amenazando porque si no tu eres él que terminará mal... - respondió la amenaza con tranquilidad- si no quieres darla de manera voluntaria bien... Igual la tendré de una u otra manera... Si estás así por un simple objeto en verdad que le tienes en alta estima, lo cual la hace más deseable- comenzaba a sentirse la tensión entre ambos

Izuku- trata de tenerla... Adelante... - no iba a dudar en eliminar a una mugre de la sociedad

- sabes que me encanta tomar lo que es de otro... Siempre ah sido así... Los juguetes de los demás... Los trabajos de los demás... Y claro las mujeres de otros en verdad tienen su toque... - se levantó encarando al pecoso- y claro Heart Star será la joya de la corona, una vez esté en mis manos, disfrutaré sus gritos y súplicas de piedad mientras la hago mía... - el pecoso apretó su puño, apunto de hacer una estupidez- mientras pierde la esperanza porque su guardia verde nunca vendrá... - sonrió bastante grotesco- ella estará en mis manos, escondela todo lo que quieras que terminará en mi cama deseosa de mi...

Izuku- en verdad... - de sólo pensar en la brillante pelimorada en una situación tan asquerosa le hacía hervir la sangre- das asco... - sin mediar más palabra lanzó un puñetazo a la cara que mandó al tipo al suelo sangrando de la nariz- esa fue una advertencia...

- tsk... - tomó un poco de sangre de su boca saboreando la sangre- en verdad será la joya de la corona... - sonrió mirando cómo el pecoso se iba del departamento- ella será mía... Sólo que aún no lo sabes Izuku...