el capítulo /22/

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                                            .... Día ocupado....

Muevo la cuchara dentro de la taza de café que tengo en la mano.

“¿Te gusta?”.....

le dije a Sheila, que estaba haciendo chips de frutas en una de las islas.

Cocina: No, no lo miré durante los exámenes de Diana, pero luego ella nadó hacia él...

Dijo señalando con el cuchillo en la mano como si fuera un pez nadando en el aire.

¿Pero dónde apareció la tragedia?, dijo, colocando su mano en el costado.

Tomé un sorbo de mi taza y la miré. Entrecerré los ojos y pregunté: "¿Por qué él siente lo mismo acerca de la natación?" "No, no así", dijo, sacudiendo la cabeza.

No, está casado y tiene tres hijos...

La miré en shock. No digas eso. tres. Levanté los dedos y señalé tres....

Sí, sí, tres. Dijo mientras tomaba nuevamente la naranja y la ponía en el exprimidor.

Luego huyó de una relación fallida y luego entró en otra...

Es este casado también... dije mientras levantaba nuevamente el vaso para tomar un sorbo.

No, no está casado, pero nunca me ha puesto cara... para ser honesto.

Él no te ve... Entró otra voz, interfiriendo en la discusión entre Shayla y yo en la cocina.

Ambos nos volteamos para ver a Ezequiel parado frente a la puerta, lo miré y luego de nuevo a Shayla quien ya estaba empujando hacia él.

Lo siento señor, pero los guardias entran por la puerta trasera…

Dijo apuntando con el cuchillo hacia el agachado para ver el lugar de regreso.

Ezequiel la miró agradecido, luego caminó hacia mí besándome. Cómo estás mi reina…

Dijo mientras se detenía para sentarse frente a mí. ¿Se conocen?...

Dijo mirándonos sin entender. Puse mi mano en el hombro izquierdo de Ezequiel.

Sí, dije que es el diseñador de nuestra empresa. La miró y levantó una ceja: Eres nueva y por eso te están privando del castigo...

Ezequiel le dijo: “Esta es Shayla, asistente de mi abuela Diana”

y le dije: “Déjame presentarte a ellos”. Shayla negó con la cabeza, entonces cómo no iba a verme con mi cuerpo y el largo de mi cabello, que nadie más tiene aquí….

Dijo mirándolo con enojo.

Me miró con la mano sobre la boca como si intentara contarme un secreto sin que te dieras cuenta.

Huimos del oud y caímos en un gran agujero. Sacudí la cabeza tratando de distanciarme de él.

Él la miró y levantó el dedo.

Tráeme una taza de refrescante jugo de naranja y ven que te diré lo que estás haciendo para que te vea.....

Rápidamente se dio vuelta y sacó una taza del cajón para vaciar el jugo.

Astera...

La voz de mi padre me llamó desde la entrada de la cocina.

Ven al jardín, hablemos un poco… Dijo mientras se alejaba y yo ponía mi taza sobre la mesa.

Estoy lista para seguirlo, me puse el chal sobre los hombros para protegerme del frío.

Avancé y caminé detrás de mi padre, quien ya estaba sentado en el banco de madera, yo me senté con los pies cruzados y las manos juntas frente a mi pecho.

Sentimientos retorcidos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora