Sacrificios

Veinte

Veinte: Torneo y emociones.

Continuo con aquel beso olvidando cuanto tiempo había pasado, prácticamente se había subido a ella para seguir haciéndolo.

Es menor que tu.

La conciencia de forma muy clara lo hizo entrar en razón, y con un leve malestar se puso de pie de forma rápida. Ella se reincorporó demasiado roja para poder decir que estaba bien, parecia hechar humo por las orejas, y él se sentía tan extraño que solo la vio con los ojos abiertos del asombro y salió hecho un rayo. Afuera y lejos de ella volvió a respirar sintiendo el corazón latir con fuerza, ¿le iba a dar un infarto?. Jamás ha tenido problemas del corazón, ¿por qué le daría uno?. Estaba muy agitado, sudaba hasta por las manos, eso no es normal. Apurado se metió a su baño quitándose la ropa de forma rápida y se metió a la tina de golpe, sumergido vio hacia arriba de forma extraña por el agua en sus ojos, quería gritar por lo que estar bajo el agua fue mejor opción.

Beso a Hinata en su cuarto, le acaricio su rostro, se le subió encima para profundizar el beso que no debió pasar pero ya dio. ¿Cómo regresa el tiempo? ¿Debería borarle la memoria? ¿O debería huir otra vez?
Negó apurado saliendo del agua para respirar, ahora que lo hizo puede distinguir una emoción distinta a las de antes. Esa es que si siente cosas extras por ella, que la ve con enñoracion, y que es demasiado linda.

Harto de estar en el agua se tallo todo el cuerpo de forma veloz, rasco su cuello y cara tratando de olvidarlo todo. Salió del baño y se fue directo a acostar con el corazón botado. Ya dormido probablemente sienta cosas distintas, o lo olvide.

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Escucho el rechinar leve de su puerta al igual que la presencia de alguien, fingió dormir aún tomando su Kunai para atacar.

—¡Feliz cumple años! — gritaron varias voces al mismo tiempo que el empuño su arma.

—¿Oye, que te pasa? Baja eso. — regaño Hanabi con el pastel en mano.

Observó a Itachi, sasuke, naruto, Sakura, Kiba, Ino y a su tía Mikoto con Hinata aun lado.

—¿Ya pasó tanto tiempo? — preguntó viendo el numero de belitas en el pastel.

—¡Sopla ya! Queremos comer pastel. — el rubio muy entusiasta alzó las manos para que se apure.

—Ya, ya, ya. — incómodo de saber que Hinata estaba ahí con él también soplo las velas pidiendo el deseo más ramdom. Irse un tiempo, otra vez.

Salió de su habitación con las personas atrás de él, afuera había algunos ninjas otra vez, todos le felicitaron dándole un abrazo y obsequio, también vio que en el salón donde comer estaba preparado un gran almuerzo para varias personas. Seguramente Hiashi estará estresado por ver tanta gente en su casa.

Suspiro sentándose para comer, todos estaban platicando de lo muy rápido que paso el tiempo, que aún recuerdan a Shisui enano, o que lo recuerdan ir con Itachi para allá y para acá. Comió en familia un nuevo año para su cuerpo, sonrió alegre. Veintitrés años, casado, sin casa propia. Bueno eso suena terrible. ¿Debería sacar sus ahorros y comprar una? Si lo he debe irse, con eso Hinata también. Negó rápido, no, hinata aún debe vivir en su hogar.

Terminando el almuerzo se tomaron una foto todos juntos, vio que Hinata también fingía estar bien, y ambos se juntaron para la fotos como cada año.
En la tarde todos se fueron por sus trabajos o entrenamientos, por ejemplo Naruto se fue corriendo al escuchar que el pervertidos Sannin volvió a un encargo. Sasuke se fue con Itachi y Sakura para entrenar, Kiba y shino se fueron con Hinata y el se quedó aun lado de su tía. Ella oltucaba de forma más cómoda con Hiashi, quien su serenidad es envidiable.