¡Quiero el divorcio! [Dekukatsu]

Primera vez juntos.(Corregido)

***

Midoriya comenzó a dejar marcas en el cuello de su marido.

—Mm... Izuku...—Gemía de gusto al sentir los labios del otro en su cuello y luego en su torso.

El nombrado se sintió feliz y continuó dejando marcas por el abdomen del rubio cenizo hasta llegar a la altura de la virilidad de su amado.

"El pene de Kacchan..."—Pensó maravillado comenzando a tocarlo.

—Aah... Izuku...—Gimió al sentir la mano de su esposo.

—¿Te gusta esto, Kacchan? ¿Estás comenzando a sentirte bien?—Cuestionó aumentando el ritmo de la masturbación.

—Ah, ah, nhg~

Katsuki era incapaz de responderle nada debido al placer que le otorgaba su esposo.

—¡Ah! ¡Ah!

El pecoso, viendo que su amado estaba enloqueciendo, decidió introducir aquel miembro en su boca.

—¡Aaah! ¡Izuku!—Gritó al sentir un repentino y agradable calor en sus genitales.

Izuku, bastante excitado, incrementó el ritmo de la felación.

"Y pensar que me he estado perdiendo esto mientras que ese patán de Kirishima lo ha estado disfrutando cada vez que se veían."—Pensó celoso mientras observaba a su erótico marido.

—¡Ah, por Dios! ¡Izuku!—¡Aaah!—Gimió arqueando la espalda.

En respuesta a su reacción, el de ojos verdes reforzó el agarre que infligía en las caderas de Katsuki.

—¡Ah! ¡Ah! ¡No pares!—Dijo aferrándose a las sábanas.

Haciendo caso a su petición, el primogénito de los Midoriya siguió dándole placer hasta que consiguió que su amante eyaculase en su boca.

—¡Ah! ¡Izuku!—Exclamó al acabar.

Acto seguido, él se limpió la boca relamiéndose los labios y volvió a posicionarse sobre Katsuki.

—Kacchan... No puedo creer que me hayas negado disfrutar de tu cuerpo y de poder verte enloquecer de placer.

—Lo siento, el amor que sentía por Kirishima me tenía cegado.

—Sí, eso lo sé y por eso ahora me tendrás que compensar por el daño causado, ¿no crees?

El de ojos rubí sonrió y contestó:

—Claro, me haré cargo. ¿Algo en especial que quieras~?

—Quiero que mantengas abiertas tus piernas mientras te preparo.

—Vale pero, ¿no quieres que te la chupe?

—No, en otra ocasión.—Hoy prefiero penetrarte directamente.

—Está bien.—Dijo abriéndose de piernas.

Izuku no perdió el tiempo y agarró un lubricante que tenía guardado para ocasión.

—Nhg... Izuku... Izuku...—Gimoteaba al sentir los dedos de su esposo en su interior.

El de cabellos rizados enloquecía a cada momento que pasaba y, en cuanto alcanzó su límite, sacó sus dedos del interior de Katsuki.

—Kacchan, no aguanto más.—Quiero follarte.

—Hazlo.—Muéstrame lo que me he estado perdiendo.

Excitado a más no poder y sufriendo a causa de su gran erección, se puso un preservativo y procedió a penetrarlo.

—¡Aah...! ¡Kacchan!—Gimió del gusto al empezar a embestirlo.

—¡Izuku! ¡Izuku!—Gemía de gusto al sentir la enorme virilidad en su recto anal.

"¡Dios mío! ¡Es más grande que Kirishima!"—Pensó mientras gemía sin parar.

—¡Ah, Kacchan!—Bésame...

El rubio cenizo no se demoró y tomó de la cara a su esposo para besarlo de forma apasionada.

"Izuku es muy bueno en esto y eso que se supone que es virgen."

Su esposo continuó moviendo sus caderas y el ambiente se calentaba mucho más.

—¡Aaah! ¡Izuku, ya casi me vengo!—Gritó aferrándose a él.

—¡Y-Yo también, Kacchan!

Entonces el pecoso embistió a Katsuki con fuerza y brío hasta que los dos alcanzaron el clímax. 

Al final acabaron tumbados sobre la cama, quedando el de ojos carmesí abrazado al fuerte torso del contrario.

—¿Has disfrutado de nuestra primera vez como esposos?—Le preguntó acariciando el cabello de su amado.

—Sí, me ha encantado pero... ¿Seguro que eras virgen?

—Sí, por supuesto. ¿Por qué lo preguntas?

—Porque lo has hecho demasiado bien, sabías dónde tocar y cómo moverte.—¿Cómo es que tienes esa destreza?

Izuku miró a Katsuki y le respondió:

—No te pongas celoso, Kacchan.—Hoy ha sido mi primera vez contigo, es sólo que estuve leyendo libros sobre el tema y literatura homosexual erótica.

El pasivo se sorprendió y preguntó:

—¡No estoy celoso, idiota! ¡¿Pero... Me estás diciendo en serio que has aprendido a follar únicamente leyendo libros?!

—Sí, así es.—Dijo con orgullo.

—No me lo puedo creer...

—¿Por qué no me crees? ¿Porque soy mejor que ese patán de Kirishima?

—En parte es por eso pero no es sencillo para un virgen ser tan bueno en el sexo.

—No lo dudo, sin embargo, tal vez sea que  poseo talento para esto; ¿no lo crees?

—Es una posibilidad.

—Lo es y, aún así, no lo quieres aceptar.—A pesar de que sólo me vas a disfrutar tú, Mi Kacchan~—Dijo con tono coqueto para luego darle un tierno beso en la frente.

—Hmp, más te vale o media ciudad querrá quitarme a mi esposo~

—Jajaja. ¡Eso es imposible, Kacchan!—¡Yo sólo te amo a ti!

Katsuki le sonrió y le dio un beso.

—Yo también te amo, Izuku.—Siento mucho haber sido tan idiota.

—Perdonado, Kacchan.—Al menos te diste cuenta.

—Sí...

Se estuvieron dando mimos por un rato hasta quedar dormidos poco a poco.

***

Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!

¡Espero que os haya gustado!