Andorra

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—Menudo viaje me habéis dado con vuestras tonterías en el coche—se quejaba Aitana mientras bajaba del coche e iba adentro del hotel con los hermanos detrás de ella—dos horas y media aguantando vuestras estupideces detrás de mí.

—Y alguien me ha manchado el coche con una cocacola y no miro a nadie—habló dirigiendo su mirada hacia Javi mientras Eric se reía de él—Tú tampoco te rías porque te dicho que no traigáis comida en el coche y habéis pasado de mi puñetero culo.

—A ver, si no te hemos hemos hecho caso es que este señor me ha estado tapando los oídos para que no te hiciera ni caso—se excusó Eric mirando a su hermano.

—¡Bueno ya! No quiero escuchar más excusas baratas, tengo ya bastante con la universidad—habló la castaña poniendo paz entre ellos. Tenía demasiada presión por los exámenes y necesitaba paz y concentración, algo que los hermanos no aportaban.

—¡Me pido la cama grande!—gritaba Javi mientras de llevaba a su hermano por delante tumbándose los dos uno encima del otro.

—Tú no te pides nada, te he pagado una habitación para ti solo—cuando Eric oyó eso, se dibujó una sonrisa pícara en sus labios. Se alegraba de que su hermano durmiese en otra habitación para estar a solas con Aitana.

—Yo me voy para que hagáis vuestras cosas, y utilizar protección, no quiero tener sobrinos tan pronto—habló Javi dramatizando con una mano en el pecho, los pómulos de Aitana se tiñeron de un color carmesí. Javi cerró la puerta llevándose su maleta arrastras detrás de él.

—¿Vamos a esquiar?...

—A esquiar no me refería a tirarle nieve a tu hermano—habló la castaña viendo como los dos hermanos se tiraban nieve entre ellos, y sino se metía en medio no pararían hasta rendirse uno de los dos.

Javi se distrajo un momento y Eric aprovechó para tirarle una bola de nieve a la cabeza ocasionando que su hermano perdiese el equilibrio y acabase en la nieve.

Aitana observaba atentamente la guerra que tenían los hermanos entre ellos. Siempre deseó tener una hermana con quien pudiese vivir momentos divertidos y viajar con ella a donde fuese.

De un momento a otro, se fue hacia la habitación para visualizar desde el gran ventanal la cantidad de nieve que había;gente deslizándose con los esquís, haciendo muñecos de nieve, disfrutando con su familia...

Sintió unas manos agarrar su cintura, Eric estaba detrás de ella viendo como visualizaba el panorama de la nieve.

Tuvieron una discusión hace horas, aún seguían enfadados pero, Eric con sus dotes de encanto, hacía que Aitana no dejase de estar enfadada con él, pero eso no funcionó con ella.

Tati, hasta cuando vas a estar enfadada conmigo?

Se resistió la castaña a no responderle, sin apartar la mirada del ventanal de la habitación.

—Hasta que aceptes que myke towers de ahora es mejor que el de ahora.

—Tú me pones LaLa al lado de Relación Rota y me da una depresión gigante.—habló el castaño.

—Me importa una mierda, acepta que el de ahora es mejor.—siguió negando la castaña.

Eric, con sus encantos seductores decidió usar sus armas secretas:—La semana pasada no decías lo mismo cuando estábamos en mi cuarto.

—Cierra la boca, cretino.—le insultó de broma, cuando iba a salir de la habitación, una mano la agarró del brazo y la hizo quedar cara a cara a centímetros de los labios de su novio.

—A mí no vuelves a llevarme la contraria, ¿vale? Porque sabes lo que hay—amenazó su novio, mirándola con sus ojos marrón penetrantes—Admitelo.

—No.—se negó la chica con voz temblorosa a aceptar la propuesta.

—Bueno, tú decides. Si antes de irnos al restaurante no lo admites, pienso comerte la boca hasta que dejes de respirar—advirtió dejando un pico en los labios de su novia e irse por la puerta.

Aitana quedó impactada por la reacción de su novio, nunca se había comportado así, pensó. Decidió dejar a un lado la anterior situación y siguió con lo suyo, antes de ir a por su maleta entró su cuñado a la habitación.

—¿Qué ha pasado? ¿Y por qué habéis tardado tanto?—preguntó Javi con una sonrisa pícara en sus labios.

—Se ha picado por decir que Myke Towers del año pasado es mejor que el de hace 4 años.—explicó.

—Y me ha amenazado con que sino admito que es mejor el de hace 4 años, me va a dejar sin respirar.

—Son paranoias de Eric, no creo que haga eso.—habló su cuñado sin darle importancia al tema, Aitana asintió insegura de lo que dijo Javier.

Sacó una falda de cuero de su maleta, un jersey de lana blanco, unas medias color carne, una chaqueta de cuero del mismo color de la falda, y una bufanda a juego con el jersey. Se metió al baño y cerró la puerta.

—Joder con la puñetera falda y la puta cremallera.—se quejó la castaña, se le pasó por la mente llamar a su novio pero no quería que volviese a hacerle la pregunta, así que decidió apañarse y después de mil intentos consiguió cerrar la cremallera.

—Oye ait...—Eric entró al baño quedándose boquiabierto y con la cara rojisima viendo como su novia iba vestida, esta se giró mirándole confundida.

—¿Estás bien?—preguntó Aitana acercándose a él, quedó entre el cuerpo de su novia y la puerta de madera.—Al final el que se ha quedado sin respirar has sido tú.—hizo una sonrisa victoriosa.

—Si, estoy bien.

—Te noto nervioso, mi amor—acercó su rostro quedando a milímetros, habló con sus labios casi pegados a los de su novio.

Eric no pudo resistirse más y pegó sus labios de una vez a los de su novia. Sentir esos labios sabor a fresa es lo mejor que podía experimentar Eric.

—Se me va a joder el pintalabios...

—Tranquila, lo voy a joder más aún.—después de decir eso, agarró el cuello de su novia y pegó sus labios con ferocidad, casi dejándola sin respirar. Consiguió lo que había querido.

Se sentía tan desesperado que destrozo el maquillaje de su novia. Le daba completamente igual, solo quería hacer lo que había dicho hace 20 minutos, y lo había conseguido.

Aitana intentaba seguirle el ritmo, pero era imposible seguirle el ritmo a su novio.

—Espero que te haya quedado satisfecho con el beso...—dijo Aitana al separarse de sus labios.

Eric salió del baño, y Aitana casi cae al suelo del desmayó por el beso tan posesivo.

—Tú, sales ya o te dejamos aquí sola—habló su cuñado entrando al baño, se dio cuenta del panorama y decidió preguntar.—Eric,¿verdad?

Asintio Aitana con un poco de vergüenza.

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⏰ Última actualización: Apr 04 ⏰

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noche de Ibiza-Eric Ruiz Donde viven las historias. Descúbrelo ahora