ScarletWidow One shots

Pedazo de ti

Natasha se pone celosa con facilidad y decide demostrarle a Wanda a quien pertenece realmente.

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Todo lo que vio fue enojo.

Era como si su piel estuviera ardiendo y su visión se volvió de un rojo carmesí oscuro, el mismo tono del vestido que llevaba la otra mujer.

Tenía los puños fuertemente apretados mientras apretaba los dientes, respirando profundamente mientras trataba de mantener la calma mientras observaba cómo se desarrollaba la vista frente a ella.

Los celos no le resultaban fáciles a la mujer; siempre mantenía sus emociones bajo control. Nunca se volvió demasiado vulnerable, nunca se permitió sentir nada porque creía que eso la debilitaba. Y como ex asesina, no puedes ser débil.

Wanda fue una excepción.

Wanda olía a canela y vainilla en una cálida tarde de verano y cuando sonreía era como si el sol brillara más y los pájaros cantaran un poco más felices. Wanda hacía que las mariposas en su estómago estallaran en un ataque de olas cada vez que veía a la pequeña bruja. Un pequeño sonrojo subía a sus mejillas cada vez que la bruja sonreía en su dirección. Natasha supo que estaba jodida desde ese momento en adelante.

Así que cuando Tony anunció que esa noche habría una fiesta, Natasha quiso darle un puñetazo. Una fiesta significaba vestirse bien. Una fiesta significaba alcohol. Una fiesta significaba que Wanda llevaba vestidos ajustados que abrazaban perfectamente sus curvas y hacían su trasero aún más delicioso a los ojos de Natasha de lo que ya era.

Natasha no tenía ningún derecho sobre Wanda, las dos eran solo amigas, solo miradas robadas y pequeñas conversaciones coquetas entre las dos aquí y allá. Pero era suficiente para que a Natasha le flaquearan las rodillas cada vez que estaba en presencia de la mujer más joven.

Entonces, cuando estaba sentada en la barra, bebiendo su cerveza, y vio entrar a Wanda, vestida con un vestido rojo carmesí muy ajustado que llegaba justo por encima de la mitad del muslo, Natasha supo que le esperaba una noche difícil.

Wanda era atractiva, cualquiera que tuviera cerebro estaría de acuerdo en que Wanda era atractiva. Llamó la atención de todos en la habitación cuando entró, incluso si no tenía ni idea de todos los ojos que de repente se sintieron atraídos hacia ella cuando hizo su entrada.

Todo el mundo se sentía atraído por Wanda, tanto hombres como mujeres, y la brujita no discriminaba a quién se llevaba a su habitación algunas noches. Ha visto desde a Vision siguiendo como un cachorro perdido a la pelirroja hasta a Carol siendo arrastrada por el pasillo. Y ni una sola vez se le había ocurrido llevar a Natasha, algo que la disgustaba y la ponía bastante celosa al mismo tiempo.

Entonces, cuando Natasha vio a Maria Hill manoseando a Wanda en la pista de baile, ya había tenido suficiente y su visión se puso roja...

Se bebió el resto de su cerveza y la golpeó agresivamente contra la barra, ganándose algunas miradas de algunos invitados que ella ignoró cortésmente. Se levantó de su asiento y fue a la pista de baile para intervenir, pero se detuvo antes de llegar a la pista de baile.

Ella se quedó allí y pensó por un segundo. Quizás había una razón por la que Wanda no la elegía a ella por encima de los demás. ¿Wanda no la encontró atractiva? No, eso no podía ser, estaba buena. Natasha sabía que estaba buena, sus piernas tonificadas y su trasero eran suficientes para que muchos hombres cayeran a sus pies cada noche, pero ella no los quería, la deseaba a ella, deseaba a Wanda, su mira siempre estaba puesta en ella.

Natasha se quedó allí y observó cómo Wanda seguía bailando con María, sus celos crecían cada vez más al ver las manos de Maria Hill recorrer el cuerpo de Wanda.