ScarletWidow One shots

Reunión de padres y profesores.

Wanda Maximoff asiste a la última reunión de padres y profesores del año, ya que se perdió la primera, y conoce a la maestra de Billy y Tommy. ¿Qué ocurre cuando las chispas saltan entre ambas al instante?

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Las conferencias de padres y maestros son la pesadilla de mi existencia. Tener que explicarles a los padres por qué a su hijo no le está yendo tan bien como pensaban que debería o tener que hacerles saber que su hijo duerme durante mi clase porque les resulta aburrida la historia. Pero era fin de año y eso significaba que no tenía que volver a hacer esto por un tiempo. Dejé escapar un suspiro cuando el próximo padre estaba listo para entrar en cinco minutos. Honestamente, no sabía si podría lidiar con otro padre molesto. Empecé a enseñar porque no quería tratar con adultos, simplemente olvidé casualmente que con los niños venían sus padres. Revisé mi lista para ver que los padres de Billy y Tommy Maximoff venían a mi última reunión y me sentí relajada. Esos dos eran mis niños favoritos para enseñar. Siempre prestando atención y dispuestos a participar en las discusiones. Me llamó la atención un golpe en la puerta. Mis ojos se posaron en una mujer asombrosamente hermosa que jamás había visto. Asentí con la cabeza, diciéndole que podía entrar si quería. Ella me envió una sonrisa de agradecimiento y rápidamente entró en la habitación.

"Hola." Dije con una pequeña sonrisa.

"Hola." Ella respondió, sus ojos prácticamente brillando mientras hablaba.

"¿Puedo uh, puedo ayudarte?" Pregunté, viéndola arquear una ceja.

"Eso espero. ¿Es usted la señora Romanoff?" Preguntó.

"Señorita Romanoff. ¿En qué puedo ayudarle?" Pregunté, asegurándome de corregirla.

"Oh, mis disculpas. Soy Wanda Maximoff, soy la madre de Billy y Tommy". Dijo ella gentilmente.

"Oh, um, por favor, siéntate. ¿Quieres empezar o debemos esperar a tu esposo?". Yo pregunté.

"Mi ex esposo no se unirá a nosotras". Dijo con firmeza y sentí que me mareaba.

"Mis disculpas, no estuviste en la última reunión". Dije tratando de ocultar mi sonrisa.

"No te disculpes". Dijo ella llamándome la atención.

"No". Respondí, encontrándome con sus ojos y soltando un suspiro que no me había dado cuenta que estaba conteniendo.

"Entonces, ¿cómo han estado mis chicos? Estuve trabajando durante las últimas semanas, así que quiero un informe completo sobre ellos". Preguntó, sus ojos recorriendo abiertamente lo que podía ver de mi cuerpo.

"Oh, han sido prefectos. Siempre participando, prestando toda la atención, haciendo preguntas, son una maravilla". Dije con una sonrisa.

"¿Nada malo que informar?" Preguntó levantando una ceja.

"No en lo más mínimo. Son buenos chicos. ¿Supongo que se parecen a su madre?" Me atreví a decir.

"¿Cómo es eso?" Preguntó, sacando la lengua para mojar sus labios.

"A mí me parecen buenos chicos". Dije, inclinándome hacia adelante en mi escritorio.

"Bastante presuntuoso de tu parte". Dijo, sus ojos se dirigieron a mi pecho.

"Tienes razón. Tiene unos ojos inquietos, señora Maximoff, tal vez sea una buena chica a la que le gusta que la castiguen". Dije, atrapando sus ojos.

"Tienes algo de piel... expuesta". Dijo entre un suspiro.

"¿Es eso un problema?" Pregunté, levantando una ceja.