Regresa a mí.

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Las ex Natasha y Wanda se ven por primera vez en años en una boda. Wanda tiene una nueva novia, pero Natasha está decidida a recuperar a Wanda.


Persona correcta, momento equivocado. Un sentimiento resonó sobre las amantes a lo largo y ancho. Podría haber funcionado, debería haber funcionado, pero no en ese momento. No ahora. Así se sentía Natasha con respecto a su ex, Wanda. Una mujer hermosa, inteligente y vibrante que Natasha había apartado para perseguir sus propios objetivos. Era su mayor arrepentimiento, no atesorar a Wanda. Estando tan concentrada en el logro que la dejó escapar, y no se dio cuenta hasta que fue demasiado tarde. Entonces, cuando recibió una invitación sorpresa para una boda a la que posiblemente Wanda también asistiría, decidió que no dejaría pasar otra oportunidad.

Exteriormente, si le preguntaras a Natasha en su cara, te diría que rezó y esperaba que Wanda no estuviera en esta boda. Que ella no tendría que ver o interactuar con la otra mujer. Pero internamente, en secreto, vergonzosamente, la única razón por la que Natasha asistió a la boda de Tony y Pepper fue el pequeño rayo de esperanza de poder ver a su ex de tanto tiempo atrás.

Parecía que hace miles de años que Wanda y Natasha salieron. Una aventura, en realidad, que comenzó el verano anterior al último año de universidad de la pareja. Se conocieron en una fiesta organizada por el amigo de Natasha, Steve, y el resto es historia. Las dos pasaron casi todos los momentos de vigilia de ese verano juntas, mirando las estrellas, catando vinos, nadando, haciendo cualquier actividad extravagante que se les ocurriera. Era el paraíso en la tierra.

Pero el año escolar llegó y las dos trataron de hacer que funcionara por un tiempo, pero Natasha estaba obsesionada con las solicitudes para la escuela de posgrado, su currículum de la CIA, su trabajo en el gimnasio. Las citas se volvieron escasas y esporádicas, los fines de semana se pasaban en el departamento de Natasha, pero ella no estaba realmente presente. Las cosas se fueron desmoronando lentamente, y cuando llegaron las vacaciones de invierno, Wanda sabía que tenía que terminar. Meses de abandono la llevaron a romper con Natasha en Nochebuena, un momento desafortunado, sí, pero Wanda explotó en una fiesta cuando Natasha pasó toda la noche con Steve, hablando de los próximos exámenes. En ese momento, fue un shock para Natasha, pero luego de algunos años de reflexión, estaba claro quién tenía la culpa. Quizás un arrepentimiento aún mayor de Natasha fue que nunca tuvo la oportunidad de disculparse. Con esta boda a la vuelta de la esquina, tal vez podría hacerlo.

Está bien podría ser la última vez que viera a Wanda, y estaba decidida a aprovecharla al máximo. Recuperaría a Wanda, incluso si solo tuviera una noche para hacerlo.

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"¡Wanda, no me arrojes! Wanda, te juro por Dios-".

Riendo, Wanda fingió como si fuera a empujar a la otra mujer al pintoresco estanque, lo que provocó que Natasha chillara.

"¡Wanda!".

Wanda concedió, tirando de Natasha de vuelta a salvo al muelle. El impulso hizo que la pareja cayera, Natasha aterrizó encima de Wanda y ambas rieron a carcajadas.

"Hola", Wanda levantó la vista con una sonrisa.

"Hola, a ti." Natasha se inclinó para besar a Wanda, aunque la tarea fue difícil debido a sus risitas alegres.

"¿Puedes quitarte de encima ahora? El vino se calentará pronto".

"Lo siento", dijo Natasha, haciendo que Wanda se pusiera de pie con facilidad. "Aunque me encanta que te inmovilicen".

Wanda golpeó a Natasha juguetonamente. "Yo sé que te encanta".

La pareja regresó a su suave manta de picnic verde, con vino y queso esperando en su canasta tejida. Durante horas, las dos bebían vino, se daban de comer queso fino, se recostaban y miraban las nubes.

ScarletWidow One shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora