New Boy Group

Capítulo veintiuno

—Por favor —dijeron al mismo tiempo los dos alfas.

—¿Por qué yo?, o sea, con gusto los ayudo, pero no preferirían a alguien con quien tengan más confianza, como mi hermana o Monse.

—Ya les dijimos a ellas —comentó Soobin.

—Vale noona nos dijo que fuéramos con Monse noona y ella nos dijo que tu podurías ayudalnos —explicó Minho.

—Ok. Dale wey, ¿qué consejo quieren? —preguntó curiosa—. Si es sobre qué pueden regalar el día del amor y la amistad, pues podría darle muchas opciones.

—¿Eso es como San Valentín o el día blanco?

—Si, pero también le puedes dar regalos a los amigos que quieres que estén contigo por mucho tiempo. ¿Eso me querían preguntar?

—Bueno, en dealidad shi.

—¿Podemos confiar en que no se lo dilás a nadie? —preguntó inseguro Choi.

—Diría que me ofende su desconfianza, pero entiendo su posición. No se preocupen, soy muy buena guardando secretos —sonrió en grande transmitiendo les total confianza.

—Bueno, tengo un crush y quiero darle un degalo por San Valentín, pero se lo enturegaré hasta que vuelva a Corea —jugó con sus manos sintiéndose nervioso.

—Te tienen bien enculado. ¿Puedo saber quién es? —preguntó curiosa.

Minho volteó a ver a su líder pidiendo su permiso para revelar sus preferencias frente a su amiga, Soobin al sentir la mirada del alfa mayor sobre él lo miró confundido, luego de observarlo unos segundos entendió que es lo que quería por lo que dió un leve asentimiento de cabeza.

—Es un amigo de hace muchos años —comentó mirando nuevamente a la chica—. ¿Qué poduría degalarle? No quiero quiero ser tan obvio con mis sentimientos —rascó su nuca un poco avergonzado.

—Así que estamos hablando de un "él" —colocó su mano en su barbilla observando cómo los dos mayores asentían—. Creo que eso sí podría estar difícil —lo examinó de pies a cabeza—. Primero que nada, ¿qué le gusta a tu amigo?

—La múshica y los postures —respondió.

—Pues ahí tienes, regálale algo de su artista favorito —Minho negó—, ¿por qué no? —preguntó confundida.

—Es rico y se lo puede comprar él solo.

—Entonces, regálale su postre favorito.

—¿No es eso algo muy cliché? —preguntó Soobin uniéndose a la conversación.

—Puede que si, pero eso no quita que sigue siendo lindo. Sobre todo si es casero, porque se muestra el esfuerzo y dedicación que puso la persona para darte ese regalo.

—¿Entonces lo tengo que hacer yo mismo? —se señaló a si mismo.

—Obvio. Tiene que ser significativo para ambos, tipo así como la indirecta más directa de tus sentimientos, pero muy bien disfrazada —dijo moviendo sus manos de un lado a otro.