𝕍𝔼𝕀ℕ𝕋𝕀𝕋ℝ𝔼𝕊

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Jungkook

Sandy carraspeó ligeramente, sacándonos a ambos de nuestro momento íntimo con su inesperada interrupción.

-Lo siento por la interrupción, chicos-, dijo, con un gesto de disculpa. -Christopher acaba de llamarme-.

Tory se levantó de la mesa con sorpresa, claramente intrigada por las palabras de su amiga rubia. Sin perder tiempo, comenzó a recoger sus cosas. Sandy, notando la desconcertada expresión de Tory, le puso una mano en el hombro.

-No te preocupes-, respondió Sandy, tratando de ocultar su propia sorpresa. -Solo quiere hablar sobre algunas cosas. Por favor, continúen sin mí-.

Mientras tanto, Victoria, con una voz ligeramente preocupada, se ofreció a acompañar a Sandy. Pero esta última parecía tener otras razones para preferir dejarnos solos-Victoria- habló Sandy, con un tono suave pero firme.

-Sandy, si es de la banda, puedo ir-, continuó Victoria, revelando una preocupación palpable en su voz.

Sin embargo, Sandy parecía tener otras razones. -Victoria, no es necesario que vayas. Aparte, el vino me sentó un poco mal y tengo el periodo. Por favor, continúen sin mí-, explicó con un gesto de incomodidad.

-Oh, vale, no te preocupes-, tartamudeó un poco Victoria, asimilando la situación. 

Después de que Sandy se fuera el ambiente se volvió un tanto más tenso. Me quedé mirando mi copa por un momento, tratando de procesar lo que acababa de suceder. La interrupción había sido inesperada y dejó una sensación extraña en el aire.

Decidí romper el silencio incómodo. -Bueno, supongo que somos solo nosotros dos ahora-, comenté, intentando aligerar un poco la atmósfera.

Tory asintió con una sonrisa nerviosa. -Sí, parece que sí. Espero que todo esté bien-, respondió, jugueteando con el borde de su trago.

Asentí, sintiendo que la preocupación por mis amigos también se filtraba en mi propia mente. -Seguro que lo están. Probablemente solo necesitan resolver algo-, traté de tranquilizarla, aunque no estaba del todo convencido.

Con un suspiro, nos sumergimos en una conversación ligera, tratando de desviar nuestra atención de la situación incómoda que acababa de ocurrir. Sin embargo, una pequeña parte de mí seguía preguntándose qué podría estar pasando con Sandy y Christopher.

El sonido del teléfono de Tory interrumpió nuestros pensamientos. Miré de reojo su  pantalla y vi un mensaje de Sandy. "Me debes una, Victoria. Disfruten su velada ;P", decía el texto. Noté un ligero sonrojo en las mejillas de Tory cuando bloqueó su teléfono nuevamente, negando con la cabeza como si quisiera borrar la imagen de su mente.

Volteé mi mirada, no quería ser descubierto mirando conversaciones ajenas.

-Sandy dice que todo está bien, no es nada por lo que preocuparnos-, informé, tratando de calmar cualquier inquietud que pudiera haber surgido.

-Vale-, respondió Tory con un chasquido de lengua, llevándose su bebida a los labios.

Observé a mi alrededor, notando que el ambiente se tornaba un poco más romántico, incluso sugerentemente sexual. No me había dado cuenta del tipo de espectáculo que se avecinaba hasta que una pareja emergió del escenario.

El baile parecía sensual, como si ambos estuvieran explorando el cuerpo del otro con cada movimiento. La música era seductora, una sinfonía de jazz diseñada para los amantes. Las manos del bailarín viajaban por el cuerpo de su pareja, tomándola con una precisión que parecía casi juguetona.

Suspiré un poco, dejándome llevar por la atmósfera mientras imaginaba que aquella pareja éramos nosotros. Mi risa ligera provocó una risa similar en Tory.

-En serio, la voy a matar-, dijo Tory, negando con la cabeza, lo que me sacó una risa.

-Viendo el lado bueno, podemos conversar-, sugerí, mirándola con una sonrisa. Ella me miró con cierta sorpresa ante mis palabras.- Me refiero a que nos podemos conocer, mas. Claro si tu quieres-

-Ahh, sí, claro. No es como si hubiera malinterpretado algo-, respondió Tory con una risa nerviosa.

-No... no lo hice. Sabes que yo...- comencé a decir, pero luego decidí dejarlo pasar, desviando mi mirada hacia el escenario donde ahora caía agua sobre los bailarines, cambiando el tono del espectáculo

-Me encantaría conocerte más- Sonreí, el brillo en mis ojos era completamente notorio. Me pare recto tratando de sacar mas el pecho, como cuando los animales tratan de seducir a las hembras.

Sonreí, el brillo en mis ojos era completamente notorio. Me pare recto tratando de sacar mas el pecho, como cuando los animales tratan de seducir a las hembras. 

 -No hagas eso, Jeon.-

La juguetona advertencia de Tory sacó una risa de mí, rompiendo la tensión con su bromista burla.

 -No sé de qué hablas- respondí con una sonrisa juguetona, aunque en el fondo sabía exactamente a qué se refería.

-Pareces una paloma tratando de seducir a la hembra-, agregó con una risa, su mirada traviesa indicando que disfrutaba de la situación.

-Eh, ¿una paloma? ¡Vamos! ¿Ahora soy Travis Maddox? además soy aun más guapo que él-, bromeé, aunque admito que su comparación me hizo reír.

Tory río suavemente ante mi respuesta, y luego, con una sonrisa cómplice, continuó la conversación. -Bueno, Sr. 'Más Guapo Que Travis Maddox', ¿qué te gustaría saber de mí?-, preguntó, juguetona, mostrando un interés genuino en compartir más sobre sí misma. Su actitud abierta y amigable me hizo sentir más cómodo, y decidí aprovechar la oportunidad para conocerla mejor.

-¿Has leído el libro?-, pregunté, curioso por saber si ella también había hecho la conexión con el personaje de Travis Maddox, famoso por su encanto irresistible en la novela.

Tory asintió con una sonrisa. -Sí, lo he leído, aunque sinceramente preferiría más a Ares-, respondió con una ligera travesura en su tono.

-Muy innecesaria la respuesta. Pero lo tomo", respondí con una sonrisa. -¿Alguna pregunta que quieras hacerme?-, pregunté, interesado en saber su respuesta.

-Sí. ¿Por qué fingiste estar dormido en el avión?-, preguntó Tory, su pregunta hizo que mi corazón latiera con fuerza, no me esperaba ese interrogatorio. ¿Cómo sabía ella que fingí estar dormido? ¿Me habrá visto?

-Yo... no sé a qué te refieres- intenté evadir la pregunta, pero sabía que no podía escapar de su mirada penetrante.

-Sabes a qué me refiero. Justo cuando aterrizamos, estabas despierto pero fingiste estar dormido-, insistió, su tono calmado pero firme.

Traté de mantener la compostura, aunque mi mente trabajaba a toda velocidad tratando de encontrar una respuesta adecuada. ¿Cómo podía explicarle que había escuchado su pequeña travesura en el baño?

-Bueno, tal vez simplemente estaba tan cansado que me quedé dormido justo antes de aterrizar-, sugerí con una sonrisa nerviosa, esperando que mi excusa fuera lo suficientemente convincente.

Tory arqueó una ceja, claramente no convencida por mi respuesta. "Hmm, eso suena un poco sospechoso", comentó, su expresión indicando que no iba a dejar el tema fácilmente.

Tragué saliva, sintiéndome atrapado en mi propia mentira. -Bueno, quizás quería evitar la incómoda fila que se hace cuando tratan de salir todos a la vez-, improvisé rápidamente, esperando que esa explicación fuera más creíble.

Tory me observó por un momento más antes de asentir lentamente. -Supongo que eso tiene sentido-, concedió finalmente, aunque todavía parecía un poco escéptica. Decidí dejar el tema por ahora, agradecido de que no insistiera más en el asunto.

Con un suspiro de alivio, me relajé un poco, agradecido de haber salido relativamente ileso de esa situación incómoda. La conversación cambió a temas más ligeros, y pronto estábamos riendo y disfrutando de la compañía del otro una vez más.

El ambiente se volvió más relajado y cómodo, y poco a poco, las risas y las charlas se convirtieron en una especie de complicidad entre nosotros. Hablar con Tory era fácil, como si nos conociéramos de toda la vida, y me encontré compartiendo detalles sobre mi vida que raramente compartía con otras person

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⏰ Última actualización: Apr 28 ⏰

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