Crossroads [Winrina]

XVI. La casa.

—Traje pizza—dijo Giselle al entrar al departamento—Con extra queso.

Ninguna de las chicas reaccionó a su presencia. Karina, Ningning y Ryujin se encontraban discutiendo sobre las pistas. Ningning estaba con su computador, con la página que antes Ryujin había encontrado. Karina discutía casi a gritos sobre la teoría que tenía Ryujin. Si no fuera porque ya llevaban una semana en eso, Giselle pensaría que estaban peleando. Solo era su forma de hablarse.

Dejó la pizza sobre la mesa, evitando que la caja tapara los papeles con dibujos, mapas conceptuales, lluvia de ideas o tan solo palabras borradas. Tenían que comenzar a crear un plan de ataque. Para defenderse y de como encontrar a Winter.

Tan solo tenían una pista de donde estaba y era la manilla de una iglesia. Giselle se sentó al lado de Ningning y Karina sacó un pedazo de pizza por obligación de Ryujin. Si iban a pelear, necesitaban tener fuerzas. No era momento de sufrir hambre, estaban en el departamento con el miedo de que un hombre entrara con una ametralladora para matarlas a todas. Paranoia de Ryujin que fue rápidamente contagiado.

—No encontré nada—dijo Yeji al entrar al departamento, ya hasta tenia llaves del lugar. Sacó una libreta de su bolsillo y lo dejó sobre la mesa. Tenía el nombre de más de diez iglesias, ninguno concedía con la imagen que Karina hizo que todas vieran—¿Desde cuándo hay tantas iglesias en un país budista?—se quejó al sentarse al lado de Ryujin.

—Si tan solo me dejara entrar a su mente—suspiró Karina que soltó la pizza como acto de rendición.

"Si tan solo pudiéramos llegar y dispararle en la calle" agitó la cabeza para sacarse ese pensamiento. Llevaba toda la semana con ese tipo de pensamientos. No iba a matar, no quería darle la razón a Namjoon. Esos pensamientos intrusivos no eran suyos. De eso estaba segura y tenía la gran sospecha que eran de Yeji. Tan solo los tenía cuando ella estaba cerca "Se metió con las chicas equivocadas"

—Tiene razón—susurró Karina—Tu padre es policía—le dijo a Ryujin—podemos llamarlos y pedirles ayuda.

—Mi padre me llevará a un psiquiátrico si le pido ayuda por esto. Es un hombre serio que ni loco creería en estas cosas.

—Pero tiene una pistola ¿No?—preguntó Yeji—si el plan es sacar a Minjeong entre hombres peligrosos, lo mejor es tener algo para contraatacar ¿No?

—Ni sé donde lo guarda.

—En una caja fuerte del armario, su clave es 1834—dijo Karina—ahí tiene dos pistolas, para protegerse en un robo.

—Das miedo—susurró Ningning.

—Entonces se lo robo—dijo Ryujin al levantarse.

Giselle también lo hizo.

—Te acompaño—dijo—No puedo ayudar mucho a las chicas, además, alguien tiene que distraer a tus padres.

—Tengo un mal presentimiento—dijo Ningning, pero luego miró la fecha en su celular—debe ser la ansiedad por qué estoy faltando a mis certámenes—agregó—de todas formas, tengan cuidado.

—Solo vamos a mi casa ¿Y me dicen a mi paranoica?—se colocó los zapatos—Volveré pronto, así que déjenme pizza—dijo al salir.

Cuando la puerta se cerró. La dinámica anterior volvió. Ningning siguió investigando sobre el tema y Yeji comenzó a explicar sus teorías ¿Y si no era una iglesia? Pensó que podía ser también una casa antigua o un museo. Esas cosas también tenían puerta de esos estilos. Luego de poco tiempo, las dos chicas comenzaron buscar puertas parecidas en internet, ahora entre museos y casa antigua.

"Estos hijos de puta no deben de ser tan difíciles de encontrar, son simplemente hombres" Karina cerró los ojos, intentando hacer lo posible para dejar de escuchar a Yeji, pensaba demasiado fuerte "Si algún día uno de esos llega a ser mi paciente, lo torturaría por preocupar a Ryujin" apoyó la frente en la mesa y trató proteger su mente entre sus brazos. No lo soportaba.