–Sé muy bien que un sientes cosas por él... No olvido lo de el beso. Fui comprensivo pero me está costando, Isabella. No es fácil saber esto... Solo te pediré algo.–
–Timo...–Me interrumpe.
–Decide de una vez por todas si soy yo con el que quieres estar o es él. No estoy dispuesto a seguir con todo esto. No voy a sufrir por tu indecisión.–Después de eso cuelga.
Mis pensamientos me atrapan por completo de una manera agotadora. Y es que no me había dado cuenta de lo que pasaba en mi, de esos sentimientos que yo no quería darme cuenta que tenía... Pero lastimosamente Timothée los noto.
En mi estómago se crea un hueco y puedo sentir las lágrimas correr por mis ojos.
Quiero a Timothée, lo amo... Pero es cierto que en mi hay un sentimiento extraño por Ryan y que me cuesta sacar de mi.
¡¿Por que mierda existe ese sentimiento cuando me hizo tanto daño?!
En el cuarto retumba el grito más profundo que he podido sacar de mí en toda mi vida. Corro por todo el cuarto con desesperación y en busca de una respuesta.
Pero todo mi acto se ve interrumpido por la inesperada llegada de Lorenzo a casa, así que con rapidez seco mis lágrimas y salgo corriendo de mi cuarto para hablar con él.
–¡Lorenzo!–Grito bajando las escaleras. Lorenzo se gira con rapidez y lo primero en la que me dijo es en dos cosas: La primera es que tiene su ojos hinchado y un labio roto. Pero la segunda cosa que noto es que trae unas maletas.
Oh no...
–Hola...–Baja su mirada a las maletas en cuanto nota que yo las miro.–Emmm... Esto...– En ese momento entra Emma con otras maletas.
–Ya baje las últimas...–Se percata de mi presencia.–Hola Isa...–Su voz deja notar una evidente incomodidad, cosa que se confirma en cuanto su mirada se agacha.
–Hola Emma... Yo.–Paso mi mirada entre los dos y finjo una pequeña risa.–Solo no lo esperaba... Pero no se preocupen por mi, ¿Necesitan ayuda en algo?–Digo mientras intento ayudar con las maletas, pero Lorenzo me detiene.
–La verdad si puedes ayudar... Emma no ha comido nada, ¿Puedes hacerle algo de comer?–Me dedica una leve sonrisa.
–Amor yo...–La interrumpo.
–Oh claro, ya mismo te hago algo... Mejor ven a la cocina conmigo y me dices que te provoca.–Le hago una seña para que me siga. Al llegar a la cocina comienzo a mirar todo lo que hay para ofrecerle. Ella se sienta en una de las sillas que están en la isla y me observa algo apenada, yo la miro de reojo y le sonrió.–Venga, Emma... Tranquilízate un poco, ¿Si? Siéntete cómoda y como en casa porque ahora lo es.–
–Yo... No lo veo de esa manera.–
–¿Que?– Me giro y la observo detenidamente.
–Vamos, Isabella... No estoy aquí porque quiera. Estoy aquí porque fui una irresponsable. Quiero a tu hermano, joder que lo amo, pero esto no es para nada lo que yo quería, y estoy segura que él igual. Tengo miedo y lo único en lo que pienso es que ahora estoy sola.–Había comenzado a llorar y eso me rompió el corazón... Porque así también me sentí yo.
–Emma...–Me acercó y la abrazó con fuerza.–Lo siento mucho por ti, pero tienes que ser fuerte y tornar una decisión... Si no quieres tener a el bebé, esto te apoyare y, aunque le cueste, estoy segura que Lorenzo lo entenderá.–Me agacho un poco para poder mirarla mejor, seco sus lágrimas y agarro sus manos. Ella aún está algo cabizbaja.
–Tú no entiendes nada de esto,Isa... Esto es algo complicado que no es fácil decidir.–
–Oh, Emma... Créeme que entiendo por lo que pasas.–Emma me mira algo extrañada por lo que acabo de decir.–Lo entiendo a la perfección...–
–¿Que..?–
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Dos Almas De Fuego
FanfictionSabes cuándo estás enamorado. Te das cuenta de que amas a alguien cuando; tu respiración es entrecortada a su lado, cuando sientes mariposas en tu estomago al verlola escucharlo, cuando las manos te sudan al intentar hablar con esa persona...esas so...