Gemelos Kim [Chanmin/Changmin]

XVII

Ambos se separaron, desviando las miradas, solo por la cercanía se dieron un beso.

―Ya se fue ―Chan se alejó rápidamente, no quería ver el rostro de Seungmin, mucho menos cuando su corazón casi se sale de su pecho.

Fue hasta la habitación, abriendo la puerta viendo como una mujer se vestía mientras lloraba.

―¡Lo siento! ―se dió la vuelta, dándole espacio a la chica para que pueda vestirse.

―¿Qué pasó? ―habló entre tímido y enojado, no sabía cómo expresar sus sentimientos, no podía si se trataba de Chan.

―Se está cambiando, esperemos un momento ―dijo bajando la cabeza, su rostro se sentía caliente y no quería mostrar su sonrojo a Seungmin.

―La viste desnuda ¿verdad? ―preguntota furioso, de nuevo esa sensación se instaló en su cuerpo.

―Fue sin intención, no quería verla ―seguía con la mirada baja, haciendo que Seungmin se enojará un poco más.

―Si claro, y yo me chupo el dedo ―rodó los ojos, mientras hacia puños con sus manos.

Chan quiso responder, pero la puerta fuera abierta, la chica ya estaba vestida, jaló la mano de Chan y Seungmin, cuando se encontraron en la habitación la chica quiso quitarse la ropa.

―No, no, no, no, no queremos tus servicios ―negó moviendo sus manos y su cabeza, sería difícil comunicarse con ella, la chica volvió a atar su ropa, sonriéndole a Chan.

Seungmin aún no sabía cómo llamar a ese sentimiento, pero le irritaba que Chan sea tan amable con ella.

Chan sacó de su ropa la tela que encontraron en el cuaderno, dándole a la chica la tela.

En cuanto la tuvo en sus manos se sorprendió demasiado, recordaba ese pedazo de tela a la perfección, pero debido al tiempo que no lo veía creyó que solo se lo imaginó, aunque por culpa de esa tela fue que sufrió las consecuencias.

La chica señaló la tela y luego a ella, lo hizo demasiadas veces para que lograrán entenderla.

Hasta que Chan le quitó la tela, hizo con su mano como si estuviera pintando y luego la señaló, la chica asintió muchas veces.

"Esto será más difícil de lo que creí"

Chan comenzó a hacer más señas, para que la chica intenté expresarse.

La chica movió su mano como si sostuviera un pincel.

Pronto Seungmin le extendió una hoja, un pincel y un tarro de tinta, había que venir preparado.

La chica tomó las cosas y comenzó a dibujar, primero fue a una persona tumbada en el piso con mucha sangre,  debajo de ella estaban dos bebés. Frente a la persona en el suelo estaba otra, quién sostenía una espada.

Cuando terminó de dibujar señaló la tela y luego el papel, haciendo que Chan y Seungmin miren detalladamente el papel.

Por los dos bebés que estaban en el suelo se podría deducir que eran los gemelos, la persona tirada y con sangre sería la Reyna, pero ¿quién era la otra persona?

Chan señaló a la persona parada, haciendo que la chica señalé a los bebés y a la Reyna.

―El Rey... ―dijo Seungmin en un susurro.

Chan se quedó perplejo, era imposible que el Rey matará la Reyna, eso sería una condena de muerte para el Rey.

Seungmin quería reafirmar su respuesta, así que rápido dibujo en otra hoja, eran dos personas teniendo relaciones sexuales.

Le mostró a la chica, señalando en su dibujo a la chica y luego a ella, luego señaló al hombre para luego señalar la puerta.

La chica asintió, dejando que unas lágrimas desciendan, por culpa de aquel dibujo toda su vida se jodió.

―El Rey fue quien mató a la Reyna ―el enojo en Seungmin incremento, a ese maldito solo le importaba el poder, tanto que mató a su esposa y abandonó a uno de sus hijos.

―Jamás creería que el Rey fuera tan desalmado ―Chan mordió su labio, ya no sabía que hacer, nunca creyó que la verdad sobre la muerte de la Reyna implicará al Rey ―Pero sumando el suceso de la Reyna y que te abandonará, me demuestra lo escoria que es.

Chan hizo puño sus manos, el enojo estaba llenando su ser, todos estos años que estuvo sirviendo al Rey, tan lealmente, para que al final fuera un desalmado que fue capaz de matar a la mejor Reyna que el reino pudo tener.

―Debe pagar por esto ―salió de aquel lugar, quería atrapar al Rey y hacerlo pagar por todo, por la Reyna y por Seungmin, fue abandonado a su suerte.

Seungmin salió detrás de él, tratando de alcanzarlo, no era el momento para tomar justicia por sus propias manos.

―¡Chan! ―gritó para que se detuviera, no lo consiguió, solo le tocaba distraerlo, corrió mucho más rápido, así logró estar cerca de Chan.

Tomó la mano de Chan, haciendo que este detenga su carrera, con un poco de fuerza hizo que se dé la vuelta.

Y así, sin pensar en nada más, le dió un beso, no uno como el que se dieron antes. Este beso era más demandante y apasionado, sus labios encajaban a la perfección, tanto fue el gusto que ambos perdieron el equilibrio cuando quisieron más.

Seungmin se aferró a los hombros de Chan, no quería separar, no aún. Chan hizo lo mismo, solo que piso sus manos en la cintura de Seungmin, sintiendo que sus mejillas se calentaban por tocar el cuerpo de Seungmin, también porque el beso es demasiado para él.

Su primer beso fue con Seungmin.

Se separaron un poco, tratando de recuperar el aire, pero Seungmin volvió a unir sus labios, si luego inventaba una excusa para hacer esto debía aprovecharse al máximo.

Chan simplemente le siguió el beso, todo su organismo estaba cosquilleando, las mariposas volaban como locas y su corazón estaba más feliz que nunca.

Esperaba que esto no sea una ilusión, le dolería mucho si esto llegará a ser una farsa, porque lo que más tenía era que Seungmin juegue con sus sentimientos.

Ya había asimilado que le gustará Seungmin y que su amor era imposible, pero con este beso sus ilusiones crecieron mucho más.

Cambiando el imposible a un...

"Es posible"

11/02/24