CAPÍTULO 23

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La mirada de Mingi seguía direccionada hasta aquella mesa del fondo, sin saber el por qué sentía que algo no estaba bien, sabia que no era normal que Hayoon estuviese ahí, junto a ese sujeto que, aunque solo haya coincidido con él una vez, no le daba una buena impresión, la forma en la que sonreía y la forma en la que miraba a aquella chica no le parecía cómoda en lo absoluto.

-¿Ocurre algo? - San intento mirar hacia la misma dirección que su amigo, pero su leve miopía se le impedía - ¿Qué tanto estas mirando?

-Nada...- Mingi desvió la mirada y comenzó a acomodar su área de trabajo, acomodando algunas botellas en su respectivo lugar -

-Eres muy raro a veces querido amigo - San golpeo levemente el hombro de su compañero y se fue, dejándolo solo en la barra, sumido en sus pensamientos y mirando nuevamente hasta esa mesa-

No paso ni un minuto cuando noto que aquella chica se movió de su asiento, poniéndose de pie, sonriéndole de forma coqueta a su acompañante y caminando dirección al baño. Sin pensarlo más, Mingi salió enseguida de detrás de esa barra y apresuro su paso hasta Hayoon, jalándola del brazo impidiendo que entrara al baño de mujeres

-¿¡Qué diablos estás haciendo!? - Hayoon empujo a Mingi del pecho, alejándolo levemente de ella, pero este la tomo fuertemente del brazo, manteniendo corta su distancia.

-Eso debería preguntarlo yo, que haces aquí con ese tipo, Hayoon -La forma en la que Mingi hablaba era baja, pero se podía notar a kilómetros la molestia irracional que sentía

- Eso no debería importarte a ti - De nueva cuenta, el delgado brazo de Hayoon intento alejar a Mingi, pero fue imposible- que es lo que quieres, suéltame

- ¿De dónde lo conoces?

Una parte de Mingi sentía preocupación por aquella chica, realmente no sentía confianza de ese tal Seojun desde que Hongjoong le advirtió que no volviera a hablar con él sabia que no se trataba de una buena persona, incluso la energía negativa que emanaba se lo confirmaba, pero, otra parte quería preguntar que tanto sabia de Seojun, quería saber quien era, de quien se trataba ya que si se lo preguntaba a Hongjoong no se lo respondería

- Mingi, no tengo por que responder ninguna de tus preguntas tu y yo ya no somos nada, suéltame - Nuevamente lo empujo, teniendo éxito esta vez, Hayoon entro rápidamente a aquel baño, dejando fuera a un Mingi confundido y rojo de las mejillas por la furia.

Con la respiración agitada levemente, Hayoon se quedo por 5 minutos en el baño como se le había indicado, con una sonrisa de satisfacción en el rostro, con el corazón frenético y un sentimiento de triunfo pues ver a su ex novio actuar de ese modo le daba una pequeña esperanza de poder recuperarlo. verlo preocupado por ella de nueva cuenta la hacía feliz.

Su celular vibro, sacándolo de aquel bolso lujoso color plata vio en la pantalla el numero de Seojun quien minutos antes le había dicho que en cuanto le llamara saliera de aquel baño y se encontrarían en la entrada principal del hotel.

Hayoon salió enseguida y camino por aquel bar, pasando justo frente a la barra, asegurándose de ser vista por Mingi como le fue ordenado por Seojun, tenia que hacer lo necesario para llamar su atención, por ser vista por Mingi y provocarle celos y preocupación al máximo. Ambos conocían el limite de éste, ambos sabían la nobleza que tenia y pese a lo que Hayoon le hubiera hecho, el la cuidaría si consideraba que lo que hacia no era correcto, como en esta ocasión.

Cuando se encontró en la entrada principal, vio como un auto azul marino con vidrios negros se estaciono justo frente a ella; el vidrio del copiloto se bajó, dejando a la vista al conductor, Seojun quien solo le guiño el ojo y señalándole la puerta indicándole que subiera y eso hizo, en cuanto puso un pie en ese auto, su sonrisa se hizo más grande, mirando a aquel perverso hombre que esperaba que hablara.

Besos sabor Whisky ||| MINJOONG AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora