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Otra vez.
Esa misma sensación arenosa tocaba cada fibra de su cuerpo la única diferencia era que ahora esta estaba más húmeda.
—Tenemos que hablar—Fue lo primero que escuchó al ver una mano extendida y a regañadientes la tomó para levantarse de allí con ayuda.
Chris miró detrás del enojado Percy como Annabeth y Grover la miraban sin expresión alguna.
Mal día para intentar ser un héroe.
—60 segundos Percy, solo dame 60 segundos—Pidió mirándolo fijamente, aunque él parecía querer gritarle en ese preciso momento—Denme 60 segundos
Así era.
Porque por primera vez, Percy deseaba gritarle por todo, en especial por nunca decirle sobre Artemisa, y ¿Acaso solo debía enterarse de Chris por los dioses? ¿Así sería su relación?
—Escúchame muy bien, Chrysanthe, nosotr...
Pero antes que Percy pudiese continuar su oración se vio interrumpido por los cálidos y casi arenosos labios de la chica, por mucho que amara lo que sentía cada vez que la tenía cerca, en ese instante no quería eso, se sentía como si ella probablemente se estuviese despidiendo de él.
¡Eso nunca lo permitiría!
—Te amo, Perseus Jackson—Susurró con las mejillas totalmente rojas, debían acostumbrarse a eso o de lo contrario siempre parecerían tomates andantes cada vez que se besaran o se demostraran cariño
—Sigo enojado, Andromeda... no puedes esperar que esto haga que lo olvide—Dijo tratando de mantenerse firme, aunque si lo hacía, Chris podía pedírselo y olvidaría todo, trataba que esta no fuese la ocasión—¿Por qué no me lo dijiste?
Chris dudó en hablar en hablar.
—¿¡Por qué no me lo dijiste?!—exclamó cerrando sus ojos para contener su respiración y furia
—No puedes interferir en nada de lo que pase... ahora, pronto o en un futuro, Perseus...
—¡No! Yo elijo hacerlo, te elijo a ti, no me importa lo que una momia fosilizada o Hades diga, tú estarás bien y cuando regresemos en cada misión juntos al maldito campamento te dire "te lo dije"
Chris asintió.
—Lo haremos... pero ahora
—Ahora deben pasar sobre mi—escucharon a la distancia y por inercia voltearon a ver como el Dios de la guerra se acercaba lentamente y con paso firme hacia ellos con su enorme espada reposando en su hombro.
Annabeth frunció el ceño, tenía mucho que dialogar con su mejor amiga, y ahora con los dos niños pero ¿de que se había perdido? ¿Que hacía el Dios de la guerra allí?
Sobre todo, ¿Por qué Percy estaba colocando a Chris detrás de él para protegerla de Ares? No confiaban en él pero ¿Por que se batirían en duelo si él...?
