Acababan de subir al tren esquivando a un estúpido alto supremo legendario y que además tenía un pasado historial como psicópata y Bam ahora tenía muy poco tiempo para prepararse con el objetivo de enfrentarse al lunático de Hoaquin, quién a diferencia de Jinsung Ha, sí era capaz de matarla.
Khun estaba un poco más tranquilo, mínimamente habían recuperado a Hwaryun y por el momento estaba con ellos y podría ser de gran ayuda, pero al parecer, el tren efectivamente estaba bajo el control de FUG, no solo eso, el conductor del maldito tren, era un fiel seguidor de Karaka, uno de los asesinos de FUG y si mal no sabía, era otro de los que estaban en desacuerdo respecto a la decisión que habían tomado al darle la espina a Bam. Propuso un juego donde la vida de Bam como la de Hoaquin, estarían totalmente en juego para finalmente decidir quién se quedaría con el puesto de asesino, Khun quiso aclarar que ese era un error pero tendría que pensar en otra historia que justificara la existencia de Bam y la decisión de darle la espina. Ella por su parte, intentó alegar que había renunciado a ese puesto, desafortunadamente, el conductor del tren le dejó muy en claro que al tener la espina, la esperanza de FUG estaba en ella, de manera que debía participar en el juego y si se negaba, matarían a algunos de los chicos que habían capturado. No había opción para negarse, y se preguntaba, que tan mal podría salir eso.
La presión de Hwaryun al decirle a Bam que en efecto de sus malas decisiones al querer perseguir a Rachel más las intenciones que aún mantenía ocultas, algunos de sus amigos eran rehenes, orilló a qué Bam fuera la responsable de enfrentar a las bestias nocturnas del tren, y Khun no era estúpido, notaba que Bam había decidido cargar con la culpa.
Era preocupante, su estado de salud por la espina era desfavorable pero Hwaryun insistió en que ella debía prepararse para pelear por la candidatura más el derecho de salvar a sus amigos. Especialmente porque nadie aparentaba creer que Bam podría ganar contra ese lunático, no obstante, el juego se había organizado porque del mismo modo que Bam, no todos estaban de acuerdo en que Hoaquin despertara. No fue algo perfectamente entendible, pero la prioridad era que Bam estuviera lista.
"No tiene ninguna 'voluntad de matar' a su enemigo" —dijo Sachi mientras observaba a Bam enfrentando a su primer oponente en el tren. Khun sabía que hasta hacía poco tiempo, Bam era servida en un palacio, reservada e ignorante de la torre, y en ese momento estaba peleando no solo por su vida, sino por la de todos los que había puesto en riesgo. Sachi habló con ella un momento y explicó algunas cosas respecto a Hoaquin que solo sumaban más carga a la espalda de Bam. Era una pesadilla.
En un leve momento de descanso, sentados en los faros, Khun observó a su amiga, tenía esa pregunta rondando en su cabeza desde que se habían reencontrado, pero no tenía la confianza de cuestionarla después de recuperar sus recuerdos tan abruptamente. Especialmente porque todavía tenían mucho que hacer.
Bam parecía mucho más triste que en su último reencuentro, y Khun la justificaba. Hasta hacía pocos años, era una adoradora del hombre que la mantuvo cautiva por muchos años. Quería preguntar, Bam sabía más cosas que él a ese punto, pero su entrenamiento todavía no iniciaba y las palabras de Hwaryun decían que necesitaban un milagro para vencer a Hoaquin.
—¿Estás bien, Bam? Es demasiado para ti, ¿Verdad? —ella lo miró y sonrió. Khun jamás vio a alguien mentir tan mal.
—Estoy bien. Esto no es nada en comparación a mis maestros en FUG.
Observó a Hwaryun, ella no haría nada que dañara demasiado a Bam, estaba segura que ella era la respuesta al anhelo de FUG, por lo que debía tener un plan de contingencia, pero no podía evitar que sus pensamientos estuvieran revueltos.
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TOG: LA REINA DE JAHAD
Fiksi PenggemarKhun Agüero Agnis, había visto a la reina de la torre una vez. Una sola vez dónde ella lo miró con sus hermosos ojos dorados. Una sola vez bastó para que su corazón joven latiera desbocado dentro de su pecho creyendo que subiría por su garganta y po...