Desde aquella noche

Capítulo 19 - Despejando las dudas

Entré al hotel aquella mañana con cierto nerviosismo por ver a Ainhoa después del beso. No había dormido apenas por la noche pensando en que iba a pasar ahora entre nosotras.

Había aprovechado también para hablar con mi madre durante el desayuno sobre su vuelta a Vera y sabía que tendrían que hablar entre ellas después sobre su reincorporación como jefa de cocina.

Como ya esperaba, mi madre no había puesto ninguna pega al respecto y yo estaba encantada de cederle el puesto de nuevo porque había acabado bastante saturada. Desde luego que valoraba muchísimo su función en la cocina ahora que lo había experimentado y sufrido en mis propias carnes y sabía a ciencia cierta que no estaba preparada para todo.

Me topé de frente con Jose Antonio justo cuando entraba por la puerta.

L: buenos días Jose Antonio, qué tal se presenta el día?

JA: hola Luz, pues parece que para unas mejor que para otras no? - puso cara de pillín y no entendí a qué se refería

L: por qué lo dices?

JA: no te hagas la tonta, que ya me he enterado de la vuelta de Ainhoa

L: ah si, eso parece - qué estaba insinuando? Era imposible que supiera lo del beso

JA: me negarás que no te hace ilusión

L: eh.. si, claro que si. Todos queríamos que volviera

JA: bueno pero.. tu más, no? - juntó sus manos en ese gesto tan característico suyo

L: oye Jose Antonio, estás queriendo decirme algo? - me estaba mosqueando un poco con tanta insinuación

JA: ay Luz, que no soy tonto, que a mi no me engañas - dijo como si todo fuera muy obvio

L: pero que dices? - intenté hacerme la tonta pero no se me daba para nada bien disimular

JA: he visto como la miras y lo enfadada que has estado cuando no estaba por aquí cuando tu eres un trocito de pan siempre, eso tiene que significar algo

L: shhh calla - le aparté hacia un rincón más tranquilo para que nadie nos escuchase porque había dado en el clavo - si es que estoy echa un lío - le dije con nerviosismo

JA: puedes contarme lo que quieras, igual puedo ayudarte en algo

L: tu.. cuando te diste cuenta de que te gustaban los chicos.. lo tenías muy claro?

JA: ufff y tanto, creo que lo he sabido siempre. Tienes dudas con eso? - me dijo de forma comprensiva - es normal si nunca antes te has sentido atraída por otra chica

L: ya pero.. es que yo eso lo tengo claro, sé que me gusta. De hecho me gusta mucho - sonreí mientras se lo decía - a quien no le iba a gustar? Si es guapísima

JA: y qué te preocupa entonces?

L: pues.. ayer me besó

JA: ay dios pero si este barquito ha empezado a navegar antes de lo que pensaba - se llevó las manos a la boca sorprendido

L: qué dices ahora de barcos?

JA: nada nada cosas mías, y entonces?

L: me gustó mucho - confesé - pero tengo miedo

JA: a qué?

L: a no ser capaz de llevarlo con naturalidad, la veo muy lanzada con todo esto y no sé si podré estar a la altura

JA: solo hay una forma de averiguar eso, Luz. Mira, yo lo único que puedo decirte es que si de verdad sientes que ella puede ser tu persona, te lances a la piscina con todo lo puesto. Quizás al principio tengas dudas y no todo el mundo te lo va a poner fácil, pero es tu decisión y es tu vida. Intenta vivirla como a ti te haga más feliz e ignorar lo que te digan los demás