The Queen of Beasts | Rayita X BNHA/BATB Harem

⋒ 11 ⋒ Sin tiempo

Narrador

"Una vez termines de aparearte debes ir a Camel." La monótona voz del Dios Bestia interrumpió por completo la romántica atmósfera que se había creado debido a las palabras dichas por Killian.

_____ seguía sorprendida de que el dios aún estuviera presente, pues antes de salir del espacio le había comentado que serían pocas las ocasiones en las que volverían a interactuar debido a que él necesitaba retirarse para sanar y restaurar su poder original.

'Si realmente el tiempo entre ambas dimensiones ahora es el mismo... En teoría llegué a este mundo durante la noche a reclamar a mi primer pareja y estoy segura que aún no es medio día, pero si este dios quiere que ya reclame a otros dos... ¿Qué tan jodido está este mundo si se supone que Bai apareció ayer en la mañana?¿O se debe a otra cosa?'  Kimura rápidamente comenzó a imaginar varios eventos al sentir que en lugar de estar dentro de un mundo dónde el romance podría florecer, se encontraba viviendo en un apocalipsis.

Fue el ligero apretón de manos de su esposo lo que la hizo percatarse de su abatimiento, pues significaba que Mitchell no podría acompañarla en el trayecto y ya había llegado el momento de separarse.

"La Ciudad de las Flamas es un lugar peligroso para mí." Habló _____ mirando a lo ojos de su pareja. "Pero si tu cuarto llega a ser lo suficientemente seguro, entones te visitaré, de lo contrario podremos vernos en el espacio y pasar tiempo juntos ahí."

El rey se tensó al escuchar las palabras de su hembra, pues él conocía muy bien los peligros que yacían en su ciudad, pero al enterarse de que su compañera igualmente tenía información de ello lo hizo dudar por primera vez.

"Yo..." Una indescriptible sensación abrumó al escorpión por lo que cargó a su compañera y la sentó en su regazo para abrazarla por la espalda y ocultar su rostro en su cabello. "Entiendo..."

El rey tenía claro que su pareja provenía de otro lugar muy lejano y que fue llamada por el Dios de las Bestias, simplemente tuvo la suerte de haberla tomado al momento de su llegada, después de todo ¿Cómo podría una maldita bestia como él ser capaz de unirse a una preciosa hembra como _____?

Mitchell comprendió que ahora sentía miedo, miedo de que su hembra lo abandonara al percatarse de lo tan diferentes que son, pues ella venía a ayudar a las bestias mientras que él los torturaba y mataba sin pudor alguno. Sus orígenes y su reputación sin duda no eran excepcionales para hacer que el sexo opuesto tan siquiera llegara a considerarlo como un pretendiente decente, era fuerte, tenía recursos, pero debido a su progenitor al cual no podía desobedecer sus órdenes y el escorpión no sabía lo que ella podría pensar de al enterarse de su pasado y sus actos.

Kimura no tenía las palabras cambiar el apagado ambiente que ahora se había formado debido a sus palabras, pero era algo que tenía que aclarar. La joven estudiante suspiró al saber que la luna de miel había acabado y a pesar de tener el apoyo del dios, entendía que sus futuras acciones la harían parecer que ella es como la mayoría de las hembras en este mundo, pero no tenía otra opción si lo que deseaba era vivir y lo único que podía hacer era tratar a sus parejas lo mejor posible.

Cuando la bestia sintió a su compañera moverse y bajar sus brazos, el escorpión se mantuvo quieto al reconocer que no tenía el derecho de retenerla y obligarla a mantenerse a su lado, aceptando el hecho de que probablemente sería la última vez que la vería y por ello mantuvo el rostro oculto gracias a lo largo de su pelo, no queriendo encarar el de desprecio de su pareja.

Viendo el lamentable estado de su esposo Kimura sintió que había hecho algo terrible, pues jamás pensó que el rey llegaría a actuar de tal forma al creer que por haber nacido como una bestia errante no le sería complicado el permanecer un tiempo separados.

Sin poder soportarlo la joven elevó el rostro de su hombre y lo comenzó a besar, repartiendo pequeños besos por todos lados sorprendiendo a la bestia que ya estaba dando todo por perdido.

El escorpión aceptó la caricias que le brindaba su compañera provocando que nuevamente se hundiera en la calidez de su cuerpo renovando su espíritu al hacerlo querer tomar el control y escuchar su dulce voz decir su nombre una y otra vez hasta que su piel estuviera completamente impregnada de su aroma.

Poniendo ambas manos en el pecho del mayor la peliverde se separó de inmediato una vez sus labios dejaron de tener contacto, pero la distancia entre ambos continuaba siendo relativamente cercana debido a que el rey la tenía sujeta de la cintura. Kimura se se sintió algo avergonzada e incluso un poco engañada al ver la gran sonrisa en los labios de su esposo, pero aún así esto era mejor que verlo cabizbajo.

"Sé que no puedo cumplir con sus expectativas y brindarles a todos mi atención absoluta, pero haré lo mejor que pueda para hacerlos sentir que son importantes así como yo confío en ustedes." Habló _____ a los tres machos, al mismo tiempo que estiraba su brazo derecho al duó que nuevamente para la sorpresa de Killian, fue su gran hermano Kaiser quién se adelantó y comenzó a lamer los dedos de su futura hembra.

El repentino cosquilleo la hizo estremecerse, aumentando el rubor en su rostro, más era algo a lo que Kimura debía comenzar a acostumbrarse al estar rodeada de tal magníficos especímenes. Para lo machos el apreciar tales reacciones únicamente agregaba más fuego al gran deseo que tenían por la bella hembra y la encantadora fragancia que seguía en aumento con cada caricia que la joven recibía, no hacía más que dejarlos rendidos a sus pies.

Su pequeña invitación era algo de lo que Kimura se arrepentiría en el futuro, pero perdida en el deseo continuó jugando con los labios de Killian al no permitirle ganar el control con facilidad, más llegando a ceder cada que las caricias y suaves besos de Kaiser la estremecían o los besos y mordidas de Mitchell a su cuello la hacían jadear causando que todos los estímulos que recibía su cuerpo la volvieran loca, sin embargo, aquello era simplemente el inicio.