Narrador
"¡Yo estoy a cargo de la cocina!"
"¡Ni siquiera sabías cómo preparar Omurice!"
"¡Aprendo rápido y a _____ le gusta mi comida!"
"¡Desperdicias mucho y ella prefiere mi cocina!"
Kimura escuchó fácilmente la discusión de las bestias mientras bajaba las escaleras, lo que la hizo correr para evitar que la situación empeorara entre ellos. Al abrir la puerta del comedor, la joven suspiró al ver que los tres chicos seguían intactos, aunque claramente al borde de una confrontación. Harvey, al notar su presencia, se acercó de inmediato, para impedirle acercarse por temor a que pudiera resultar herida.
"¡Espinas! Dile a este idiota quién cocina mejor." Exclamó Bakugo con una sonrisa de oreja a oreja, completamente seguro de que él sería el ganador.
La joven se tomó un momento para observar a sus maridos. La intensidad de sus miradas y la tensión en el aire eran palpables, por lo tanto, ella sabía que debía manejar la situación con cuidado.
"Kats, debo admitir que tu comida es deliciosa y Killian, tu comida también sabe muy bien teniendo en cuenta que tienes poco usando artículos de cocina." Mencionó la ojiverde en un tono suave mostrando una dulce sonrisa en su rostro. "Sin embargo, ninguno de los dos se puede comparar a mi anterior chef personal así que dejen de estar peleando." Volvió a decir Kimura manteniendo una expresión de fastidio mientras reprimía la necesidad de activar su kosei para golpearlos en la cabeza.
Siendo halagados y regañados al mismo tiempo, ambos hombres permanecieron en silencio ante el evidente enojo de su pareja, algo que claramente no esperaban. Mientras tanto, Harvey guió a su hembra hacia la mesa, acercándole varios platillos que habían preparado para que así ella pudiera alimentarse y olvidar el pleito.
"¿Qué tan difícil es mantenerse en calma? ¡Aprendan de Harvey!" Gritó la adolescente desde la mesa, justo después de haber comido un huevo cocido y volviendo su mirada al plato de panqueques que el leopardo colocó frente a ella al terminar de hablar.
El resto del desayuno transcurrió tranquilamente para Kimura, quien pudo comer en paz y calmar su enojo. Sin embargo, la peliverde pronto se dio cuenta de que la comida no era suficiente para todos. Ahora había tres bestias más en la mesa, por lo que dedujo que era normal no haber calculado correctamente la cantidad de comida necesaria.
Con su tableta en mano, _____ comenzó a realizar felizmente varios pedidos en línea. Cuando todos los platillos comenzaron a aparecer sobre la mesa, la joven estudiante animó a sus esposos a seguir comiendo hasta que se sintieran satisfechos.
"¿Realmente vas a comer todo eso?" El comentario de Bakugo llamó la atención de la ojiverde que estaba a punto de comerse un omelette. Al levantar la vista, notó que pocos platillos habían disminuido y pensó que esta vez había sido su turno de calcular mal. Después de todo, las compras eran su pasatiempo favorito en Japón.
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The Queen of Beasts | Rayita X BNHA/BATB Harem
FanfictionLa vida estudiantil era divertida e intensa, entrenamientos constantes para lograr el sueño de todo joven de volverse héroe, salidas y fiestas entre amigos como también fallidos intentos de llamar la atención del chico popular del salón. Su vida en...