La vida estudiantil era divertida e intensa, entrenamientos constantes para lograr el sueño de todo joven de volverse héroe, salidas y fiestas entre amigos como también fallidos intentos de llamar la atención del chico popular del salón.
Su vida en...
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Narrador
Sintiendo los rayos del sol sobre su rostro, la bestia finalmente abrió los ojos tratando de levantarse a pesar del dolor. Cuando el leopardo se tocó la cabeza comprobó que tenía un pedazo de piel cubriendo su herida, más el chico sabía que no era obra de Bai.
Ante los vagos recuerdos de las palabras que le dijo la compañera de Harvey, el macho se quedó mirando el suelo contemplando el hecho de que la misma hembra que rescató de la jauría de lobos lo trató igual o peor que Rosa. Pero antes de sacar cualquier conclusión Parker debía ir a ver a Quingquing, pues entendía que la hembra era muy ingenua y él deseaba creer que aquellas declaraciones eran erróneas.
Después de todo, el momento en que la bestia posó sus ojos en Bai Quingquing, el leopardo sintió una fuerte conexión con ella por lo que encontrar su aroma fue sencillo para él, más el hecho de que se mantuviera cerca de la cabaña de otro leopardo lo alteró.
En la entrada de la pequeña choza, en comparación con la que él mismo había construido, Parker golpeó con firmeza la puerta mientras llamaba a la hembra. Al poco tiempo la puerta fue abierta y el olor a sexo inundó las fosas nasales del leopardo que se quedó inmóvil al ver el cuerpo de Bai lleno de marcas tanto rojas como moradas, pero lo que capturó su atención fue el tatuaje de la cabeza de un leopardo justo debajo de la rodilla izquierda de la hembra.
Con el primer golpe la chica se asustó al creer que podría ser algún intruso, más al escuchar su nombre la joven se sorprendió al percatarse de que se trataba de la voz de Parker, por lo que con esfuerzo ella se levantó de aquel incómodo bulto de paja para pedirle a su amigo que la ayudara a escapar de Otto y la llevara con Eve, para así poder eliminar el tatuaje al no saber bien el procedimiento que se requería para borrarlo.
La adolescente en un inicio confió en el leopardo cuando este le prometió que la cuidaría. Con todas las heridas en su cuerpo Bai no escuchó por completo todo lo que Otto le había dicho, terminando inconsciente rápidamente y despertando en breves momentos cada que se sentía incómoda y cuando la chica abrió los ojos ante el dolor en su cuello y la parte inferior de su cuerpo, aterrada ella notó la sonrisa en el rostro del hombre que no dejaba de moverse por más que ella intentara protestar.
Quingquing no podía creer que esa bestia únicamente se excusara de sus acciones por el supuesto derecho de apareamiento al haberla salvado y que además proclamara que lo hacía por su propio bien al no tener ningún macho, más cuando ella le habló sobre Parker, Otto de inmediato comentó que ya le pertenecía a la otra hembra cosa que Bai no creyó en absoluto puesto que no había manera de que eso fuera posible y finalmente viendo al chico de cabellos dorados frente suyo, la joven quería llorar de alegría.
"Todo lo que quiero es estar contigo. Llévame con Eve para deshacerme de la marca." Dijo la chica con voz ronca, aún sin recuperarse por completo. A pesar de que Otto le había prohibido salir, cuando ella sugirió que simplemente quería que Eve viniera a visitarla, el leopardo de inmediato le respondió que la hembra no deseaba verla y Bai simplemente pensó que era otra excusa para mantenerla encerrada.
