Narrador
Con el sonoro canto de las gallinas indicando el comienzo del día, la peliverde se acercó aún más a la fuente de calor más cercana que tenía y sin ánimo alguno de querer levantarse, se acurrucó entre los brazos de su esposo para continuar descansando.
Pero a los pocos minutos su paz fue destruida a causa de la insistencia de su marido para que ella se despertara y así pudiera desayunar. Por ello antes de permitir que esa ave volviera a decir alguna otra palabra, Kimura optó por besar los labios de Muir ya que no había mejor manera de callar a un hombre que hacerlo olvidar la razón por la cuál comenzó a discutir.
Sintiendo los brazos del mayor acariciar sus caderas, la joven decidió profundizar el beso entretejiendo en sus dedos el cabello de su hombre. Los labios de Muir eran suaves pero firmes, y pronto su resistencia a mordisquearlos se desvaneció rápidamente al ceder a la pasión del momento.
En aquel instante el mundo exterior desapareció bajo la calidez de su aliento y el dulce sabor de su boca llena de deseo, provocando que su cuerpo respondiera, su piel erizándose ante cada roce de sus manos.
Los jadeos de ambos eran imposibles de ocultar y necesidad de sentir al otro se volvió más intensa, más cuando el aire se volvió escaso, Kimura mordió el labio inferior estirándolo, así separando sus labios de él apenas rozándose en un último contacto.
"Esposo, Muir me está molestando." Lloró la adolescente apartándose de inmediato del águila ahora que se encontraba perdido en el deseo, ocultando su rostro sobre el pecho de Ziven mientras abrazaba con un poco de fuerza su torso.
Sorprendido por haberse convertido en el escondite de su hembra, la bestia olfateó el dulce aroma que emanaba su compañera y alzando la vista se encontró con la mirada de Muir que igualmente se encontraba asombrado por el cambio de sucesos. El macho estando a punto de hablar fue silenciado y obligado a bajar la cabeza por la presión ejercida por el águila blanca quien no dudó ni un segundo en cumplir los deseos de su pareja.
Obteniendo su venganza debido a que su descanso fue interrumpido, la adolescente se sintió satisfecha con el buen trabajo de Ziven, más recuperar el sueño no fue tan sencillo como pensó en un inicio por lo que notando movimiento dentro del Espacio, Kimura desapareció de la habitación para averiguar de quién se trataba.
Caminando entre los pasillos de la mansión, la aspirante a héroe se detuvo frente a la puerta del gimnasio y adentrándose se encontró con Bakugo haciendo pesas, triplicando la cantidad que solía cargar cuando entrenaba en el centro deportivo de la UA.
"Tal parece que incluso eso es ahora sencillo para ti." Comentó la joven sin entusiasmo alguno en su voz recargando parte de su cuerpo sobre el espejo pegado a la pared. "¿Ya entraste al cuarto de contención? Puede ser pequeño pero el abuelo lo modificó para que entrenara mis ataques, dijo que ni All Might podría hacerle un rasguño."
Bakugo sabía que su cuerpo había cambiado por completo y con ello su fuerza había aumentado considerablemente. Sin embargo, tampoco era un descarado como para intentar destruir una invaluable vivienda histórica que antes creía que pertenecía a la nación. Ante la insistencia de _____, el cenizo se acercó a aquella puerta plateada que había ignorado al pensar que se trataba de algún tipo de almacén aunque no tuviera nada dentro y encerrándose en la habitación el chico finalmente liberó su kosei dejando que todo a su alrededor estallara.
"Es hora de desayunar." Fue lo único que mencionó Katsuki al salir provocando que su amiga se riera a carcajadas.
Dejando que el chico se marchara, Kimura inspeccionó el cuarto que en efecto parecía encontrarse en perfectas condiciones, de no ser por una grieta en la esquina de la pared tan sutil de la que nadie se daría cuenta si no se prestase atención.
'Es más fuerte que All Might.' Pensó seriamente la ojiverde ya que ella estuvo presente durante la sesión pruebas que realizó dentro de la agencia de su abuelo, y ni el héroe número 1 fue capaz de hacer lo que Bakugo. Aunque este conjunto de metales son prometedores gracias a su resistencia, debido al costoso proceso de producción eran contadas las personas que tenían conocimiento del proyecto.
Alejándose del gimnasio la adolescente se encontró con Kaiser y Killian en el camino quiénes le preguntaron sobre qué era lo que deseaba desayunar y recordando la inmensa cantidad de gallinas que sus esposos recolectaron y dejaron en el patio trasero de la mansión, la chica consideró en comer algunos ahora antes de que continuaran reproduciéndose, o los huevos terminaran de eclosionar.
Sin duda la peliverde no podía negar que estaba algo preocupada por la cantidad debido a que cuidarlos podría luego representar un reto, pero pensando en los hombres dentro de su familia, tal vez incluso en poco tiempo las gallinas podrían llegar a desaparecer al ser un animal tan pequeño porque obviamente uno no sería capaz de llenar el estómago de una bestia.
Luego de que Killian exigiera un beso antes de irse a la cocina, ______ se mantuvo en silencio al momento que la serpiente la abrazo, mirando a su esposo le pidió que la cargara y la llevara a darse un baño en lo que se terminaba de preparar los alimentos. Ambos lobos queriendo poner en práctica sus nuevos conocimientos se ofrecieron a prepararlo por lo que la joven aceptó sin problema alguno.
Viendo las líneas en los rostros de sus nuevos esposos la adolescente estaba segura de que la raza humana era débil, que a pesar de que la gran mayoría poseía un kosei, aún existía cierta parte de la población que nacía sin poseer alguno, además de que no todos los poderes eran útiles para atacar y defender.
Sumergiéndose dentro del agua llena de burbujas la peliverde relajó su cuerpo y cerró los ojos para descansar un par de minutos, más bajo la atrevida amenaza de Kaiser diciéndole que él igualmente se adentraría a la tina para ayudarla a bañarse, de inmediato la chica gritó que no se encontraba dormida como que el lugar era muy pequeño.
"¿Cuándo regresará Mitchell?" Preguntó la joven recargando su mejilla en la orilla de la tina, sintiéndose triste porque el escorpión aún no entraba al Espacio. "¿Le habrá pasado algo?" Volvió a preguntar ella con un nudo en la garganta al recordar lo peligroso que es Zachary.
"Sólo tiene trabajo que hacer." Respondió Kaiser acariciando el pelo de su hembra para tranquilizarla y al notar sus ojos comenzar a cristalizarse la bestia se comenzó a preocupar. "Estará bien, lo golpearé una vez regrese por demorarse." Habló nuevamente la serpiente haciendo reír a su compañera que consideró aquello como una buena idea.
Dejando a un lado el hecho de que se encontraba triste Kimura prefirió concentrarse en cómo lidiar con su suegro puesto que en la historia era muy notoria la diferencia de poder.
"Bart, dile a Curtis que quiero una esmeralda." Mencionó _____ sabiendo que la mejor forma en la que las bestias suben de nivel es estando en situaciones de alto riesgo y a pesar de que los cristales son difíciles de conseguir, se menciona en el webcómic que las esmeralda requieren mucho más esfuerzo. Pese a ello, justo después de hablar un pequeño morral lleno de cristales y esmeraldas aparecieron frente a sus ojos.
"Sigo aquí." Dijo Kaiser con una aterradora sonrisa en sus labios.
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The Queen of Beasts | Rayita X BNHA/BATB Harem
FanfictionLa vida estudiantil era divertida e intensa, entrenamientos constantes para lograr el sueño de todo joven de volverse héroe, salidas y fiestas entre amigos como también fallidos intentos de llamar la atención del chico popular del salón. Su vida en...