¹⁶

610 65 1
                                    

     Ella remataría la noche, por los momentos no se sentía cansada ya que se había empapado la cara con agua bien fría luego de lavarse los dientes, de puro aburrimiento volvió a maquillarse sencillamente y salió del remolque de Nissan para ir a los pits a prepararse nuevamente mientras esperaba a Matty para hacer el cambio.

     Aceleraba disfrutando del lindo paisaje que le ofrecía la madrugada de Francia, estaba cantando cualquier cosa que le viniera a la mente, a las dieciséis horas de carrera tuvo su primer problema, el auto que quería rebasar la acorralaba tratando de sacarla de la pista.

     —Parece que hay una lucha por el cuarto lugar...—informaba el comentarista poniendo a la escudería Nissan nerviosos.

     —Hijo de...¡Ay!—al lograr estabilizar el auto pero su muñeca comenzó a molestarle un poco, pronto la chica recordó que estaba cerca de una curva así que siguió presionando—. A mi no me vas a estar sacando, ya vas a ver...

     —Niko, te acercas a una curva, baja la velocidad—pidió Jack por el intercomunicador, comenzando a ponerse nervioso a ver que su hija no le hacía caso—. ¡Nikolett, hay una curva! ¡Tienes que frenar!

     —¡Jack! ¿¡Por qué no está frenando!?—Jann le gritó al hombre desde los pits, estaba preocupado—. ¡Dile que frene!

     Con un suspiro algo tembloroso el mayor de los Salter volvió a comunicarse con la piloto:—Niko, por favor...no me hagas esto, hija...

     —Papá...sé lo que hago—habló la chica luchando por mantenerse firme—. Confía en mí.

     —Ok..

     Y así apagó el radio impidiendo que la voz estresada de su padre le distrajera, igualmente desde el Paddock los chicos le suplicaban a quién sea para que Nikolett frenara, pero Louise y Colt sabían lo que haría.

     —Confíen en ella—por primera vez, Colt se expresaba con un tono serio.

     —¿Estás seguro de que lo logrará?—preguntó llena de preocupación la madre de Jann abrazando a su hijo menor, Coby.

     —La hemos visto correr por mucho tiempo—habló la morena con la mirada fija en la pantalla—. Niko sabe lo que hace.

     Para todos fue un espectáculo en cámara lenta, frunció los labios preparándose, no se detuvo en ningún momento mientras observaba el camino, a un segundo antes de entrar a la curva finalmente pisó el freno viendo como el auto de su competidor derrapaba sobre el césped fuera de la pista y volvió a acelerar girando el volante hacia la derecha tomando con éxito la curva, estaba en el cuarto lugar.

     —¡Si! ¡Si, toma esa!—festejaba recorriendo la recta.

     Alivio, eso fue lo que todos sintieron al ver la maniobra exitosa de Nikolett Salter.

★。+゚☆ -🏁- ☆゚+。★

     La luz del sol se colaba por las ventanas del auto iluminando con suavidad el rostro de la muchacha, seguía defendiendo su posición a pesar de los horribles tirones en su muñeca derecha, quería cumplir con sus horas pero el dolor incrementaba cada vez más al mínimo movimiento, volviéndose insoportable.

     —¡Pa! ¡Papá!—llamó desesperada por el radio y al recibir respuesta siguió hablando—. Me está doliendo mucho la muñeca, casi no la puedo mover.

     —Bien, Niko..ven de inmediato—pide el jefe de mecánicos escuchando los quejidos de su hija—. Resiste un poco más, cielo, ¿si?...Ya estás cerca, tranquila.

     —Si..

     Jack informó rápidamente a los mecánicos que se prepararan mientras corría hasta el remolque buscando al siguiente corredor, que terminaba de secarse la cara luego de haber despertado.

     —Hola—saludó algo apurado el mayor—. Niko se lastimó la muñeca. La sacaremos antes.

     —¿La que se fracturó? ¿Le está doliendo mucho?—Jann preguntaba con preocupación.

     —Si...ya viene para acá, tranquilo, ¿listo para el final?

     Al dar una afirmativa, caminaron hasta el box y se acercaron a Danny que les avisó que seguían en el cuarto lugar, automáticamente todos se dieron cuenta que la chica se estaba sobre esforzando.

     Cuando Nikolett estacionó el auto frente a los pits, le abrieron la puerta y Matty corrió a sacarla de allí permitiendo que Jann tuviera el camino libre para cambiar de puesto, obviamente el moreno al terminar de abrocharse el cinturón la buscó con la mirada, encontrándola sentada frente a un médico con la mandíbula apretada y pequeñas lágrimas de dolor mientras le sacaban el guante.

     Solo faltaba que ajustaran una llanta para que pudiera irse, pero al mecánico se le cayó la tuerca dando inicio al desastre, gritos por todos lados e iban perdiendo la posición, con las pocas fuerzas que le quedaban, Nikolett se zafó de el médico corriendo hasta el lugar donde la pieza había caído, sus rodillas y codos chocaron con fuerza contra el piso al tirarse.

     —¡Papá!—gritó lanzando el objeto hacia Jack que la atrapó en el aire encargándose él mismo de ajustar la llanta para que Jann pudiera regresar a la carrera.

     —Miren, Los Salter llegan al rescate—informa con sorpresa el comentarista, en otra ocasión la muchacha se habría reído.

     Al irse el auto la chica soltó un quejido sosteniéndose la muñeca contra su pecho, Matty la ayudó a levantarse volviendo a sentarla con el enfermero para que pudieran desinflamar la zona con agua fría y caliente mientras le daban una pastilla para disminuir el dolor.

     Mientras tanto, de vuelta en la carrera Jann buscaba recuperar el tiempo perdido a toda costa.

     —Jack, ¿recuerdas de dónde surgió la idea de la academia GT?—le preguntó al hombre, siguió hablando al tener luz verde—. La esencia de esto era demostrar que los pilotos virtuales podemos manejar. Conozco esta pista. Conozco los carriles—informa con seguridad—. Este no es óptimo...déjame hacerlo a mi modo.

     —¿Qué está diciendo?—Danny cruzó la línea de los pits para acercarse a Jack a pesar de que no podía estar allí.

     —Si va a aguantar. Debes confiar en mí—pidió Jann—. ¿Confías en mí?

     —Solo termina la carrera—interrumpió Danny con desesperación—. Hay demasiado en juego. Es un riesgo enorme.

     —Danny, no vine solo a terminar.

     Finalmente el hombre regresó a los pits enojado, pero ignorando lo que había dicho, Jack volteó a ver a su hija mientras le colocaban la férula luego de desinflamar su muñeca, tomando su decisión.

     —A la mierda—habla—. Sigue tu carril, Jann.

     Sexto, quinto, cuarto lugar, Jann estaba haciendo un nuevo récord de vuelta, en los pits estallaron en festejos por aquella sorpresa, los dos corredores se abrazaban con fuerza mientras gritaban a todo pulmón viendo la pantalla, Mardenborough estaba volando.

     La vuelta final dio inicio, ninguna importaba más que esa, estaba a cuatro segundos detrás de CAPA y de pararse en el podio, Jann tuvo en la mira al Lamborghini dorado y empezó la lucha por el tercer puesto. 

     Sentía las manos de Matty apretando sus hombros mientras veían a los autos acercarse a la última curva del recorrido y la recta final, el piloto de Nissan logró alcanzar a su oponente a la vista de las gradas, a solo unos metros de que llegaran todos en los pits salieron corriendo para asomarse en la barrera para ver quién sería el ganador.

     —Vamos, Jann—pedía Nikolett siendo sostenida por Matty ya que no podía usar su mano derecha, los dos parecían monos ahí enganchados—. Tu puedes, tu puedes...

     La bandera de cuadros hondeaba gloriosamente en el aire estando cada vez más cerca.

     La foto fue tomada.


𝙁𝙚𝙚𝙡 𝙄𝙣𝙫𝙞𝙣𝙘𝙞𝙗𝙡𝙚 ━━𝘑𝘢𝘯𝘯 𝘔𝘢𝘳𝘥𝘦𝘯𝘣𝘰𝘳𝘰𝘶𝘨𝘩Donde viven las historias. Descúbrelo ahora