say yes to heaven | chanlix

nueve; la playa bronte y una buena compañía

Felix

Para cuando llegó la hora de la salida, Felix, Seungmin y Changbin se dirigieron hacia la puerta de la escuela. Jeongin había estado evadiendo a Seungmin desde el almuerzo, debido a que seguía intentando asimilar la noticia —o por lo menos eso le había dicho el menor a Felix—. Seungmin estaba molesto con él y por ello no había ido a buscarlo como siempre; Felix por su parte había simpatizado más con Seungmin y se había quedado a su lado.

—Necesito esperar a Olivia —dijo el chico de las pecas, deteniéndose en el punto donde siempre se reunía con su hermana —Después le avisaré a mi madre que llegaré más tarde.

—¿Cuál es tu plan esta vez? —le preguntó Seungmin.

—Aprovecharé el hecho de que ella no te conoce para inventar algo diferente—Felix sonrió.

—Dios mío, un día pareces un santo y al otro un rebelde... Cambias tu personalidad tan seguido que das miedo.

—Se le llama querer ser libre y sentirse culpable después de intentarlo —respondió Felix —Es un ciclo.

—Ya, ¿Entonces qué voy a hacer?

—De hecho Changbin podría ser de ayuda también… claro, si accede.

—Cuenta con ello—dijo Changbin sonriente, convencido de ayudar aún sin tener una idea de lo que estaban hablando.

—Bueno… Le diré a mi madre que necesito hacer una tarea de la clase de religión con ustedes.

—¿Y te va a creer eso? —preguntó Seungmin arqueando una ceja.

—Por eso me van a ayudar, apuesto a que son mejores mentirosos que yo —dijo Felix, encogiéndose de hombros— Soy bueno ocultando cosas pero no diciendo mentiras.

—No te preocupes —aseguró Changbin, apoyando su brazo en los hombros de Seungmin —Podemos hacerlo.

—¿Por qué estás tan dispuesto? —le preguntó Seungmin.

—Quiero caerle bien a tus amigos… aunque va a ser más difícil con el chiquillo.

—No me lo menciones ahora, estoy molesto y harto porque no vive ni deja vivir.

—Minnie… —le reclamó Felix.

—¡Es verdad! Siempre es lo mismo —dijo Seungmin —Digo algo que no le parece, se va y me ignora hasta que me disculpo.

—Tú no sabes lo que es vivir como nosotros, con todas las ideas que nos han metido… —explicó Felix —¿Tienes idea del trauma que tenemos? El que nos impide hacer cosas que no se nos tienen permitidas, el que nos hace sentirnos culpables de vivir la vida como cualquier otra persona… Poco a poco estoy aprendiendo a romper algunas reglas, siempre y cuando no exceda los límites, pero él no se ve con intenciones de hacerlo y tal vez es lo que le funciona. Trata de tener un poco de compasión, él realmente intenta entenderte. Yo no creo que el estar evadiéndote sea porque su intención es ser grosero… sólo no sabe cómo sentirse.

Seungmin suspiró. Changbin le dio unas palmaditas en la espalda para tranquilizarlo.

—Tienes razón, Lix… pero tendrá que aceptarme tarde o temprano si quiere que sigamos siendo amigos. Si no, supongo que tendré que alejarme de ustedes.

—Yo no quiero perder tu amistad —le aseguró Felix, lo cual provocó que Seungmin le dedicara una leve sonrisa —Espero que sólo le tome unos días acostumbrarse.

Una vez que Olivia llegó a donde estaban los tres chicos, Felix le dijo la misma mentira que le diría a su madre para prevenir cualquier fallo en su plan. Todos se dirigieron hacia el lugar donde siempre se estacionaba la señora Lee y Felix le pidió permiso para llegar a la casa más tarde. Seungmin y Changbin le aseguraron que trabajarían juntos en una tarea de religión —incluso se esmeraron en dar detalles convincentes— y al ser convencida y confiar en su hijo, Lina Lee accedió y se fue sólo con su hija menor.