say yes to heaven | chanlix

diecisiete; tan sincero como un 'te quiero'

Chris

Cuando llegaron al aeropuerto, Chris le avisó a sus amigos que ya estaban cerca del área de los taxis. Les describió el auto de Minho y alrededor de diez minutos después, el rubio vio a dos figuras familiares acercarse al vehículo, con sus maletas en mano. En seguida, abrió la puerta y corrió hacia ellos sin dudarlo.

—¡Chan! Han pasado doce años —lloriqueó Hyunjin, fundiéndose en el abrazo. Era un chico relativamente alto, con cabellera castaña y un innegable atractivo físico. Estaba usando una chamarra negra, unos sweatpants grises y unos tenis Nike. Unos audífonos plateados de diadema colgaban de su cuello, y unas ojeras en sus ojos evidenciaban que no había dormido bien en los últimos días.

—Nos vimos hace unos meses, drama llama —Chris sentía que iba a llorar de la felicidad que estaba invadiendo todo su cuerpo al reunirse con sus mejores amigos. No obstante, se separó del abrazo al escuchar un llanto.

—¿Qué pasó, Jisung? —preguntó preocupado.

—Es que ya no aguantaba yo solo a Hyunjin —Jisung se volvió a aferrar al mayor, exagerando más su llanto. Aquel chico traía una chamarra similar a la de Hyunjin pero con unos pantalones cargo negros y tenis Adidas blancos, además de un beanie gris. Su cabello era castaño también y ondulado, y tenía unas distintivas mejillas redondas que lo hacían ver adorable.

—Mi hermano en Cristo, pasar tiempo con Jinnie te hizo tan dramático como él —Chris negó con la cabeza, riendo.

Los tres amigos se separaron del abrazo en cuanto escucharon a una cuarta persona aclarándose la garganta.

—Chicos, él es Minho —anunció Chris, en coreano.

—Soy Minho —su amigo se presentó en el mismo idioma y esbozó una de esas hermosas sonrisas que lo caracterizaban —Gusto en conocerlos.

Jisung también sonrió,  pero de manera tímida y se acercó. Estaba maravillado por la belleza de Minho: aquella nariz afilada, ojos grandes y por supuesto, la sonrisa torcida y encantadora.

—Me alegra conocerte en persona —dijo, haciendo una reverencia. Aún estaba nervioso y sin idea de qué debía hacer ahora que la persona que le gustaba estaba enfrente suyo.

—A mí también —Minho posó una mano en el hombro del contrario —Eres aún más lindo que en las fotos.

Jisung se sonrojó y trató de reprimir la emoción que las palabras del mayor habían provocado en él.

—Sí, sí bueno, yo soy Hyunjin —se presentó el chico restante, también haciendo una reverencia. Se quitó las gafas de sol negras que cubrían sus ojos y las enganchó a su chamarra. Lee Minho, a pesar de que sólo tenía ojos para Jisung, no pudo evitar maravillarse ante la belleza del chico. Era bastante atractivo y tenía un aura de elegancia y sofisticación, algo que era raro encontrar en un adolescente. —Jisung no ha parado de hablar de ti desde que te conoció… dan ganas de dormirlo.

El mencionado le dio una patada y acto seguido le sonrió a Minho, negando lo que su amigo acababa de decir.

—Espero que sólo haya dicho cosas buenas —comentó el pelirrojo, divertido.

—Bueno, ya es noche… ¿ya cenaron?—preguntó Chris.

Ambos chicos negaron.

—Entonces vayamos por algo, yo invito —propuso —¿Vienes, Min?

—Me encantaría, pero tengo que completar algunas tareas —respondió con algo de desánimo.

—¿Estudias? —preguntó Hyunjin, con curiosidad.