A lo lejos se escucha como un perro está ladrando, lo que hace que mis ojos se abran poco a poco. La luz de la ventana es bastante brillosa, o al menos así la percibo por la fuerte jaqueca que tengo en este momento
—Dios mío ¿Qué pasó ayer?
Mi voz está demasiado ronca, tal cual como si hubiera asistido a un concierto de rock metal. Los sonidos por más mínimos que sean, retumban de una forma asombrosa por toda mi cabeza. Coloco ambas manos a los costados de la cama y tomo asiento cubriendo mi rostro con ayuda de las sábanas.
"¿Qué carajos sucedió? sabía que era mala idea dejarme llevar por el alcohol"
<< Una de mis manos se deslizó hacia su cuello, añadiendo un toque de intensidad al beso y la otra se posó sobre su cintura. La presión que ejerzo sobre ella es delicada pero firme, es como si esa simple caricia actuara como un lazo que nos unía aún más en este momento.
Sumergido en la profundidad del beso, la noción del tiempo se desvaneció por completo, dejándome atrapado en un universo paralelo donde solo existíamos nosotros dos. >>
"Krauss. Besé a _____. ¡Carajo! ¿Qué va a pensar de mí? Me va a odiar... Aunque pensándolo bien, si no le gustaron mis besos, se hubiera apartado inmediatamente, ¿no?"
Entre la frustración y nerviosismo tallo mis ojos y lo primero que analizó al quitarme las manos del rostro es que no estoy en mi habitación.
"Mierda, mierda, mierda. ¿En dónde me metí?"
Mi vista se dispara por todos lados, tratando de buscar alguna respuesta de en donde estoy. Y la encuentro en la silla de su tocador.
"El vestido de Krauss. La habitación de ______"
—No, no, no, no...
Bajo la vista a mi cuerpo para checar que todo esté en orden. No, no lo está. Tengo un pijama que claramente no es la mía.
"¿Ella... durmió conmigo? No creo, sería una locura"
Me recuesto y nuevamente con las sábanas cubro mi rostro.
—Debe de ser una maldita broma. No, definitivamente no es una broma.
Estoy bastante inquieto, así que, vuelvo a sentarme y noto que al lado de la cama hay un colchón inflable. Justo cuando estoy por levantarme a para ir a averiguar, alguien abre la puerta de la habitación.
" ______, la chica que ayer besé como si no hubiera un mañana. ¡Dios mío, que vergüenza me doy!"
—Buenos días joven Gallagher, ¿Qué tal amaneció? —Krauss avienta una bolsa de papel hacía mí y detrás de ella cierra la puerta.
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The memories of a dream || Aidan Gallagher [En proceso]
Fanfikce¿Qué ocurriría si te encuentras extraviada? Y no, no me refiero a estar perdida en algún rincón de tu ciudad o del mundo, sino perdida en un torbellino emocional, sin esperanza, anhelando que todo vuelva a ser como antes. La vida, en ocasiones, nos...