Hasta el atardecer

Capítulo 9 - I hate my life

El ruido de una maquina del hospital me despertó.

Me sentía muy débil, y de seguro me veía así. No recuerdo lo que me sucedió ni tampoco como llegue hasta el hospital... Había un chico rubio teniendo una de  mas manos cuya muñeca se encontraba vendada y él la mantenía elevada.

- BluBlu... Despertaste- me sonrió.

- ¿Vos quién sos?- le pregunté.

- Estas bromeando, ¿no?- se sorprendió.

- Sí- reí.

- Azul- me reprochó.

- ¿Qué me pasó?- le cambié de tema.

- Te empujaron desde uno de los toboganes- me informó.

- ¿Empujaron? ¿Quién?- interrogué. - ¿El chico drogado? Me acuerdo pero todo esta demasiado confuso...- continué.

- Exactamente- afirmó.

- ¿Él cómo está?- continué.

- Tu muñeca amortiguó su caía- me informó.

- ¿Mi muñeca?- pregunté asustada. Y la mire.- Dime por favor que no es grave- rogué.

- Blue- entró mi mamá y me dio un fuerte abrazo. Lo que provocó un fuerte dolor por mi espalda.

- Lo siento mucho- se disculpó mi primo. - Todo es mi culpa- continuó.

- ¿Tu me obligaste a subir? No, así que no es tu culpa- le seguí. - ¿Qué tiene mi muñeca?- pregunté.

- Tienes un esguince de... tres grados- me informó mi mamá.

- ¿Qué tan grave es?- seguí.

- Chicos salgan- les pidió mi mamá.

- ¡Nadie dará un puto paso hasta que no me contestes!- grité llorando.

- Blue... Calma- me dijo Jake.

- Habla- le ordené a mi mamá.

- Demasiado grave... Rotura total del ligamento con arrancamiento óseo, eso fue lo que dijo el médico. Puede causar una luxación si se pierde completamente la congruencia articular- me informó.

- No entendí una mierda- confesé. - ¿Podré participar en la competencia?- les pregunté.

- Te operaron mientras dormías- habló Jake. - Si o si era necesario- me informó.

- ¿Podré participar en la competencia o no?- continué aún llorando.

- No- contestó mi madre.

- ¡Me he preparado todo el maldito año para nada!- grité.

- Será el próximo año- continuó mi primo. 

- ¡Tu dices eso porque no eres el que tiene una muñeca inservible!- le respondí.

- Blue, estarás bien- me contesto Jake.

- ¡No lo estaré!- estallé en lágrimas. - ¡El surf es todo lo que tengo...- mi voz se fue debilitando y con eso vino un espantoso dolor de cabeza que me hizo gritar aún más fuerte del dolor, y así fue como volví a entrar a otro profundo sueño.

(...)

Volví a despertar en el mismo sitio, sólo que ahora me encontraba sola. Por lo visto eran altas horas de la noche.

Como pude descolgué mi mano de un artefacto que la mantenía inmóvil y luego proseguí a sacarme todos los cables que tenía en mí. Una vez con todo ya fuera de mi sistema, como pude me levanté y fui hacia uno de los armarios que se encontraba en la habitación y en una bolsa de plástico transparente se encontraba un conjunto de ropa de mi pertenecía. Lo tomé y me encaminé hacia el baño. Juro que no sé como no se rompió el espejo. Me veía espantosa, mi cabello todo enredado, mi cara... Dios, estoy peor que un zombie. Mis ojeras demuestran lo mal que me sentía. También, se podían observar moretones y cortes por todo mi cuerpo incluyendo mi rostro. Sin perder más tiempo, me cambié.