- A esto no me lo esperaba- le dije mientras me daba un abrazo.
- ¿Qué haces por aquí?- me sonrió.
- Mi nuevo hogar- le informé.
- ¡Qué genial! ¡Este es el mío!- me comentó.
- Que chico que es el mundo- continué.
- Pareces que ya has conocido a mi hermano- me dijo Debby.
- En realidad hace tiempo lo conocí- le respondí.
- ¿Cómo?- se sorprendió.
- Mi amiga de California- le sonrió a su hermana...
- ¿Es ella?- continuó.
- Sí- afirmó.
- Bien, creo que necesitan hablar un poco- le sonrió a Bratt y ella se alejó.
- ¿Quieres subir?- me preguntó.
- ¿A dónde?- continué.
- Vivo en el segundo piso- me respondió.
- ¿No estas trabajando?- seguí.
- Mi turno terminó.- se sacó el delantal y lo deposito sobre la mesada.
- Genial- le comenté. – Iré por mis cosas- le informé.
Fui hacia la mesa y tomé mi abrigo, luego volví hacia Bratt y comenzamos a subir.
Se ve que dinero, no le faltaba.
- Adelante- me dijo y fui hacia el sillón, donde me senté.
- ¿Y cómo andan Angie y Sonny?- me preguntó.
- Angie me debe odiar y Sonny esta desaparecida- le comenté con tristeza.
- ¿Qué?- su cara de preocupación apareció.
- Lo que oyes, fuimos a una fiesta y se la llevaron. Intentaron por mí también, pero mis amigos me salvaron- le informé.
- Que mala suerte- siguió.
- Ni que lo digas- largué un suspiro.
- Aquí la mala suerte no existe- se levantó y se dirigió hacia la heladera.
- ¿No?- le sonreí.
- ¿No ves? El destino nos unió- me comentó y sacó un pote de helado. - ¿Tienes planes?- me preguntó.
- Eso depende de ti- le sonreí.
- Películas y helados ¿Te parece?- comentó.
- Por supuesto- afirmé.
- Entonces, eso será- me sonrió y abrió el helado.
(...)
- Créeme que no me puede doler tanto la panza- reí.
- Cómo no si me has vaciado la heladera- me respondió.
- Desventajas de tenerme como amiga- le comenté tomando un sorbo de jugo.
- ¿Quién te mintió de esa forma?- sonrió.
- ¿No somos amigos?- fingí sentirme decepcionada, sabía que él bromeaba.
- No me acuesto con amigas- me guiño un ojo, no pude evitar ruborizarme.
- Entonces ¿Qué somos?- le dije.
- Lo que tú quieras ser- me sonrió.
- Eso suena comprometer- le comenté.
- Todo lo que tenga que ver contigo es comprometedor- siguió.
ESTÁS LEYENDO
Hasta el atardecer
RomanceSoy Azul Wilson, más conocida como Blue. Vivo en California y es allí donde junto con mis amigas practico mi gran único amor, el surf. Luego de terminar la universidad, mi verano comenzó. ¿Por qué este verano fue distinto a los demás? La razón tiene...