¿Qué es lo primero que hace una chica cuando se despierta al lado de un chico luego de haber tomado tanto que no recuerda nada de lo sucedido? Se fija si esta desnuda, y por suerte no lo estoy.
Antes de despertarlo, tomé mi teléfono y me fije en la hora, 3:00 pm.
- Mierda- susurré.
Tome uno de los almohadones y empece a pegarle a Jake, hasta que se cayó de la cama.
- ¡¿Puedes despertarme hablando como personas civilizadas?!- me gritó.
- Poder puedo, querer no quiero- le sonreí.
- Levantarme con almohadazos y luego ver tu cara, Dios me libre y me guarde- comentó.
Mi reacción frente a su comentario fue pararme furiosa y dirigirme a mi habitación.
- Vístete, iremos a practicar- continué hablando mientras caminaba.
(...)
- ¿Cómo conoces este lugar?- me preguntó.
- En algún momento, yo también aprendí a surfear- le comenté mientras bajaba la tabla del techo, pero Jake se me adelantó y lo hizo primero.
- Me hubiera gustado verlo- continuó.
- ¿Verme caer?- le pregunté.
- Y levantarme- me sonrió.
Sin contestarle, comencé a sacarme la ropa hasta quedar en bikini.
- ¿Y el traje de surf?- me preguntó.
- Hoy nos divertiremos- le sonreí.
Tomé mi tabla y me estaba por meter al agua, pero bacalao se me adelantó y corrió hacia el centro salpicándome entera.
- ¡MORGAN!- le grité.
- ¡WILSON!- me respondió sonriendo.
Corrí y me lance sobre él hundiéndolo, pero Jake se zafó de mi agarre.
- ¿Y ahora?- me preguntó.
- Tú querías formar parte de nuestra diversión, por más peligrosa que fuera- le recordé.
- Eso dije- me sonrió.
- Toma la tabla y sígueme, nadaremos un rato- le comenté e hice lo que le dije.
Como le dije, luego de un par de minutos nadando vi mi objetivo. Había una muy diminuta isla, casi ni llegaba a ser una. Fue allí donde nos dirigimos.
- Quieres deshacerte de mí- continuó tirado sobre la arena, casi sin poder respirar.
- Me has descubierto, tendré que matarme- bromeé.
- Vas en ese camino- siguió.
- Y eso que no hemos comenzado- le informé.
- Ve tú, yo descansare un rato- continuó.
- Como quieras- tomé mi tabla y comencé a adentrarme en lo más profundo del mar.
Las olas eran muy gran tamaño y bastante peligrosas, pero esas, eran las mejores. Elegí una de las que me se me aceraba, podía sentir la mirada de Jake sobre mí, pero yo no podía pensar en nada más que en subirme y "montar" esa ola. El momento llegaba, sabía que podía hacerlo, yo lo sabía.
O eso creía.
No tuve la fuerza necesaria en mi muñeca para subirme, así que la ola se corto justo sobre mí, provocando que mi tabla me diera un fuerte golpe en la cabeza, sin embargo, eso no fue todo. La potencia y fuerza de la ola, me hizo girar mientras me arrastraba, el problema es que no hay ninguna orilla cerca, sólo una gran pared de rocas. Mi esperanza era que Jake me viera, sino... Lo peor me llegaría. Ya casi sin aire, mi cuerpo chocó contra esa pared de rocas provocando que soltara un pequeño grito que hizo que el aire que me quedaba empezara a suplantarse por agua, entrando a montones en mi cuerpo. Justo cuando estaba por cerrar los ojos, mi cuerpo fe tirado bruscamente hacia la superficie, no sentía nada de fuerza. Pude ver que era Jake, quien me gritaba, pero yo no podía oírle, estaba demasiado aturdida como para hacerlo. Él me subió en su tabla y me llevó como pudo hasta la pequeña isla. La sensación de ahogo se estaba yendo, pero el fuerte dolor de cabeza seguía allí. Una vez ya en la arena, me sentía a salvo.
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Hasta el atardecer
RomanceSoy Azul Wilson, más conocida como Blue. Vivo en California y es allí donde junto con mis amigas practico mi gran único amor, el surf. Luego de terminar la universidad, mi verano comenzó. ¿Por qué este verano fue distinto a los demás? La razón tiene...