Capítulo 2

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{Piero}

Estábamos desayunando en el comedor del hotel, en la mesa solo estábamos Ignazio y yo, ambos estábamos esperando que Gian terminara de servirse su comida para luego unírsenos.

– ¿Y bien? –me preguntó Ignazio.

– ¿Y bien qué? –dije intentado ignorar el tema.

– ¿Como estuvo su conversación? ¿De qué hablaron? Cuéntamelo todo.

–Estuvo bien, me pregunto qué día estaríamos en Valencia, no sé por qué todavía.

–De repente te quiere dar una sorpresa.

–No lo sé, ¿molestarse en ir a Valencia desde Margarita solo para verme? No lo creo.

–Tú que sabes, quizás no la conozcas tan bien como tú crees.

–Le daré el beneficio de la duda.

En ese momento llegó Gianluca...

– ¿Tan malo soy que se callan cuando yo llego?

–Hablábamos sobre la conversación entre Piero y la misteriosa Julianna.

– ¿Sobre qué hablaron?

–Pues, no mucho a decir verdad, ella está algo distante, no entiendo por qué.

–Cuando la veas le preguntas, hay cosas que son mejor hablarlas personalmente –dijo Gianluca.

–Esperaré entonces.

Terminamos el desayuno en silencio, cuando nos dirigíamos hacia nuestras habitaciones para terminarnos de arreglar, nos dimos cuenta que habían unas cuantas fans esperándonos en el lobby, nos acercamos a ellas, nos tomamos algunas fotos y dimos unos cuantos autógrafos.

Después, fuimos a una entrevista que teníamos para una televisora Venezolana (hoy será un día de entrevistas, y mañana el concierto).

Entrevistador: ¿Hasta ahora que les ha parecido el país?

G: es hermoso, la verdad.

I: Si, no solo los paisajes, sino también su gente, son muy amables.

P: estoy enamorado de este país.

E: que bueno escuchar eso, deberían hacer un tour turístico, amaran más este país. Bueno, ya para finalizar esta entrevista ¿Cómo será su cronograma de conciertos?

P: Mañana sábado aquí en Caracas, El lunes iremos Mérida, el miércoles Pto. Ordaz, el viernes Valencia y el domingo en Margarita

E: bueno les deseamos el mayor de los éxitos en esta gran gira por Venezuela, nos vemos pronto, ¡adiós!

Nos despedimos del canal, luego nos fuimos a almorzar para después ir a otra entrevista que teníamos hoy.

***

Así pasaron la semana, de estado en estado, de concierto en concierto, por fin ya era jueves por la tarde, ellos ya estaban por llegar al hotel en Valencia. En toda la semana Piero no pudo hablar con Julianna y, sospechaba que, ese día tampoco podría.

Esa tarde, no les dio tiempo de atender a las fans porque en seguida que ellos llegaron, se fueron a una entrevista. Por la noche, de ese mismo día, cenaron todos juntos y después se fueron a sus respectivas habitaciones a descansar porque al día siguiente sería el concierto.

Piero, por su parte, antes de acostarse, se conecto por Skype para ver si ella estaba conectada, pero no, no lo estaba, así que decidió apagar la PC e irse a dormir.

Al día siguiente...

Piero e Ignazio se levantaron temprano a desayunar para luego estar más tiempo con las fans ya que se sintieron apenados por abandonarlas el día anterior. Gianluca, en cambio, se levanto un poco más tarde, como a las 9:30. Se subió al ascensor, cuando iba pasando por el piso 5, se detuvo, las puertas se abrieron y entro una chica morena, solo unos pocos centímetros más baja que él, de cabello castaño lacio que le caía delicadamente sobre los hombros, estaba vestida con un pantalón alto negro con una blusa de un tono azul cielo sin mangas; él no podía verle bien el rostro, pues ella tenía la cabeza gacha porque estaba ocupada terminando de acomodar unas carpetas que tenía en la mano. Ella se encontraba a unos pocos centímetros delante de él, para suerte su suerte, la distancia necesaria para poder oler su delicioso perfume, el cual él pensó que jamás olvidaría.

-Buenos días –dijo ella sin dejar de ver sus carpetas. Gianluca le respondió con un "gracias, para ti también".

Gianluca quería decirle algo más pero ella estaba tan ocupada en su mundo que prefirió no molestarla. Pero de repente, el ascensor se detuvo.

{Gianluca}

- ¡No, no, no, no, no! –Dijo ella dirigiéndose a los botones y presionando el botón de auxilio, seguido de esto le dio unos golpes a las puertas, haciendo que indicador del piso se apagara- fuck –murmuró ella.

-Tranquila, llamare para que nos rescaten –dije para calmarla un poco. Pero desgraciadamente mi celular no tenía cobertura–. No tengo señal, ¿tú tienes?

-No... -dijo revisando su celular– Esto es... Dios... ¿Por qué a mí? ¿Por qué ahora? –dijo mientras se sentaba en el suelo del ascensor y recostando su espalda en la pared.

-Ya vendrán por nosotros, volveré a pedir auxilio.

Ella se puso en posición fetal y empezó a llorar. Yo me preocupe, jamás había visto a una mujer llorar, no sabía qué hacer, así que me senté a su lado y la abrace, tal vez no fue apropiado pero no sabía que mas hacer, ella solo lloraba.

-Ya no llores, por favor, ven hablemos un rato –le dije mientras pasaba mi brazo alrededor de su cuello y le meaba el hombro. Ella asintió y después se limpió las lágrimas.

-¿Y cómo te llamas? –le pregunté.

- Lo siento –dijo.

- ¿Lo siento? Qué raro nombre –le dije, cosa que le causo gracia, su risa era muy tierna y contagiosa, y por ende, me reí con ella.

-No, lo siento por llorar, es que le temo a los ascensores –respondió– como sea, me llamo Julianna –me dijo mientras estrechaba su mano, alzo la mirada y por primera vez pude verle bien el rostro, me quede sorprendido por su hermosura, su rostro tan delicado, sus ojos color marrón, sus mejillas de un tono rosado, sus finos y delicados labios; hice lo mejor para no quedarme embobado. Su cara me era familiar solo que en ese momento no podía pensar, así que le estreche la mano también.

-Yo soy Gianluca –cuando le dije mi nombre ella se quedo como sorprendida.

-¿Tú? ¿De verdad eres tú? –eso lo confirmo, de repente era una fan.

-Sí, el único –me reí.

-No es por eso que quería confirmar si eras tú –dijo ella, ¿acaso escucho mi pensamiento sobre si era una fan?– Soy yo, Julianna, la amiga de Piero –ahora todo tenía sentido.

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