El deseo de odiarte por siempre.

36. Anclado al pasado.

No quiero escuchar, no lo necesito para darme cuenta de lo que está pasando.

Siento la traición, la desilusión y la vergüenza por todo mi sistema. Siento toda la incertidumbre, el miedo y no soy capaz de pensar como es posible que Isabella me haya hecho esto.

Lo he escuchado lo suficientemente bien como para fingir que no lo he hecho. Ha pasado y es mejor intentar calmarme que tirarle de los pelos allí en medio y formar una escena.

¿Cómo es posible?

Estoy cansada, no he dormido durante toda la noche y cuando parece que la cosa se tranquiliza, pum. Pasa esto.

¿Cómo ha sido capaz de decirle que tal vez ellos deberían tener algo?

Ha estado pegada a Jaden durante toda la mañana, lo he visto y aún así he decidido no darle importancia. Quería hablar con ella, preguntarle que cojones le pasa conmigo, porque ha reaccionado así cuando he contado lo que pasó anoche.

Pero ahora todo parece cobrar sentido.

"Me da rabia que tengas la oportunidad de estar con Jaden y no la aproveches"

¿Siente cosas por Jaden? Si fuera así, no entiendo porque ha insistido en que tenga algo con él, ha estado forzando nuestra interacción, me ha estado dado consejos joder ¿cómo puede ser?

Joder, se suponía que era mi amiga.

Nadie ha entendido lo que ha pasado, ni siquiera el pobre Oliver que estaba junto a nosotros hablando como si a menos de un metro su novia no estuviera insinuandose a su mejor amigo.

No quiero liarla, no quiero que nadie sepa en estos momentos que es lo que me pasa. Quedaría de loca, de histérica y sobre todo de celosa.

Jaden sabría que siento algo por él, que no es sólo atracción sexual y todo se iría a la mierda. Más de lo que ya lo está.

Las palabras de Christian intervienen con fuerza. Me ha estado advirtiendo cuando he ido a rellenarme la bebida. ¿Él se ha dado cuenta? ¿Desde cuándo lleva Isabella detrás de Jaden y como no he sido capaz de verlo antes?

"No te fíes Lena" "Oliver es mi amigo, no quiero que le haga daño" "Tiene una energía rara"

Las palabras de mi amigo no salen de mi cabeza y soy incapaz de pensar en otra cosa que no sea en lo traicionada que me siento en estos momentos.

Cierro la puerta de mi habitación con un sonoro golpe y comienzo a dar vueltas de un lado para otro, incapaz de estar quieta.

Tengo la cabeza nublada por el enfado, no quiero pagarlo con nadie. Ni siquiera Jaden tiene la culpa de que Isabella le haya dicho eso.

Pero aún así cabe la remota posibilidad de que ella puede ofrecerle todo lo que yo no puedo. El miedo me invade cuando la idea se cruza por mis pensamientos, ellos juntos, Oliver destrozado y Jaden con ella, haciéndole todo lo que me hizo a mí e incluso más.

NO.

Borro esos pensamientos, eso no va a ocurrir joder. No puede ocurrir.

Noto como la inseguridad entra en cada rincón de mi mente, como me hago pequeña ante la incertidumbre de lo que él le habrá contestado.

Cálmate, me repito a mi misma más veces de las que puedo contar. Seguro que es un malentendido. Es una broma o algo de eso, joder.

Esto no puede estar pasándome a mi.

Pasan varios segundos, escucho murmullos afuera y me acerco para echar el pestillo. No quiero que entre nadie, no quiero hablarle mal a mis amigos y pagar con ellos un enfado que no les pertenece.