𝗜𝗻𝘃𝗶𝘀𝗶𝗯𝗹𝗲 𝗦𝘁𝗿𝗶𝗻𝗴𝘀 || Enzo Vogrincic

29. The ones i loved the most

Lily al final optó por abortar al bebé, yo estuve allí acompañándola, pero eso le repercutió muchísimo al salir de allí, había gente que al entrar allí adentro trataba de detenerla para que no lo hiciera, y eso le hizo sentir muy mal, porque una mujer la acusó de asesina, ella cuando entró a casa estalló en lágrimas. Se pasaba los días en su cuarto y no salía, según Matías estaba como en una especie de depresión, fui ha hablar con la doctora que realizó el procedimiento y dijo que eso era normal que en un par de semanas se le pasaría y que si no era así debería ir a que le medicasen pastillas.

Llegue a su casa y llame a la puerta, Matías me abrió.

-Hola Enzo-dijo con una sonrisa.

-Hola Matí-sonreí-¿Qué tal va tu hermana?

-Ha salido con Lía-dijo el-se la veía ilusionada.

-Ah bueno eso está bien-dije, el asintió.

-¿Quieres hacer algo?-pregunto.

-Claro-dije entrando en la casa.

-Llamamos a los chicos-dijo el, yo asentí.

LILY

Lía me había pedido que la acompañara a dejar a su hermana pequeña en casa de sus padres antes de que ella y yo saliéramos de compras.

La definición de estas semanas han sido como una montaña rusa de emociones, pasaba de estar con ganas de hacer todo a estar tirada llorando, pero hoy me sentía bastante bien.

-Bueno, ya estamos aquí-dijo ella mientras caminábamos por el parking.

-¿Has cerrado el coche?-ella empezó a tocarse los bolsillos.

-¿y mía?-preguntó ella.

Ambas salimos corriendo hacia el coche que se había cerrado con la llave dentro, y ahí está Mía echándose un siesta con esas coletas disparadas.

-Mierda-dije yo echándome las manos a la cabeza.

Lía empezó a tratar de abrir la puerta, mientras que yo golpeaba la ventana para ver si Mía se despertaba pero parecía que nada le afectara, y la gente nos miraba muy raro como si tratáramos de robar un coche.

-Voy a llamar a emergencias-dije cogiendo el teléfono.

-Hola-dijeron por la línea.

-ROMPERÉ LA VENTANA-gritó Lía agarrando un cubo de basura.

-Auxilio-dije por el teléfono-tiene que ayudarnos, encerramos a un niña pequeña en un coche por accidente-dije preocupada-y la gente nos está mirando muy raro.

-JURO POR DIOS QUE LA ROMPERÉ-gritaba Lía.

-No no vas a romperás la ventana le caerán vidreos-la trate de calmar.

-Dile a tu novio que se tranquilice-dijeron por la línea.

-Es una mujer y es mi amiga -dije.

-Tranquila Mía te voy a sacar de ahí-gritaba.

-Tranquila que ya vienen-dije quitándole el cubo.

-Como quieres que me tranquilice mi madre me va a matar-dijo ella hiperventilando.

-Lía, recuerda tu no eres la agresiva, tú eres la que siempre trata de tranquilizar a los demás-dije mirándola-Relájate.

-Como puedes estar así de tranquila-ella lloriqueo.

-Porque todo el mundo nos mira como si estuviéramos locas-dije mirando a nuestro alrededor.

-NO PIENSO A ESPERAR A EMERGENCIAS-gritó.