Capítulo 19

174 36 124
                                    

Había reunido a los chicos en el departamento de Carlos para darles la sorpresa. Ana, Gabi y su gran amigo, Carlos. No tenían idea de que había encontrado a Tomás, y ahora se encontraban todos en casa a la espera de mi llegada.

—Se pondrán muy felices al verte –comento mientras continuamos caminando. Tomás traía las manos dentro de sus bolsillos, y probablemente sus pensamientos se encontraban en otro lado. Al escuchar mi voz, giró su cabeza para verme y darme una sonrisa.

  —Aunque no los recuerde, me siento muy emocionado y feliz. Porque sé que ésta si es mi vida.

—Lo es.

—¿Crees que Rafael y Darío me busquen en casa de Carlos?

—Ni Rafael ni Darío saben dónde vive Carlos. Entonces eso nos da una ventaja, pero está claro que lo mejor será que te quedes en otro lugar, donde estés más seguro.

—Isa… ¿Mi familia sabe de todo esto?, ¿Saben que me secuestraron?

—Sí, pero solo tu hermana. Hizo todo lo que pudo, movió sus influencias para buscarte, pero nunca supimos nada. Definitivamente, Rafael es un hombre con muchas más influencias y poder en esta zona. Y tu madre aun no lo sabe, tu hermana dice que es mejor así, porque podría tener una recaída y seria mortal para ella saber que te encontrabas desaparecido. 

—Sí, es mejor así. Ahora solo deseo poder recordar mi vida, mi familia, a mis amigos… y a ti —sus ojos me ven con ternura.

Habíamos llegado al departamento de Carlos. Tocamos el timbre y en unos pocos segundos la puerta se abre asomándose Carlos. Sus ojos se abren en sorpresa y confusión.

—¡Tomás! –pronuncia Carlos eufórico y a continuación se abalanza a él para darle un fuerte abrazo.

Tomás lo veía con una mezcla de emoción y confusión. Sabía que era su amigo, pero tampoco podía sentir esa misma emoción que Carlos estaba sintiendo, ya que no lo recordaba.  

Ana y Gabi llegaron al encuentro, y justo como lo imaginé, sus caras fueron de sorpresa. Las dos lo abrazaron al igual que Carlos, comenzaron a indagarlo con preguntas y comentarios que dejaron a Tomás más confundido que nunca.

—Chicos, antes que nada, tenemos que hablar —comento rápidamente.

—No puede ser, ¿o sea que no recuerdas nada? —continua Gabi—. Es como si un extraterrestre se hubiera apoderado de su cerebro. Al menos sabemos que eres humano ¿verdad?

—Gabi, por favor no vayas a empezar con tus ocurrencias —habla Ana.

—Por suerte todavía no ha desarrollado habilidades alienígenas —le sigue Carlos.

Todos reímos.

—¿Siempre son así de graciosos? —pregunta Tomás con diversión.

Mientras Ana y Carlos continuaban hablando con Tomás. Gabi se acerca a mí para murmurar a mi oído.

—Podemos convencerlo de que es un espía internacional que perdió la memoria al salvar al mundo.

—Ni lo pienses, no haremos eso —contesto entre risa.

Gabi hace una mueca.

—Hubiera sido divertido.

Habíamos preparado sándwiches con chocolate para todos. Mientras continuábamos dialogando y hablando sobre lo que haríamos de ahora en adelante. Como íbamos a solucionar lo de Tomás con esas personas y, sobre todo, hacer que recupere su memoria.

—Entonces estamos todos de acuerdo de llevar a Tomás a ese lugar ¿verdad? —reafirma Carlos y asentimos, excepto Tomás que no sabía de qué lugar estábamos hablando.

Corazones Destinados✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora