Cap. 14

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El día había llegado a su fin y Jisso, exhausta y somnolienta, se encontraba fuera del hospital esperando el taxi que había solicitado hace unos minutos. Sin embargo, en ese preciso momento, un automóvil se detuvo frente a ella y al bajar la ventana, se encontró con Hwang.

─── ¿Quieres subir o prefieres quedarte? ─── le preguntó él.

Ji-soo decidió aceptar la oferta, ya que no confiaba plenamente en los taxistas. Durante el trayecto, reinó el silencio y ninguno de los dos pronunció una palabra. A la joven no le pareció extraño que su compañero conociera la dirección de su departamento.

Una vez en casa, sin sospechar que se encontraba en peligro, Ji-soo se adentró sin saber que había alguien acechándola. Agotada, escuchó cómo alguien intentaba abrir la puerta y pensó que se habían equivocado de apartamento. Con cautela, abrió la puerta solo lo suficiente para encontrarse con una persona agachada, ocultando su rostro.

─── Disculpe, creo que se ha equivocado ─── habló Ji-soo, manteniendo la puerta entreabierta. ─── ¿Necesita ayuda? ───

El asesino buscaba una oportunidad para llevar a cabo su plan, pero en ese momento, escuchó unos pasos cercanos y vio la presencia de otra persona: Hwang.

Ji-soo se sintió aliviada y agradecida de que él hubiera aparecido, ya que también sentía algo extraño respecto al hombre desconocido.

─── ¿Ocurre algo? ─── preguntó Hwang, intrigado por el comportamiento del hombre.

─── Disculpe la molestia, señorita ─── dijo el hombre haciendo una leve reverencia antes de marcharse.

─── Olvidaste esto ─── dijo Hwang, entregándole el teléfono celular a Jisso.

La chica tomó el teléfono y, después de unos minutos incómodos de silencio, se despidió de Hwang y cerró la puerta.


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Ji-soo se dirigía hacia la fundación con el compromiso de asistir a las prácticas de Ga-yeong. Al llegar, se encontró con una fila de personas siendo inspeccionadas. Hábilmente, logró abrirse paso entre la multitud y presenció cómo el señor Park intentaba expulsar a un grupo de individuos vestidos de negro, a los que despectivamente llamaba "perros salvajes".

─── Asegúrense de que el jefe no inhale ni una mota de polvo ─── exclamó el líder del grupo, dando una orden tajante.

─── ¿Quién es usted? ─── exclamó uno de los miembros del grupo, mostrando su sorpresa.

─── Saluden a la doctora del jefe ─── proclamó el líder, destacando la presencia de Ji-soo.

Los demás miembros del grupo saludaron a Ji-soo al unísono y con una reverencia.

Decidida a evitar cualquier contratiempo, Ji-soo decidió salir rápidamente de esa situación y se dispuso a buscar a Ga-yeong. Después de buscar en vano en la zona de entretenimiento, decidió marcharse al no encontrarla. Al salir, notó que los "perros salvajes" se alejaban en fila.

ᰔᩚ  DEMON  LOVE  | Jeong Gu WonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora