Muy bien.
Puedes hacerlo. Inicia con calmar tu respiración, todo saldrá bien. Angel dice que se lo merece, eso es correcto.
¿Verdad?
Pero... ¿Como lo hago sufrir?
Volvió su mirada a la caja con juguetes sexuales. Su cabeza daba vueltas, jamás vio o probó alguno de los aparatos.
¡Murió virgen, pero ya no lo es en el Infierno! ¡¿Como iba a saber que hace cada cosa?!
—¿Daisy?
—¡Si! —vio a Lucifer sentado en la cama. Podía ver que estaba confundido.
—¿Estas bien? ¿Segura que quieres seguir? No estas obligada, si quieres podemos solo hablar.
—¿Y él es el diablo? Es todo un caballero, comprensible, amable y atento. —no pudo evitar sonreír.
El Morningstar alzó una ceja— No estas obligada, Daisy. Lo haremos cuando estés lista, ¿Que?
No podía mover sus brazos, giro su cabeza viendo sobre sus hombros. Tenía las manos atadas con una especie de esposas.
—¿En que momento las puso? —vio de nuevo a la mujer. Paso saliva. Sentía un aura extraña venir de ella— ¿Daisy?
—Shh. Ahora no puedes hablar, no hasta que yo lo permita. No acabarás hasta que yo diga, y si intentas liberarte todo se acabó, ¿entendido?
Él asintió.
De un empujón, cayó de nuevo sobre la cama. Y en menos de lo que esperaba, ya no tenía sus pantalones.
—Esto tiene cara de ser para mi, pero hoy lo usaré contigo. Hm, mira esto... vibra.
—¡O...Oye!
—¿Dije que podías hablar? —Lucifer volvió a cerrar la boca— Tranquilo, Luci. No te haré daño, confía en mi.
—Lo intento...
Su cuerpo se estremeció, sus manos pasaban desde su pecho, hasta bajar cerca de su entrepierna.
—Empecemos con el nivel más alto.
—¡Agh! O...Oye, Daisy... Esto es raro... no... yo... Ah~
El aparato empezó a vibrar sobre su miembro, provocandole un cosquilleo en su espalda baja.
—Si sigues hablando me detendré. Tu elijes.
Lucifer mordió su labio. Solo liberaba pequeños jadeos, vio de soslayo a la rubia. Ella tenía su mirada enfocada en su labor.
—Hm. Mírate, ya estas todo mojado. Y eso que recién empiezo... Debemos probar muchas cosas.
—¿Muchas...?
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Ángel caído || Lucifer Morningstar [Corrigiendo]
Random¿Cielo o Infierno? Prefería quedarse en donde debía estar. Con él.