Atlantis

17...

- ¡Traerla ya!

Soltó las cadenas que llevaban atadas en el cuello los perros dejándolos en libertad estos empezaron a correr en varias direcciones, separados y sin descanso. Skr. dirigió su mirada hacia mi por debajo del hombro mientras tragaba saliva. Sabia que había echo algo mal al hacer escapar a Katia pero teníamos nuestro trato y algo mas pero no se como decirlo, no era algo táctil era como algo emocional o sentimental. Tampoco se que significan estas palabras pero las había escuchado por ahí, no le dio tiempo a explicarme del todo y educarme. Pase la mano por mi cabeza haciendo bajar mi pelo que estaba húmedo en algunas partes, cuando mire el pelaje del caballo vi que tenia manchas mas oscuras, estaba empezando a llover pero, como volveríamos a la base? se podrían perder pistas de ella, aunque no quiero que la encuentren espero que haya escapado muy lejos. Mire el suelo viendo como algunos rastros de sangre se hacían charcos haciendo que desaparezca, los caballos relincharon moviéndose, tape la cabeza del mío para que no le cayeran gotas en los ojos pero Skr. se acerco a mi con su caballo, le mire a los ojos notando mi cuerpo inquieto.

- ¿Si no aparecer, que hacer?

- Ya planearemos algo, pero no creas que te saldrás con la tuya. ¿Por qué lo hiciste?

- Yo ayudar.

- ¿Ayudar? A esa fulana será.

No se que significaba lo que dijo pero me molesto, le mire estando mas serio.

- No digas eso de ella.

- ¿Le cogiste cariño? Ese tipo de chicas están muertas de hambre y recurren a lo que sea para sobrevivir.

- No es así.

- No la conoces, olvídate de ella. Si la encontramos me quedare con su cabeza.

Me quede callado ya que no quería hablar mas, si contaba algo mas el lo iba a notar aparte de que podría atacarme. La lluvia comenzó a ser mas fuerte, seguíamos a caballo a los perros que al principio seguían huellas de unos zapatos, sabían como iba vestida por eso no sospecharon nada. Nos separamos en tres grupos, cada uno con dos perros y 5 personas. El bosque se volvía oscuro a cada rato, el primero en la fila llevaba una antorcha pero cada dos por tres se iba apagando así que llevo un farolillo de metal encendido por dentro y protegido con cristal alrededor. Fui al lado de Skr., en su derecha donde el me iba controlando lo que hacia, detrás nuestro había dos guardias mas. Estaba haciéndose de noche, los perros corrían hacia delante olfateando el suelo, arboles y plantas ya que era el único lugar de donde podían sacar el rastro de ella. Ella no es cualquier chica, habrá llegado lejos para sobrevivir, ella es fuerte. Skr. se impacientaba ya por no encontrarla, se quejaba dándole mas ordenes a los guardias así que se separaron para poder buscarla mejor pero algunos sin perro, los charcos se iban haciendo mas grandes y cada que pasábamos por encima de ellos se manchaban los caballos y nosotros. Los perros llegaron a un punto en el que se pararon para oler por todos lados pero no podían encontrar mas rastro de ella entre la tormenta, las huellas desaparecidas, el olor mezclado con el de la lluvia, pocos recursos. Suspire tapándome con la capucha de mi sudadera entonces estaba tan empapada que no era blanca ya, estaba pegada a mi cuerpo mientras Skr. seguía su ropa perfecta, solo se mojo su chaqueta. Detuvimos los caballos ya que por mucho que intentamos no pudimos continuar el rastro, tuvimos que atar los perros a los caballos para volver al punto donde nos separamos, ahí esperamos un rato a que volvieran los demás soldados que todos estaban peor que yo con el agua y la lluvia empeoraba mas la situación. Tuvimos que salir corriendo todos del lugar para volver a la base siendo el guía Skr., avanzábamos tan rápido que me llegue a preocupar por los caballos por si estaban cansados y mi teoría se confirmo cuando uno de ellos puso mal su pata cayendo rodando al suelo dejando tirado en el suelo a su jinete, así pasaba con algunos pero delante nuestro se ilumino con un rayo tras después el ruido del trueno cosa que nos hizo detenernos por un momento pero tras eso los que se cayeron se volvieron a incorporar a nuestra marcha para volver a la base. Era la primera vez que veía un trueno caer delante mío pero Katia me había hablado de ello pero me dejo medio parado.