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- Quien te envío flores? - preguntó Minhyuk.

- Nadie, yo las compre. Sabes qué amo las rosas.

- Eso lo sé, amas las rosas rojas, odias las rosas blancas, quien fue el torpe?

En la mesita de noche junto a su cama tenía un florero con cuatro rosas blancas. Recibió una diaria los pasados cuatro días y no tuvo que leer el nombre para saber quién las había enviado. No planeaba contarle a Minhyuk, pero esa mañana al enviarle una selfie no se percató que las flores se asomaban en la parte de atrás.

- Quise darles una oportunidad, me parecieron bonitas cuando las vi - le dijo concediéndole una sonrisa que le supo falsa

- Por qué mientes?

- Es la verdad, odio las mentiras - sentenció.

- Y las rosas blancas.

Wonho se puso de pie.

- Estaré en la terraza bebiendo té, el que sobreviva puede acompañarme a cenar más tarde.

Minhyuk continuo una vez que el mayor se marchó.

- Que pasa contigo? Estás raro.

Changkyun cruzó las piernas.

- Nada - se distrajo con el arreglo que se encontraba sobre la mesita de centro - Por que?

- Te conozco, pareces ansioso, o yo que se. Las rosas no son lo único nuevo, odias limpiar y ayer que te visite no había mota de polvo en ese lugar. Así que, o me dices que te sucede, o comenzare a lanzarte cosas hasta que hables.

Changkyun puso los ojos en blanco.

- Esta bien, pero voy a golpearte si le dices a alguien.

Minhyuk hizo una seña con sus dedos sobre sus labios simulando un cierre.

- Bien, que conste - suspiro - Vi a Jooheon hace unos días.

- Frente a frente? si fue de lejos o en la tele no cuenta.

- Obviamente frente a frente.

- Y fue a puerta cerrada o a entrada abierta? - puso una sonrisa picara.

Changkyun lo miro con cara de asco.

- No, nos vimos, o más bien, me obligaron a verlo en el viejo restaurante de dumplings. Quería hablar.

- Espera - hizo una seña con sus manos - vamos más despacio, quien te obligo? y cual restaurante? el de nuestro antiguo barrio?

- Un viejo amigo de él, le hice el favor al señor Lee de llevarlo, y el hombre me guio hasta ese lugar, el mismo donde veía a... - hizo una pausa incómodo dejando la frase sin terminar - me dijo lo que habían estado planeando y cedi.

Minhyuk se carcajeo.

- Que astuto, en ese caso nadie te obligo, pudiste irte solamente. Bueno ya no importa, dime que te dijo?

Changkyun le contó la conversación a detalle. Para cuando terminó, Minhyuk lo miraba como si dicha historia fuese inventada.

- Imposible! - musitó, sorprendido - Tú qué le dijiste?

- Le pedí tiempo, y el maldito solo me dio de 4 a 5 días.

- Qué harás si va a buscarte?

Lo abrumó la pregunta. Había tenido un mes lleno de pensamientos intrusivos sobre lo que hubiera y no hubiera podido ser. Se había sentido lastimado cuando aceptó su decisión de no volver a verse sin insistir, pero con su regreso, no había hecho más que poner su mundo de cabeza nuevamente, haciéndolo sentirse mareado desde su declaración.

El Hijo del presidente - JookyunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora