Cara de Ángel

capitulo 6

Voy por el pasillo con Bill y Anette camino al casino para almorzar cuando veo a Luisa entrar junto a sus amigas y me acuerdo de lo que me contaron los chicos ayer -chicos- hablo y ellos me miran -pase lo que pase no se metan ok- los miro y ellos solo asienten. Entro y busco con la mirada, veo a los chicos comiendo con unos tipos que se juntan con ellos, sigo buscando y la veo tomando asiento cerca de los chicos ella los mira y arregla sus pechos, pero ellos ni la miran, camino hasta ella con mis amigos detrás atentos a lo que hago. Luisa me ve y pone cara de asco, me paro delante de ella y sin más le doy una cacheada, todo se queda en silencio y ella se para enojada tocando su mejilla -esto es solo una advertencia, deja de andar de puta provocando hombres que no son tuyos- ella sonríe burlesca.

-Tu y ellos no son novios ni nada solo le abres tu piern- le doy otra cachetada sin dejarla terminar, Bill me toma del brazo, pero yo no me muevo.

-Mientras ellos- los apunto -tengan algo conmigo SON MIOS y para la próxima vez que me enteré de que estas cerca de ellos esto no será nada- me acerco a ella y trata de golpearme, pero sujeto su mano.

-Suéltame maldito, me las pagaras, esto no se quedará así entiendes- chilla enojada -no eres más que una zorra que se mete con cualquiera- sigue chillando.

-Mi intimidad no te concierne, pero dudo mucho que haya estado con más hombres que tú, digo, si pregunto en este momento a quien le abriste las piernas varios levantaran la mano- miro a mi alrededor y veo risas burlescas, la miro nuevamente – en cambio yo, no me he acostado con ninguno de aquí, bueno, sin contar a esos tres de haya que por ahora me pertenecen- digo arrogante.

-Y así dices que no eres una puta, asumes que te acuestas con los tres- dice sonriendo -me das asco- gruñe y resoplo cansado. Me alejo un paso y miro a mi alrededor.

- ¿Quién de aquí le ha metido la polla a esta tipa? – pregunto y se empiezan a levantar muchas manos y escucho como dicen cuándo y cómo se la follaron, esta mira a todos enojada, se acerca a mi para golpearme, pero soy más rápido y la afirmo poniendo su brazo sobre su espalda - ¿Quién se ha acostado conmigo? – pregunto fuerte y veo tres brazos arriba -uds no idiotas- digo a los chicos que tienen una sonrisa en la cara, bajan su brazo y todo queda en silencio y nadie levanta el brazo ni dice nada -lo vez ¿Quién es la puta aquí? – la suelto tirándola al suelo -tu no me llegas  ni a los talones Luisa, todo este show para darte cuenta que nadie te toma en serio, me das pena- me agacho a su altura -deja a mis hombres en paz, que para la otra no abra gente para ver lo que te are- ella me mira enojada y aprieta sus dientes, me levanto y la miro desde arriba -última vez que soy amable contigo-  camino hasta donde está la comida y sin importarme lo que murmuran me siento junto a mis amigos a almorzar.

-No te molesta que todos sepan que tienes una relación con los tres mosqueteros- dice Anette y yo niego con la cabeza.

- ¿Porque me molestaría? Sabes que no me importa lo que hablen los demás, solo puse en su sitio a esa puta porque se les tira a los chicos y los acosa- respondo sin más.

-Pobrecitos… y tu tenías que defenderlos ya que ellos no son capaces de hacerlo- gruñe Anette enojada.

-No es eso, soy yo quien lleva el mando, debo darme a respetar- argumento y ella me mira sin decir nada, seguimos comiendo sin hablar del tema. Estamos terminando de comer cuando hablan por los altavoces.

-Ren Kang presentarse a dirección por favor- dicen y yo quedo con mi cuchara a medio camino -Ren Kang presentarse a dirección- repiten, Bill y Anette me miran asustados.

- ¿Qué hiciste? – pregunta Bill.

-Nada- me levanto de la mesa sintiendo todos los ojos puestos en mí y camino a dirección, al llegar toco la puerta y entro cuando escucho el “pase” del director -permiso- digo y este levanta su mirada.

-Joven Ren tome asiento por favor- hago lo que me dice y me siento delante de él.

- ¿Para que soy bueno? – pregunto y este se quita los lentes.

-Lo llame porque me han informado que agredió a una chica hoy- asiento entendiendo lo que ha pasado, esta chismosa cree que estamos en la secundaria - ¿es cierto eso? – pregunta serio.

-Si, ella se metió con lo mío y no podía permitirlo- digo sincero y este levanta su ceja.

-Sabe que puedo sancionarlo por eso, no está permitida la agresión joven- me acomodo en mi asiento mirándolo.

-Lo se señor, por eso mismo hice lo que hice- el me mira sin entender -Ud sabe que la agresión no es solo golpes, ella hace mucho que me acosa y humilla, ahora que estoy… empezando una relación ella a echo lo imposible para arruinarlo así que la puse en su lugar- el me mira sin decir nada -ahh y ella también me ha golpeado antes y nunca nadie dijo o hizo algo. -

- ¿Si eso pasaba porque no dijo nada joven Ren? – pregunta y yo me recargo en la silla.

-No estamos en la secundaria como para andar acusando, prefiero encargarme yo del problema- este me mira como analizándome.

-Está bien joven, puede retirarse- asiento y me levanto para salir de la oficina -joven- me giro y lo miro -que no vuelva a pasar en mi universidad, si tiene algo que arreglar hágalo fuera- asiento y salgo, mis amigos están esperando por mí.

- ¿Qué paso? ¿Por qué te llamo? – pregunta Anette.

-Luisa vino a quejarse- gruño -pero el director lo dejo pasar- sonrió porque no se salió con la suya y se lo are saber, camino hasta su casillero y la veo riendo con su amigas -pero mira a quien tenemos aquí- ella se gira y me mira enojada -ahora resulta que tienes 10 años que andas acusando- me acerco a ella y esta retrocede -pues no te salió, desde ahora todo lo que pase lo arreglaremos fuera de aquí- le giño un ojo y camino hasta mi salón. Luego de eso Luisa ha estado muy tranquila y por lo que me dicen los chicos no se les ha acercado.

Los días pasan y ya han pasado tres semanas desde que empecé con los chicos, ellos son muy atentos conmigo y siempre quieren estar conmigo, se puede decir que disfruto de su compañía y el sexo con ellos me deja muy satisfecho. Hoy ellos vendrían a buscarme a mi casa, pero me extraño ya que están retrasados los llamo, pero no contestan, suspiro cansado y tomo un taxi para no llegar tarde a clases. No los veo por toda la mañana y no contestan mis mensajes.

-Tal vez se fueron del país- bromea Anette y rodo mis ojos.

-Idiota- digo y ella golpea mi hombro, estoy en una banca con ella mientras esperamos a Bill cuando veo a los tres alfas caminar hasta mí, se ven serios.

-Te espero en el salón- dice Anette y yo asiento. Ellos la saludan y me miran - ¿pasa algo? – pregunto al ver sus caras.

-Lo sentimos por dejarte esperando y por no contestar, no podíamos- habla Vicent algo nervioso.

-No hay problema- respondo sin más, si no me quieren contar allá ellos.

-Tuvimos que ir a la empresa de mi padre a solucionar un problema- dice Edward.

-No se preocupen, solo para la otra me avisan- digo y antes de que ellos hablen llega un omega y abraza a Vitor.

- ¿Porque me dejaron solito? - dice aniñado, estos se ponen rígidos y lo miran para luego mirarme a mí.

- ¿Y este qué? – pregunto serio. Los chicos se miran entre ellos y el omega me mira notando mi presencia.

-Hola, soy Rubén, prometido de estos chicos- se presenta y yo los miro pasmado. Edward evita mi mirada, Vitor se suelta del abrazo y gruñe mientras Vicent solo me mira.

-Prometido- repito y este asiente con una sonrisa gigante.

-Si, dentro de unos meses me casare con ellos- presume - ¿y tú quién eres? – pregunta. Pienso en que responder, en si decirle la verdad o fingir… bueno, no les debo nada.

Miro mi reloj y luego los miro a los cuatro, los chicos están nerviosos y veo miedo en sus ojos ¿les dará miedo que le diga la verdad? – hasta hace unos segundos éramos… ¿amigos sexuales? – este abre sus ojos pasmado y los mira pero ellos solo me miran a mi -teníamos una relación pero desde el principio deje en claro que sería exclusivo, si no esto se acababa y por lo que veo no cumplieron- los miro.

-No, déjanos explicar- habla Edward nervioso.

-No es lo que parece- dice Vitor.

-Escúchanos- susurra Vicent.

- ¿Ósea que es verdad? ¿tienen algo con él? – pregunta Rubén, pero los chicos no le dan bola y se acercan a mí.

-Los escucho- ignoro al omega casi llorando, no me importa el.

-Esta mañana mi padre nos llamó y nos dio la noticia de que nos comprometió con él, lo conocemos desde niños, pero por lo menos yo no tengo intención de casarme con el- dice Vitor, miro al omega y este lo mira enojado.

-No pudimos negarnos, pero no nos casaremos con él, lo solucionaremos- dice Edward.

-No digan eso, uds y yo si nos casaremos… yo los amo ¿Por qué me hacen esto? – solloza y yo bufo cansado.

-No tengo tiempo para esto, cuando solucionen el problema hablamos, mientras tanto no se acerquen a mi- tomo mi mochila y me voy dejándolos atrás. Se van a casar… no puedo evitar sentir algo en mi pecho, estuvimos poco tiempo juntos, pero me avía acostumbrado a ellos, paso mi mano por mi rosto -menuda mierda- gruño. Salgo de la universidad y me voy a casa sin importarme las clases que me quedan, en esta me estiro en el sofá procesando lo que ha pasado. Vaya suerte, ahora resulta que están comprometidos… no quiero problemas así que lo mejor es evitarlos, llamo a Bill y este llega rápido a mi casa con unas botellas de cerveza. Le cuento lo que paso y este bebe conmigo acompañándome.

- ¿Los quieres? – pregunta cuando estamos ya borrachos.

-Me encariñe con ellos, me gustaba mucho su compañía, sus maneras de ser me gustaban, Vitor es serio y gruñón, Vicent es divertido y Edward es muy tierno cuando no está enojado- respondo sincero -si… me tomo por sorpresa su compromiso, pero no estoy para dramas así que es mejor terminar- Bill me mira.

-Los quieres, se te nota- me sonrojo un poco.

-Puede ser… pero como te digo, no estoy para dramas- seguimos tomando como si no hubiese mañana hasta quedar dormidos en el living, a lo lejos siento golpes y gritos, arrugo mi entre cejo molesto por el ruido y gruño.

-Despierta- escucho el gruñido de Vitor y me quejo.

-Deja de molestar- gruño enojado, no dejan ni dormir estos imbéciles, que se vayan con su promet… espera, es Vitor, abro mis ojos y me siento rápido -joder- afirmo mi cabeza ya que me duele mucho. Abro mis ojos de a poco y veo a los tres en frente de mi enojados - ¿Qué hacen aquí? Váyanse y dejen mi llave aquí- gruño mirándolos.

- ¿Qué paso aquí? – pregunta Vicent y miro mi alrededor, veo botellas de cerveza por todos lados y Bill está durmiendo en bóxer en mis piernas -contesta- exige y yo lo vuelvo a mirar enojado.

-No es asunto tuyo, creo que fui muy claro con uds ayer, no los quiero ver- estos me miran serios.

- ¿Te acosaste con él? – susurra Edward y yo lo miro como si tuviera un tercer ojo.

-Estás loco, es omega- relaja su expresión - ¿Qué hacen aquí? – vuelvo a preguntar.

-No sabíamos nada de ti desde ayer, estábamos preocupados- habla Vicent.

-Dije claramente que no quería nada con uds hasta que solucionaran su problema, no seré su amante- me levanto del sillón acomodando a Bill que esta más muerto que vivo, camino hasta el pasillo y volteo a verlos -largo de mi casa- me giro y camino hasta mi cuarto quitándome la ropa, siento la puerta principal cerrarse y suspiro al saber que se fueron, doy el agua de la ducha y la dejo recorrer por mi cuerpo, me tomo mi tiempo para relajar mi cuerpo y trato de despejar mi cabeza ya que me siento borracho aun, cuando siento que estoy listo salgo del agua y me seco el cuerpo, camino desnudo hasta mi cama dejándome caer de espalda, cierro mis ojos cansado. Me sobresalto cuando me toman de las manos, abro mis ojos y es Vitor quien me mira fijo - ¿Qué haces, suéltame? – pido enojado ¿no se avían ido?.

-No, Ren te deseamos, queremos estar contigo, no nos importa lo que diga mi padre, solo contigo queremos estar- susurra en mis labios, miro sus ojos y luego sus labios, joder como quiero besarlo… a la mierda, me acerco y lo beso dejándome llevar, tal vez es el alcohol pero no me importa, quiero estar con ellos hoy, mañana vere que hago, meto mi lengua en su boca probando todo su sabor, siento las manos de Edward por mis piernas y Vicent se deja caer a mi lado mirándome, jadeo cuando Edward toma mi polla y la lleva a su boca saboreándola, no dejo de besar a Vitor y Vicent toca mis pezones -ahhg- gimo despacio al sentir el calor de la boca en mi polla, siento cosquillas en mi estomago pero no quiero acabar aun así que me separo de Vitor para dejar de besarlo y me alejo de Edward, libero mis feromonas provocando gruñidos, tiro de sus ropas y los dejo a los tres desnudos, hoy es la segunda vez que estoy con los tres al mismo tiempo, me coloco arriba de Vitor alineando su polla en mi entrada y me dejo caer montándolo, llevo mi mano hasta el cuello de Edward para besarlo apasionadamente -tú también entra- pido, sus ojos brillan y asiente colocándose detrás de mí, miro a Vicent que está a nuestro lado y con mi dedo lo invito a acercarse, este se acerca y tomo su erección con mis manos masturbándolo, siento como Edward mete un dedo en mi interior siguiendo mis movimientos sobre Vítor, este también mueve sus caderas -mmgghh- gimo cuando mete otro dedo, me concentro en mover mi cadera y masturbar a Vicent para no sentir dolor, es primera vez que hago esto, acerco mi boca a la polla de Vicent para lamerla y chuparla, meto todo su falo en mí, este mueve sus caderas follandose mi boca -mmhhh- gimo cuando Edward saca sus dedos de mí.

-Entrare ahora cariño- susurra colocando su polla junto a la de Vitor, este detiene un poco sus embestidas para dejarlo entrar -joder- gruñe al meter la cabeza, mierda duele.

-Concéntrate en mi angelito- dice Vicent y eso hago, mientras Edward mete su polla en mi yo chupo la polla de Vicent, paso mi lengua por su frenillo sacándole un gruñido sexy.

-Aahh- gimo fuerte cuando Edward mete todo su falo en mí, comienzo a mover lentamente mi cadera mientras ellos también comienzan a moverse, Vitor besa y muerde mis pezones mientras sus manos están en mis caderas, Edward agarra mi cintura aumentando sus movimientos y Vicent se folla mi boca.

-Joder… esto es como un sueño- dice Vitor extasiado, sube su rosto para besar mi cuello dejando marcas.

-Estoy en el cielo cariño- gruñe Vicent aumentando sus embestidas en mi boca, de mis ojos salen lagrimas debido al placer, tener dos pollas en mi trasero y una en mi boca me tiene en el cielo, mi cuerpo tiembla y siento espasmos por todos lados.

-AAAHHH MIERDA- grito cuando siento que me corro sobre Vitor, él también se corre junto a Edward y Vicent se corre en mi boca, trago todo sin desperdiciar nada. Trato de controlar mi respiración y de calmar los espasmos en mi cuerpo, me dejo caer sobre Vitor cansado y de a poco voy cerrando mis ojos sin importarme que aún tengo dos pollas en mí, me dejo ir y me duermo arriba del fuerte pecho de Vitor.

La luz del sol llega a mi rostro despertándome, abro mis ojos y me quedo mirando por unos segundos la ventana, siento movimiento a mi lado y al girarme veo a Edward a mi lado durmiendo, veo el resto de la cama y están Vitor y Vicent también durmiendo -joder- susurro cuando todo viene a mi mente, con cuidado me siento en la cama, me duele el trasero a horrores, nunca más tomo alcohol. Sin despertar a los chicos me levanto con cuidado y voy al closet para vestirme ya después me bañare, salgo de la pieza encontrándome con un Bill avergonzado tomando desayuno.

-Solo quería despertarte, no quise mirar- dice rojo como un tomate.

-No importa, ni yo sé cómo amanecí con ellos- tomo asiento junto a él y comienzo a comer.

- ¿Volverás con ellos? – pregunta y yo niego.

-Mientras estén comprometidos no- aseguro, Bill se queda en silencio y lo miro, este mira detrás mío y se quienes están allí. Me giro y ellos están parados solo en bóxer mirándome, no sabría descifrar sus miradas, pero no se siente bien. Bill se levanta sin mirarlos y aún más rojo que antes ¡estos tipos están en ropa interior!.

-Los dejare solos, nos vemos en la U- asiento a sus palabras y este se retira dejándome solo con los tres.

Edward enojado camina hasta mi tomándome del brazo, me asusto un poco por su acción -ya te dejamos en claro que no nos casaremos, queremos estar contigo ¿Por qué sigues diciendo que no quieres estar con nosotros? – gruñe furioso, muevo mi brazo para liberarme, pero este aprieta más su agarre provocándome dolor.

-Suéltame- gruño enojado también, pero este me ignora.

-Desde el momento en que aceptaste estar con nosotros eres nuestro ¿entiendes? ¡NUESTRO! – dice y yo arrugo mis cejas aún más enojado. Vicent también se acerca poniéndose al lado de Edward.

-Si no quieres estar con nosotros ¿Qué fue lo de anoche? – pregunta serio.

-Estaba borracho, solo quise acostarme con uds eso no significa que estaré con uds, ya les dije que no seré su amante y mientras estén comprometidos con ese omega no volveremos a estar juntos- le respondo y miro nuevamente a Edward que aún me tiene agarrado -suéltame si no quieres que te golpee- amenazo pero este no lo hace así que agarro su pecho empujándolo hacia atrás golpeándolo con la mesa - ¡SUELTAME! – gruño con mi voz de mando y este suelta un poco su agarre, tiro de mi brazo y le doy un derechazo, este pone su mano en su boca mirando su sangre -ME ARTARON, LES DIJE QUE NO QUIERO PROBLEMAS, LES DIJE QUE NO SERE SU AMANTE Y MIENTRAS ESE OMEGA ESTE SERCA DE UDS NO SE ME HACERQUEN, LO DE ANOCHE NO SIGNIFICO NADA… AHORA LARGO DE MI CASA- grito furioso, Vicent me mira pasmado, Edward con pena y Vitor se acerca a mi serio.

-Eres tú quien no entiende, quieras o no estaremos juntos- amenaza, lo miro altanero retándolo con la mirada -eres nuestro así no te guste, grábatelo en la cabeza Ren- este va al cuarto para después salir del apartamento enojado, miro a los otros dos que aún están parados mirándome.

-Are lo que sea con tal de que vuelvas- dice Vicent -así sea a la fuerza- se retira también al cuarto junto a Edward para colocarse sus ropas -nos vemos cariño- sale de mi casa y queda Edward que solo me mira.

- ¿Qué esperas? Vete también- digo mirándolo enojado, veo su herida y me siento mal por golpearlo, pero él se lo busco y paciente no soy.

-Por favor no nos alejes, entiende que no podemos negarnos aun a ese matrimonio- se acerca a mi poniendo sus manos en mi rostro -te juro que aremos lo imposible para que no suceda- susurra.

- ¿Y qué hago yo mientras? esperar pacientemente el día de su boda, ser su amante delante de todos, si no pudieron negarse en el momento ¿Qué les hace pensar que podrán hacerlo después? Dime, tendré que ver como preparan su boda- sus ojos se ponen llorosos -dime ¿quieres que los ayude a elegir el traje y sea su dama de honor también? – este me mira dolido y no niego que también me está doliendo -por favor vete- susurro sintiendo el nudo en mi garganta.

-Yo te quiero- afirma, ahora soy yo quien tiene los ojos llorosos, no sé porque, pero ese te quiero duele, duele que me lo diga ahora, en estas circunstancias -Nos conocemos hace poco, pero te juro que te quiero desde la primera vez que te vi- cierro mis ojos evitando que caigan lágrimas, no puedo permitir que me vea así.

-Por favor vete- pido aun con los ojos cerrados, este se queda unos segundos en su lugar para luego bajar sus brazos.

-Siento mucho que esto haya pasado angelito- siento sus pasos y luego la puerta siendo cerrada, abro mis ojos y miro hasta la puerta que está cerrada, aclaro mi garganta para luego suspirar sentándome en la silla. Me siento mal, solo salimos unas semanas no debería de doler así.