primera vez.

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Después de mi colapso de ayer, no paso nada, mi padre, como buen doctor, extendió una constancia de mi ¨enfermedad¨ y por los próximos 5 días no iría a la escuela.

Estaba acostada, hacia como una hora que se fue mi papá al hospital y yo aun seguía acostada, mi celular comenzó a vibrar.

Cuando vi la pantalla y quien era, mi sonrisa se hizo aun más grande.

-¿hola?-conteste tímidamente.

-niña ¿Cómo amaneciste?-dijo con voz dulce y tierna.

-bien, mi papá se acaba de ir, ¿lo has visto?

-no, ¿Por qué?

-no, solo…-rio.-¿quisieras que te vaya a ver?

-si!-respondí de inmediato.-si…

-voy dentro de 30 minutos, ¿te parece?

-si, así podemos desayunar juntos, ¿quieres?

-si, voy a desayunar contigo.

Y colgó.

Me levante rápidamente de la cama, saque otra pijama más linda que esta, tome un camisón rosado con pequeñas flores al final. Arregle mi cabello con una tierna cola de caballo mal hecha.

Quiero darle un aspecto de niña buena recién levantada.

Entre a mi baño y cepille mis dientes, no quería que me oliera la boca y Diego me besara…eig .

Después de esto baje a la cocina.

De la alacena saque una bolsa de harina para hot cake.

En ese momento, escuche la puerta principal abrirse, era él.

Mi padre insistió en que tuviera llaves de la casa para cualquier emergencia, así que, Diego podía entrar a la hora que quisiera.

-hola mi niña.-lo mire y me acerque a él para abrasarlo.

Mas bien me cargo.

-espera.-me dijo y a la vez me bajo y saco su celular, comenzó a marcar.-¿si? ¿Efrén? A si, es que te llamaba para decirte que si no tienes ningún inconveniente en que visite a romina.-espero la respuesta.-a si, yo la cuido, hasta luego.-colgo. Lo mire.-¿Qué? No quiero que se enoje.

-bueno, mira ven.-lo lleve a la cocina.-estaba por preparar el desayuno…-me calle, pues me dio un beso, me limite a disfrutarlo.

-quiero intentar algo…-me redacte.-nada.

-¿Qué?-pregunto tomando un vaso de agua.

-te quiero.-le dije abrasándolo.

-yo también te quiero.-dijo y me beso la frente.

-así que…tengo una idea.

Lo tome de la mano e hice que caminara.

-a donde vamos.

-solo camina.

Subimos las escaleras, giramos a la derecha y a penas llegando a la puerta se detuvo.

-¿Qué estas pensando?

-nada.-me hice la inocente.-entra.

Me miro con cierto enojo, aun así entro.

Nos miramos y lo comencé a besar. Poco a poco lo acerque a la cama…pero al orilla se detuvo.

-niña.

-solo hazlo…por favor.

-pero…

-shh…-lo calle besándolo.

De nuevo nos besamos y me acostó tiernamente en la cama.

Así…nos dejamos llevar hasta el final de nuestro deseo y amor. 

sweet dreams...againDonde viven las historias. Descúbrelo ahora