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Ellie volvía al apartamento ya al anochecer tras haber visitado a Tommy. Al entrar inmediatamente notó el olor a comida que emanaba desde la cocina abierta tipo americana que tenía Luce.

-¿Te gusta la pasta?- dijo al escuchar a Ellie entrar por la puerta principal.

-Eh si, claro. Muchas gracias, para la próxima no te preocupes en cocinarme. Yo me puedo hacer mi cena.-

-Mejor matar dos pájaros de un tiro, no hacemos dos desastres en la cocina y optimizamos mejor el tiempo, no?- 

-Gracias.- respondió la pelirroja,

Apenas recibió su plato de comida se lo llevó a su habitación para poder hacerle la clase al chico que le había pagado. 

 Pasaron algunos días y la situación se mantenía igual. Comía en su habitación y apenas tenía tiempo siquiera para saludar a Luce. Se pasaba haciendo clases o recorriendo Seattle llenándose de nostalgia. De vez en cuando cruzaban alguna mirada incómoda, un roce accidental o alguna corta conversación donde ninguna sabía bien como conversar con la otra. Luce era una persona muy segura de sí misma, sarcástica, imponente y bastante sociable. Ellie no era muy distinta, pero había un pequeñito detalle que la cambiaba un poco al interactuar con Luce, pues ella había sido la primera chica que le había gustado en la secundaria. El largo cabello negro con sus ojos claros habían llamado mucho la atención de una pequeña Ellie que acababa de ingresar a la institución. Le duró poco más de un año la obsesión, el resto de su historial amoroso es historia. 

Era un poco incómodo convivir con la chica con la cual te obsesionaste por más de un año en tu adolescencia, para ser honestos.

Por simple curiosidad aprovechó que la chica de pelo azabache se encontraba en el baño para asomarse en su habitación, pues nunca la había mirado. Notó en la pared una bandera arcoíris colgada.

"No estaba taaaan perdida." pensó, riendo internamente. Rápidamente su atención cambió de foco cuando notó una voz venir del baño. Luce estaba, al parecer, hablando por teléfono con alguien. No alcanzó a escuchar mucho excepto una parte.

-...está muy buena la verdad. Se quedará un tiempo. Deleite visual.- rió Luce.

Ellie volvió a su habitación, rió para si misma. Sin duda estaba un poco sorprendida y a la vez algo halagada por el comentario.

Abrió su computadora para ver un par de capítulos de alguna serie antes de irse a dormir, sin embargo identificó un sonido ajeno que venía de afuera de sus auriculares. Se los quitó intentando descifrar qué era (y de dónde provenía) el sonido invasor. 

Abrió los ojos como platos cuando finalmente se dió cuenta de que lo que escuchaba eran gemidos de la habitación de al lado. ¿Había Luce invitado a alguna amiguita? No, definitivamente no. Entró sola y si alguien más hubiese entrado después lo hubiese escuchado. La puerta de la entrada hace muchísimo ruido. Mierda, estaba pasándolo bien... sola, por decirlo de alguna manera. 

Al rato los ruidos cesaron y Ellie se fue a dormir.

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[AL DÍA SIGUIENTE]

Habiendo terminado la clase y otras cosas pendientes, Ellie salió considerablemente tarde en la noche de su habitación. Notó que Luce también estaba despierta, tenía los auriculares puestos mientras lavaba platos. Definitivamente no escuchaba nada de su entorno. Se acercó lentamente y se posicionó justo atrás de la pelinegra. Presionó su cadera contra la de la chica, luego apoyando sus manos en estas mismas. Luce se quitó los auriculares de la cabeza y los apoyó en la encimera. Los labios de Ellie se acercaron al oído de la chica. 

-¿Así que crees que estoy buena? ¿Que soy un deleite visual?- susurró.

La pelinegra extendió su mano atrás de su espalda, afirmando el cuello de Ellie acercándola aún más a su oído.

Ellie besó su cuello, todavía detrás de ella. Sus manos recorrían todo su cuerpo.

-No me has respondido.-

-Si, opino todo eso.

La mano de Ellie se deslizó debajo de la blusa de Luce, avanzando hasta su pecho y provocando un intenso suspiro.

-¿En qué pensabas anoche, cuando te tocabas?-

-Mierda. En tí.-

Ellie mordió levemente la oreja de la pelinegra.

-¿Qué pensabas exactamente de mí?- continuó susurrando mientras masajeaba la zona sensible de su pecho.

-Imaginaba que me tocabas.-

-¿Cómo?-

Luce tomó la mano de la pelirroja y la posicionó sobre su pantalón. Ellie lentamente abrió el botón y bajó el cierre de este. Deslizó su mano dentro. Apresuró en tocarla donde más quería, provocando que el cuerpo de la chica se arqueara y moviera en reacción a sus movimientos. 

-No ahogues esos gemidos tan bonitos que tienes.- pidió Ellie, apresurando los movimientos con su mano.

Aquellos ruidos inundaron rápidamente todo el apartamento. 

Ellie paró de tocarla y la dió vuelta para que la mirara. La cargó en sus brazos y la llevó hacia su habitación. La dejó sobre su cama y comenzó a quitarle los pantalones, los cuales no tardaron en volar al piso. Se recostó boca arriba en la cama y se acercó el cuerpo desnudo de Luce hacia su cara.

-El orgasmo que tuviste anoche va a parecer un puto chiste en comparación a este.- continuó provocándola.

La sentó sobre su cara y comenzó a trabajar con su boca mientras la chica se afirmaba del respaldo de la cama. Luce ya no podía evitar gemir y suplicar que no parara.

-No creas que no te escuché anoche tocándote al mismo tiempo que yo.- murmuró la pelinegra entre suspiros provocando de vuelta a Ellie, lo cual provocó que solo fuera más rápido y afirmara más fuerte sus piernas.

-No pares, me voy a venir.- pidió Luce. La pelirroja hizo lo contrario, parando y mirándola con picardía.

-Sigo solo si me lo suplicas.- 

-Por favor no pares.-

-No es suficiente.-

-Ellie te pido por favor que sigas, joder. Anoche no podía parar de pensar en esta mierda por favor necesito que hagas que me venga.- suplicó.

La pelirroja rió y resumió lo que estaba haciendo. La chica afirmó el cabello de Ellie con ambas manos y comenzó a mover sus caderas en contra de la cara de esta hasta eventualmente dejarse llevar por el clímax. 

Ellie afirmó su cuerpo hasta que lentamente dejó de moverse y se relajó, cayendo acostada al lado de ella. Quito el pelo de su cara y la tapó con una sábana, buscando sobre su mesa de noche una pequeña toalla para ayudarla a secar el sudor de su cara y cuerpo. Una vez calmadas, se recostaron una al lado de la otra. Era la primera vez que Ellie tenía sexo con otra persona que no fuera Megan desde que terminaron. Y sorprendentemente no había pensado en ella en un solo segundo.


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Autora: Capítulo más corto porque es literalmente solo sexo JKASJKDAJKSD ups

Esta es mi disculpa por mi ausencia, un capítulo full de Ellie modo dominante!!!! Bueno, eso, no hay mucho más que explicar. Disfruten.



GREEN EYED 2 - The Fucked Up TalesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora