Empatados, así iban los dos pequeños equipos, cansados, sin ganas de seguir.
El empate se mantenía, sin importar lo que sucediera, por eso caían, uno a uno, derribados por el agotamiento.
No importaba cuánto tiempo había pasado, al fin y al cabo, se sentía como una eternidad.
No entendían como podían estar tan cansados en un juego de solos dos vs dos, que duraba menos tiempo (al menos en teoría) que un partido de fútbol normal.
Pero al estar buscando desesperadamente marcar los cinco goles necesarios para ganar, daban todo de si de principio a fin, no bajaban nunca el ritmo, y resultaba increíblemente agotador.
Lo peor no fue eso, lo peor fue que aún tendrían que marcar dos goles más alguno de los equipos para que terminara el partido.
A pesar de todo el cansancio que se apoderaba de sus cuerpos, ninguno de los cuatro jóvenes tenía intenciones de bajar el ritmo, si lo hacían, existía la posibilidad de que fueran eliminados de Blue Lock.
Rendirse o bajar el rendimiento no era nada factible, pero jugar de una forma tan intensa sin descansos tampoco lo era.
La posibilidad de que aquello generará una lesión estaba ahí, pero todos preferían ignorarla para seguir dando lo máximo que sus cuerpos permitían.
Entre tanto forcejeo entre ellos, la pelota salió disparada, saliendo de la cancha por la banda izquierda, peligrosamente cerca a la portería de Aryu e Isagi.
"Tengo que... Meter un gol, voy a ser mejor que todos estos idiotas, jugaré con el número diez en la selección de Japón, mientras todos ellos tienen que verme desde los sofás de sus casas" Se dijo a si mismo el rubio, al recibir el pase de Barou desde la banda.
Iba a pasar la pelota inmediatamente a Barou al verlo alejarse de la marca de Aryu e Isagi, fue algo casi instintivo para él, pero no, no lo haría.
Giró sobre sus propios talones para empezar a correr hacia la banda derecha, confundiendo a todos los demás en la cancha.
Aryu fue hacia él, mientras que Isagi mantenía a Barou vigilado.
"Que está intentando este idiota".
Al escuchar más palabras de Barou, al pelinegro le quedó claro que ni el chico robusto entendía las acciones de Kira.
Pero entonces, viendo como el chico de pelo largo se plantaba cada a cara con el rubio, de alguna extraña forma, Isagi supo lo que él tenía que hacer, de alguna manera encontró el mejor curso de acción para neutralizar el plan de Kira.
Jugar con el rubio le había dado mejor compresión de su estilo de juego de lo que muchas creerían.
"Ahora" Y sincronizado con sus propias palabras, Isagi abandono a Barou para correr hacia la portería.
Casi al mismo tiempo que Kira burlaba a Aryu con un caño milagroso que el chico glam no pudo evitar.
"Que glam es" Murmuro sorprendido.
Incluso alguien como Aryu podía notar la majestuosidad y clase con la que se movía Kira por la cancha, parecía como si un halcón hubiera descendido directamente del cielo para jugar con ojos críticos.
Pero Isagi no se detuvo a pensar en eso, y siguió corriendo, justo a tiempo para que Kira tirará a portería, cuando el portero holograma se adelantó en un intento fallido de quitarle el balón al rubio.
El pelinegro no iba a llegar, incluso resbaló y cayó al suelo justo dentro de la portería.
Y cuando desde el suelo, vio pasar la pelota, lo mejor que se le ocurrió fue extender la mano hacia arriba y golpear el balón hacia afuera antes de que entrara a la portería y anotara gol.
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Blue Lock: Conectando los Goles
FanfictionEntre los 300 delanteros elegidos para formar parte del proyecto Blue Lock, había un infiltrado en el peor equipo, en el equipo Z. Un mediocampista que debería evaluar el rendimiento de los jugadores de primera mano y bajarles los humos para que el...