Correr de un lado a otro de la cancha, siendo perseguidos y persiguiendo, no parecía haber manera de que el equipo de Isagi tomara la delantera en aquel partido.
Incluso Bachira lo supo, supo que el resultado de ese partido había sido decidido hace mucho, y no había nada que pudiera hacer para cambiarlo.
Pero saber esto no impidió que el chico de mechas rubias siguiera jugando al máximo, dando todo de él por ganar, como siempre.
La combinación de Nagi, Rin y Ren eran un tridente letal, y era muy difícil seguirles el ritmo.
En todo el partido, Bachira apenas había tocado el balón.
"Ahg, otra vez. Ponte de pie" Ordenó Isagi a Bachira, dándole la mano para ayudarlo a ponerse de pie.
Una vez más, Nagi los había burlado y dejado atrás.
La situación estaba frustrando a Isagi, pero Bachira se sentía sorprendentemente tranquilo.
Estaba observando, a su monstruo, a los monstruos de los demás.
Cómo se deslizaban por el campo como si nada, amenazantes, fuertes, pero nada que Bachira no hubiera visto antes.
Incluso estaba acostumbrado a que Ren estuviera rodeado de más monstruos de lo normal.
Bachira relacionaba a los monstruos con la capacidad futbolística de cada uno, era como un potencial latente en cada uno de ellos, un compañero que los ayudaba a llegar a su límite y superarlo.
Con Ren esto era diferente, Bachira relacionaba los monstruos de Ren con limitantes, no con limitantes físicas, si no con limitantes psicológicas, limitantes que no le permitan llegar a su máximo potencial. Le daba la oportunidad de tocar el cielo y luego lo arrastraban de vuelta a su oscuro agujero.
Solo podía observar como Ren recibía el balón que Rin le había pasado en el aire, y con una increíble volea le centraba el balón a Nagi para que esté anotara un increíble gol con la cabeza, ni Aryu que estaba junto a él podía detenerlo.
Daba miedo lo buenos que eran ellos tres al jugar juntos.
"Muy bien hecho Nagi" Felicito Ren al acercarse al albino.
Ambos chocaron palmas y puños en señal de celebración, mientras que Rin se mantenía alejado de los dos para evitar cualquier abrazo o celebración extraña.
"Mierda" Por otro lado, Isagi no estaba tan feliz como el equipo Rojo, y se dejó caer al suelo con cansancio.
En un momento de empatía, Bachira se sentó junto a él en el suelo, sin saber cómo consolarlo.
"Son muy buenos, no?" Dijo como si nada.
El de mechas amarillas parecía el menos molesto por estar perdiendo el partido. Pero no era así, en el fondo, se sentía frustrado y desesperado, quería ganar ese partido, pero sabía mejor que nadie que no tenían ninguna oportunidad contra el equipo Rojo.
"Si" Respondió Isagi con un suspiro.
Mientras tanto, Aryu observaba al equipo rojo, de pie junto a ellos, sin siquiera dedicarles una mirada.
"Se complementan muy bien entre ellos, derrochan tanto glamur, que parece que nacieron justamente para jugar en el mismo equipo" Menciono agitando su cabello.
Había una comprensión tacita entre ellos tres, algo más allá de lo que incluso Isagi y Bachira habían logrado.
La clave de aquello era Ren, que compartían una conexión única con Rin, y parecía comprender la mente de Nagi mejor que nadie, ayudando al equipo a conectar.
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Blue Lock: Conectando los Goles
FanfictionEntre los 300 delanteros elegidos para formar parte del proyecto Blue Lock, había un infiltrado en el peor equipo, en el equipo Z. Un mediocampista que debería evaluar el rendimiento de los jugadores de primera mano y bajarles los humos para que el...