36: Debajo de sus narices

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El tiempo se habia cumplido, y los últimos momentos con el equipo Z habían llegado.

Podía ser que Ren fuera el único realmente triste por eso? Si, podría ser.

Todos los demás parecían tan listos para avanzar.

Eso había que Ren, que había llegado muchos pasos por delante, se sintiera atrasado en comparación a sus compañeros.

Teóricamente, seguía siendo mejor, pero por alguna extraña razón, sentía que al llegar a Blue Lock, se había estancado, parecía que todos avanzaban más rápido que él.

Quiso creer que se debía a sus dudas, sobre su verdadero lugar en el campo de juego.

Extrañaba cuando se lucía corriendo por el campo, dejando a los jugadores atrás apesar de que no era el mejor regateador, extrañaba sus movimientos parecidos a un baile muy fluido, extrañaba el entendimiento que tenía con sus compañeros del Napoli, extrañaba saltar, elevarse por los aires y superarlos a todos, extrañaba maniobrar en el aire, entre los jugadores, bajar a defender.

Por eso, a escondidas de todos, Ren siguió entrenando, no podía quedarse atrás, si todos esos novatos (mayores que él en edad) mejoran tan rápido, el tenía que ir el doble de rápido.

Nunca se había tenido que esforzar tanto para igualar a otros jugadores.

Pero el proyecto Blue Lock parecía tener algo, que motivaba a todos a mejorar.

Si alguna selección más sólida que Japón tuviera el mismo proyecto, no había dudas de que se volvería los mejores.

Cómo desearía que su amada Brasil estuviera avanzando a pasos agigantados como Japón.

Su sueño era jugar con Brasil y ganar un mundial, pero mientras más tiempo pasaba en Blue Lock, más se daba cuenta de que no le convenía.

No sabía su lugar en el campo, ya no sabía para que selección jugar, y ni siquiera sabía que equipo escoger para jugar luego de salir de Blue Lock (por suerte, Ego se estaba encargando de eso). Lo peor fue que no podría jugar la champions, su primera champions, se la había perdido.

Si tenía mala suerte cuando saliera de Blue Lock jugaría la Europa Legue, o peor, terminaría sin jugar ninguna competición en Europa.

Tenía que encontrar su verdadero lugar, y al igual que sus compañeros, seguir avanzando.

Así que entreno, pensó, y se sentó a descansar, cada paso que daba estaba fríamente calculado.

Había hablado con sus padres, en busca de una respuesta, incluso había considerado hablar con Víctor.

Pero Sae, volvió a llamar, y le dió la respuesta.

"Hmm, Ren, eres un mediocampista ofensivo, de toda la vida, incluso si intentas jugar como delantero, como defensa o alguna otra posición, pero tienes una idea tan... Atrasada de un mediocampista ofensivo, desde nuestra última llamada, ahora que tuve que volver a Madrid y seguir jugando, me di cuenta de que yo tampoco comprendía. Tampoco comprendía el verdadero rol de un mediocampista ofensivo, creía que tenía que quedarme atrás, simplemente hacer asistencias, y olvidarme de tirar a puerta. Me equivoqué, y tú también... Pero tú mismo tienes que encontrar tu lugar, tu verdadero rol como mediocampista ofensivo, con cada paso que das, estás más cerca"

Cómo siempre, su amigo de pelo rojo hablando con palabras cargadas de verdad.

Ren hace tiempo creyó que comprendía, pero no, no lo hacía, y cada vez que entrenaba, se daba cuenta de aquello.

Aún no entendía, pero lo haría, con el tiempo.

Y seguir avanzando en Blue Lock era la única forma de lograrlo.

Blue Lock: Conectando los GolesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora