"Y ahora que hacemos?" Preguntó Kira al ver todo el equipo reunido.
Las constantes celebraciones de Igarashi luego de anotar su primer gol ánimo a muchos.
Era sorprendente como un simple gol podía hacer que todo el panorama cambiara, que un equipo se motivara a ganar y el otro perdiera toda esperanza.
El saber que el gol venía del peor jugador del equipo Z solo avivó más las llamas de su pasión.
Cómo habían predicho Isagi y Ren, por primera vez en el partido, todo el equipo Z iba a por la victoria, sin peleas ni nadie que quiera rendirse.
"Usaremos nuestra estrategia anterior, rogando a por un milagro" Respondió mientras sentía la mirada penetrante de Raichi desde afuera de la cancha.
Lo que ningún equipo sabía es que tenían la supervisión de alguien de mayor nivel que simplemente Ego.
...
Un hombre vestido de forma elegante estaba sentado junto a Ego, observando el partido.
"Hmm... Está jugando de una manera bastante parecida a cuando jugaba en el Napoli" Mencionó el hombre rascando su nuca.
Este hombre se había tomado la molestia de ir a ver los dos partidos del equipo Z.
"Y eso te molesta? Simone?" Preguntó Ego sorbiendo de su sopa.
El entrenador del Inter de Milan apenas miro a Ego, para nada sorprendido por su actitud tan grosera al comer.
Los ojos del hombre seguían fijos en la pantalla, observando las repeticiones de algunas jugadas de Ren durante el partido.
"Dijiste que me entregarías a un jugador completo. Aunque no te culpo es difícil hacer que los jóvenes de gran potencial encuentren su camino a esa edad" Simone agarro sus propios palillos, y sin mirar a Ego, le robó un poco de ramen para llevárselo a la boca "Es por eso que necesito ficharlo antes que nadie. Al ser tan joven puedo moldear su estilo de juego casi como quiera, puedo convertirlo en delantero o que mantenga su posición, incluso hacer que retroceda a una posición más defensiva" Dijo luego de tragar el ramen que le robó a Ego.
El hombre de pronunciadas ojeras miró mal al entrenador del Inter, no muy feliz luego de que le robara su comida, pero al final solo se mantuvo callado mientras seguía comiendo.
"Ren no es un trozo de arcilla, si pasa mucho tiempo aquí entre delanteros se adaptará a un estilo de juego más ofensivo. Será difícil para ti hacer que baje a defender" Ego limpio con su pulgar una mancha de salsa picante en su mejilla, y sin importarle que pareciera grosero, se llevó su dedo a la boca
Simone asintió con la cabeza, volviendo a robarle a Ego más ramen, estaba bastante maravillado con el sabor de ese plato de comida.
Para cualquiera sería raro ver a ambos así.
Dos grandes figuras, una del fútbol italiano y otra del fútbol japonés, sentados en una oficina oscura, con ropa sucia tirada por doquier, un montón de platos acumulados en el lavaplatos. Mientras, esas dos figuras estaban sentadas como si nada, ajenas al desorden que les rodea, comiendo del mismo plato de ramen y observando como unos adolescentes jugaban un partido de fútbol.
"Es por eso que vine en persona. Tengo preguntas importantes que hacerte" Simone tomo algo de agua para calmar a sus papilas gustativas luego de consumir tanta salsa picante.
Viendo que la conversación se torna parecida a la conversación que tuvo hace no mucho con el entrenamiento del Napoli, Ego no tardó en interrumpir las palabras de Simone.
"No planeo dejar que Ren se vaya pronto solo para que hagas que defienda. Sería una gran desperdicio de potencial, el talento de Ren está al frente, atacando, incluso si no es siempre marcando goles, defender no es y no será lo suyo. Si lo que quieres es arruinar el futuro de uno de mis diamantes en bruto, entoces deberías lárgate".
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Blue Lock: Conectando los Goles
Fiksi PenggemarEntre los 300 delanteros elegidos para formar parte del proyecto Blue Lock, había un infiltrado en el peor equipo, en el equipo Z. Un mediocampista que debería evaluar el rendimiento de los jugadores de primera mano y bajarles los humos para que el...
