Cap 48: Tenemos que remontar

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Ataque, fallo a puerta, contraataque, sale de la cancha, tiro lejano, intercepción de balón, robo y robo, fallo y fallo, pase tras pase.

La desesperación motivaba a Barou y a Kira, que daban todo de si para no dejar que Isagi y Aryu pasarán.

El partido parecía estancando, ya que el rubio y su compañero gastaban todos sus esfuerzos en defender, evitando de forma efectiva que se acercarán a su portería, pero lastimosamente les costaba reincorporarse y el contraataque había sido infinitamente más difícil que antes.

Para Isagi, era bastante difícil predecir o vigilar a jugadores tan irregulares y desesperados como Barou y Kira. Se movían de un lado a otro, saltaban, pasaban de una banda a otra como si nada, daban todo de sí.

Perder todo lo que alguna vez habían sido, lo que le daba significado a su vida, aterraba tanto a Barou y Kira que estos no podían dejar de moverse.

Hasta ahora, para el pelinegro había sido más que suficiente su vista para mantener el juego bajo su control, no esperaba que pronto se volviera demasiado.

"Desde cuándo son tan buenos?" Murmuro Aryu a su lado, confundido.

Isagi tampoco podía entender, de que se trataba aquello, pensaba que, como ambos contrincantes se negaban a jugar juntos, sería fácil neutralizarlos, no esperaba que sucediera lo contrario.

"Es caótico, tan sin sentido que parece complementarse entre sí, ambos jugan dos estilos de fútbol totalmente diferentes, no entiendo cómo, tan de la nada, pueden mezclarse tan bien" Mencionó el pelinegro en respuesta a la vaga pregunta de Aryu.

Si el pelinegro tuviera que describir a sus dos rivales con una palabra sería, llama, una llama ardiente, rebelde, imposible de parar, muy difícil de apagar, una llama que le hace entrar en su propio pánico, lo hace estallar.

Eran fuegos diferentes, destruyendo todo a su paso, a ritmos distintos, con capacidades totalmente distintas, pero de alguna forma, al encontrarse bajo la amenaza de ser apagados por el agua, estás llamas se unían y se hacían mucho más calientes que antes. Se volvían una fuerza a tener en cuenta.

No se unían porque querían, probablemente las llamas ni siquiera podían notar su unión, a simple vista seguían siendo dos llamas individuales, nada que ver la una con la otra, pero desde un punto de vista mucho más metódico, se podía notar que aunque cada llama quería brillar y sobrevivir por si sola, con sus propias maneras, para no ser apagadas, se apoyaban la una con la otra.

Así eran Kira y Barou, sus formas de jugar al fútbol, incluso siendo ambos delanteros, era bastante diferente la una de la otra, poner a ambos en un equipo solos, sonaba ridículo, no parecía que fuera a funcionar, un caos total, pero en su egoísmo, lograron combinarse.

Tal vez esté era el fútbol que buscaba Ego, el fútbol que Ren no está a dispuesto a aceptar, un fútbol dónde todos pueden ser goleadores.

"Ya elegiste al más glam?" Le pregunto Aryu luego de que Kira logrará evitar su marcaje, por poco.

Entonces, Isagi miro a la persona seleccionada, y asintió.

"Creo que estaremos de acuerdo".

Kira estaba apunto de convertir otra increíble asistencia a Barou, un centro casi perfecto, por suerte, el portero holograma que hasta ahora había sido inútil, salió para despejar con los puños.

"Idiota!" Se quejo a gritos Isagi.

Pues esto era justo lo que Kira esperaba, y justo lo que Isagi rogaba que no hiciera el robot.

Puesto que Barou obviamente no iba a llevar al centro, si tan solo el holograma hubiera atrapado el balón.

Pero ahora era muy tarda para arrepentirse, con el portero tan adelantado, Barou disparo con un potente cañonazo que dejó perplejo al portero falso.

Blue Lock: Conectando los GolesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora