Coartada || Tara Carpenter x TN male

Ella es la asesina

POV TARA:

-Le dejé un mensaje a mamá diciéndole a dónde vamos -me dijo Sam.

Me puse a buscar en el bolso a mis pies mi inhalador, pero no lo consigo, y la oscuridad del auto tampoco ayuda.

-¿Qué estás buscando? -me preguntó TN a mi lado.

-Ay no, ¿dónde está? -susurré y encendí la luz interna del auto para buscar mejor.

-¿Qué cosa? -preguntó esta vez Sam.

-Mi inhalador, siempre traigo uno extra -mi voz salió un poco temblorosa, tengo que tratar de controlarme, si me dejó dominar por el pánico no podré respirar.

-¿Quieres volver?

-Wow, ok, yo voto por no volver al hospital de la muerte -respondió Richie a la pregunta de Sam.

-¿Y si vamos a una farmacia? -sugirió TN.

-Me van a pedir receta -lo miré de reojo-, pero dejé un extra en casa de Amber, su casa está de camino.

-No, no, no, no, no -Richie me está poniendo más nerviosa.

-Pero solo entro y salgo -dije.

-¿Crees poder aguantar hasta Modesto? -inquirió Sam.

-No, creo que no -sentía que iba a llorar en cualquier momento.

-Ok, ¿cuál es la dirección?

-Calle "ni de loco voy" 13.

-Richie -reprochó Sam-, lo necesita.

-Sí, y yo necesito conservar la sangre dentro de mi cuerpo igual que tú.

-Te lo suplico -mi garganta empezó a secarse, me está costando respirar.

-Está bien -me susurró Sam para tratar de calmarme. Luego acusó a Richie con la mirada.

-Ok, ya... pues, a ver, ¿cuál es la dirección?

Le mandé el GPS a Sam para que lo guiara, si seguía hablando me iba a quedar sin aire más rápido.

TN pasó su brazo por mis hombros y me acercó a él.

-Tranquila, respira pausadamente, pronto estarás mejor -me dio un beso cariñoso en la cabeza, solté un suspiro y cerré los ojos, tratando de relajarme.

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Sentí que el auto se detuvo, estaba entre la inconsciencia y la realidad.

-Perfecto, tiene fiesta -se quejó Richie, abrí los ojos para observar la casa de Amber-. ¿Quién hace fiestas cuando hay asesinatos en todas partes? Abortaré el plan.

-No, no, ya estamos aquí -intervino Sam-, tengo que entrar y traerlo, vuelvo en un minuto -salió del auto.

-Yo también voy -dije y me dispuse a salir también.

-Las acompañaré también -avisó TN.

-Oigan, si creen que me quedaré aquí a que me maten, están locos -dijo Richie.

Los cuatro salimos del auto y nos adentramos a la casa. El lugar estaba repleto de personas tomando, hablando y bailando.

Nos vieron entrar y empezaron a gritar y alzaron sus vasos, como si estuvieran brindando por nosotros.

Vimos a Amber acercarse a nosotros, pasando entre el mar de gente. Me abrazó.

-¿Qué estás haciendo fuera del hospital? ¿en serio es prudente que estés caminando?